lunes, 25 de junio de 2012

LOS RADICALES, LOS LOBBIES Y LOS AUMENTOS DE IMPUESTOS


Los concejales del oficialista Frente Progresista levantaron las manos en soledad para aprobarle a Corral el nuevo método de zonificación y base de cálculo de la Tasa General de Inmuebles, que traerá nuevos aumentos; junto a sustanciales aumentos de los importes de las multas por infracciones al Código de Faltas municipal, por ejemplo baldear la vereda en días no permitidos. 

Hasta acá al menos no hemos advertido que ningún medio local haya titulado "El Concejo se se ha convertido en una escribanía del Departamento Ejecutivo", como suelen hacer cuando el Congreso aprueba las leyes que envía Cristina.

Los argumentos son los mismos con los que -sin ir más lejos- Bonfatti sustenta la propuesta de reforma tributaria: "lograr una mayor equidad tributaria, para que los que más tienen, más paguen".

Y así como señalaron los concejales del radicalismo (que llevaron el peso de defender la propuesta del intendente) que los valores de las multas hacía mucho que no se ajustaban, omitieron decir que por el contrario la Tasa tuvo un aumento de más del 87 % en la gestión de Barletta, y otro 48 % apenas asumido Corral, hace seis meses.

La reforma incorpora un coeficiente de zonificación en base a los servicios con que cuentan los diferentes barrios de la ciudad, sin que quede en claro si las propiedades serán revaluadas por contar en la zona con servicios (como el gas natural) que la Municipalidad no construyó, teniendo además en cuenta que la Tasa es retributiva de servicios (básicamente alumbrado, barrido y limpieza), por lo que al parecer, los que menos servicios municipales cuentan (hay barrios que no tienen recolección de residuos, en otros es semanal o dos días a la semana, por ejemplo) pagarían menos en teoría.

El asunto es discutir como se distribuirán los mayores recursos en servicios para los santafesinos, es decir si ese criterio no redundará aun más en perjuicio de los barrios más alejados del centro, y que carecen de muchos servicios de los que presta el Municipio; algo así como "que quieren, que por lo que pagan de Tasa les juntemos la basura".

La otra enorme duda es que pasará con el Fondo Municipal de Obras Públicas conformado desde 1991 (Ordenanza 9380) por un porcentaje de la recaudación percibida en concepto de Tasa General de Inmuebles afectado exclusivamente a obras de infraestructura ejecutadas por el municipio, porque ni en la gestión de Barletta ni en lo que va de la de Corral se advierte (a tono con lo que pasa con el gobierno provincial) una fuerte apuesta a la obra pública; que les demuestre a los vecinos de la ciudad que se justificaban, al menos desde ese punto de vista, los anteriores aumentos de la TGI.

El aumento fue decidido como quien dice "entre gallos y medianoche", en un trámite express, con -como se dijo- el exclusivo apoyo del oficialismo y sin atender a los pedidos de la oposición en el Concejo de estudiar el tema en más detalle y conocer la opinión de los vecinos.

Que no tenemos (más allá de las representaciones políticas) un fuerte lobby que nos defienda, como si tienen por ejemplo los propietarios de los campos santafesinos, que pudieron lograr que los legisladores provinciales del radicalismo (el mismo partido que gobierno la ciudad) ser opusieran de plano a todo intento de reforma tributaria provincial que implique retocar los avalúos fiscales que están iguales hace más de veinte años, para acercar en algo el impuesto Inmobiliario Rural a los valores de mercado de las propiedades agropecuarias.

A lo mejor es porque el radicalismo (que llevó en las últimas elecciones nacionales al presidente de la Sociedad Rural de Santa Fe como candidato a diputado) no tiene ningún concejal que haya sido por ejemplo presidente de una vecinal o algo parecido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario