viernes, 25 de mayo de 2012

RESULTA



Por Raúl Degrossi


Resulta que el principal problema político de la provincia de Buenos Aires era la interna entre Scioli y Mariotto (que vendría ser el nuevo Cobos), pero el Senado presidido por Mariotto votó la reforma tributaria propuesta por Scioli como venía del Ejecutivo; y el piquete agrogarca con recule opositor incluido, demostró que los mayores problemas bonaerenses pasaban por otro lado.

Resulta que muchos celebramos el apoyo opositor a la expropiación de YPF como una muestra de que los partidos opositores empezaban a revisar su estrategia, ganando autonomía frente a las presiones corporativas, pero parece que la alegría duró poco, porque ante las amenazas de la Mesa de Enlace tanto radicales como "progresistas" volvieron a las andadas.

Resulta que el progresismo siempre le achaca al kirchnerismo que una de sus principales materias pendientes es encarar una reformas tributaria a fondo, "para que los más tienen, más paguen", pero cada vez que se da un paso concreto (aunque sea mínimo) en esa dirección (como con la 125 o el revalúo del inmobiliario rural en Buenos Aires), siempre los encuentra del otro lado, por un motivo o por otro.

Resulta que, cuando ese mismo progresismo jugó del lado equivocado en el conflicto por la 125, acumulando objetivamente para el lado de la Mesa de Enlace, muchos pensaron que habían aprendido de la experiencia y no volvería a pasar, pero pasó; es decir que ya no hay errores políticos, sino tendencias que marcan decisiones concientemente asumidas, para preservar su propia base electoral.

Resulta que nos dijeron siempre que la Federación Agraria es algo así como la "izquierda" de la Mesa de Enlace, que representa a los "pequeños y medianos" productores; pero siempre termina coincidiendo (en el reclamo, en los métodos) con la asumida derecha agrogarca: CRA, la Rural, que representan a los garcas con patente de garcas, digamos.

Resulta que Scioli es de derecha y conservador, y el socialismo santafesino progresista y de avanzada, pero los agrogarcas se alzaron en armas contra la reforma tributaria de Scioli, y le piden que haga como Bonfatti: que el revalúo de los campos para aumentar el inmobiliario rural lo haga progresivamente, en seis años.

Resulta que nos viven diciendo que el kirchnerismo quiere asfixiar económicamente a sus opositores, pero los que en Buenos Aires son oposición se oponen a la reforma y la impiden, negando el quórum; pero cuando son gobierno (como en Santa Fe) la impulsan (moderada, a tono con los modos progresistas), y algunos que se dicen kirchneristas se oponen, mientras otros kirchneristas estarían dispuestos a apoyarla.

Resulta que en ambos casos los aumentos de impuestos aportan recursos a los municipios y comunas de todos los signos políticos (oficialismos y oposiciones, provinciales y nacionales), pero en Buenos Aires los opositores (por ejemplo los radicales, que gobiernan intendencias) esperan que el gobierno cargue con el costo de intentar cobrar esos impuestos.

Resulta que Binner dice todo el tiempo que no puede ser que una peluquería pague Ingresos Brutos y otras empresas que la levantan con pala no, pero en Santa Fe mandó a cajonear un proyecto para cobrarles ese impuestos a las cerealeras y aceiteras exportadoras, y en Buenos Aires el FAP no quiso dar quórum para que empiecen a pagar los impuestos las empresas de televisión por cable, como las que tiene Clarín.

Resulta que la oposición se está fijando todo el tiempo en los negocios de los empresarios "K" como Cristóbal López, o en cómo se reparte la publicidad oficial entre los medios que están en manos de esos empresarios como Spolzky, pero cada vez que una medida afecta a los intereses de Clarín (como hacerle pagar Ingresos Brutos por el cable), a ello los encuentra en contra, defendiendo objetivamente los intereses del grupo.

Resulta que Ricardito Alfonsín dice que lo que tiene que hacer Scioli no es una reforma tributaria, sino pedirle a la Nación que le devuelva la coparticipación que le sacó a la provincia de Buenos Aires, pero  los 10 puntos de coparticipación que cedió Buenos Aires los entregaron Armandáriz (último gobernador radical) y su papá cuando se sancionó en 1988 la actual ley de coparticipación 23.548, y para modificarla se necesita mayoría agravada en el Congreso, y además que la aprueben todas las legislaturas provinciales; de acuerdo con la reforma constitucional del 94' gestada también por Alfonsínl padre con Menem en el pacto de Olivos.

Resulta que Buzzi dice que Scioli es un virrey que recauda para la reina Cristina, porque el verdadero propósito de la reforma tributaria es que los agrogarcas paguen Bienes Personales y Ganancia Mínima Presunta; pero la Nación recauda los impuestos que a todas las provincias le representan más de la mitad de sus ingresos, y es la que tiene que poner cara de perro con los mayores contribuyentes (que son los que tienen también mayor capacidad de lobby) cobrándoles por ejemplo Ganancias o retenciones, afrontando el costo político (y si no recordar el conflicto de la 125), y por la tercera parte de lo que le cuesta a cada provincia recaudar sus propios impuestos.  

Resulta que nos dicen que la oligarquía terrateniente (la clase que formó este país tal como lo conocemos) ya no existe y se habría evaporado en el aire por obra y gracia de los cambios que se operaron en los modos de explotación agropecuaria, pero cuando tratan de actualizar los avalúos a la propiedad rural (que en Buenos Aires no se tocan desde 1955), esa misma clase (con la inestimable ayuda de sus aliados "progres" y "pymes") sale a la calle, copa la Legislatura y logra impedir que la reforma se sancione.

Resulta que nos dicen que tenemos que vivir en una economía libre, regida por las leyes del mercado; pero el Estado no puede cobrarle a los dueños de los campos impuestos acordes a lo que el mercado dice que valen.

Resulta que nos viven diciendo que la solución al problema del federalismo es que se aumente la coparticipación a las provincias, y al déficit de calidad institucional, que se termine la corrupción; pero se oponen a aumentar los avalúos de los campos para no sólo pagar menos de inmobliario rural de los que les correspondería, sino para escaparse de Bienes Personales y Ganancia Mínima Presunta, dos impuestos nacionales que se coparticipan a las provincias, y en los que -de mantenerse los avalúos como están- el Estado contribuiría a mentirle al propio Estado, para favorecer a los que eluden pagar impuestos.

Resulta que, cuando fue el conflicto de la 125, el "campo" no quería pagar retenciones móviles (y sigue pidiendo que se eliminen las fijas) porque ya tenía que pagar muchos impuestos, como el inmobiliario, Bienes Personales, Ganancias o Ganancia Mínima Presunta; pero ahora no quieren que les aumenten el inmobiliario porque pagan retenciones, y así de paso (si no aumentan los avalúos) no pagan Bienes Personales o Ganancia Mínima Presunta.

Resulta entonces que a lo mejor la realidad es un poco más compleja que las cosas que no dicen, y los lugares comunes que se repiten. 

1 comentario:

  1. coincido con su certero analisis, ahora desde cuando Calvo es o fue Kirchnerista? Esta semana ya estuvo reunido con la FAA en Presidente Roca,(pueblo cerca de Rafaela), llevando de las narices a varios Presidente Comunales. Es el alter ego de Perotti, que nunca fue K, aunque despues de las elecciones del 2003 y 2007 ambos colgaron los cuadros de Nestor y Cristina en sus despachos, en la 125 lo descolgaron, (renunciando Perotti al consejo nac. del pj), despues de la evidencia del 54% lo volvieron a colgar. Surfeantes como el Kachi, no?

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