Bien ahí los radicales, convocando a unirse contra la re-reelección a la CGT, donde están todos (empezando por Moyano) atornillados hace años a los sillones, porque tienen reelección indefinida y es casi imposible armar una lista opositora, junto con Michelli que viene de hacer fraude en las internas de la CTA volcando padrones y quemando urnas al mejor estilo Luisito Barrionuevo, y la Iglesia, que reporta a la única monarquía absoluta teocrática y de derecho divino que existe en el planeta, cuyo máximo líder es elegido a dedo por otros ancianos decrépitos elegidos a dedo por el anterior, y gobierna hasta que se muera.
Y de paso le piden ayuda a los de la Mesa de Enlace, que siguen lamentándose porque la Revolución Francesa de 1789 terminó con el feudalismo, y porque el kirchnerismo les impide seguir practicándolo acá, con el nuevo Estatuto del Peón de Campo; y a los de la UIA que hace años se ponen de acuerdo en turnarse unos años cada sector en el manejo, para no tener que hacer elecciones; o sea, toda gente avezada en prácticas democráticas, alternancia y todo eso.
Y a fuerzas políticas que jamás han hecho algo siquiera parecido a una interna (como el PRO o la Coalición Cívica) porque tienen liderazgos personalistas, mesiánicos y billeteriles, según el caso; o si la hicieron terminó en un completo papelón, como el del peronismo federal con la interna de los papelitos entre Duhalde y Rodríguez Saá.
Ojo: los radicales serían casi los únicos coherentes en todo este menjunje: ellos jamás pero jamás de los jamases, serán reelegidos.
Y están cada vez más lúcidos, eh: Morales, por ejemplo, descubrió que la re-reelección sería para que el kirchnerismo se perpetuara en el poder, hasta la semana pasada estaba totalmente convencido de que querían reformar la Constitución, para que Cristina perdiera por paliza en las elecciones del 2015.
Lo que no queda claro en las declaraciones de Sanz es si lo que la gente quiere es que los opositores se caguen a trompadas, o se unan; nos inclinamos por lo primero: al menos a nosotros la mayor parte de los consultados al respecto nos dijeron algo así como "que se maten".
Y en la foto se lo ve claramente al propio Sanz diciendo "la AUH se va por la canaleta del juego y la droga, así ponen la boca los pibes cuando se fuman un porro".
Encima aparece Hermes, borrando los límites y sacando la bolilla negra afuera del bolillero, como vemos acá:
Que lindo va a ser verlos a Lozano y De Gennaro junto con "Vicky" Donda y Tumini vestidos de monaguillos en la procesión de Corpus siguiéndolo a Bergoglio, y haciendo un alto para saludarlo a Macri que sale desde el balcón de la jefatura de gobierno, frente justo a la catedral.
Muy curioso lo de Binner poniendo como ejemplo su alianza con los radicales acá en Santa Fe, no sólo porque hay riesgo de que se caiga la sesión de la Legislatura del jueves para tratar la reforma tributaria porque los legisladores de la UCR no dan quórum en las comisiones para emitir dictamen y poder llevar el proyecto al recinto; sino porque acá es Morales el que dice todo lo contrario de él:
Ojo al piojo: no hay que juntarse con Macri porque es un cagador, aunque hace una semana fue a Jujuy y me saqué una foto con él, ¿o era Lanata?; y no queremos hacer una Unión Democrática ni esto tiene fines electoralistas, pero hay que trabajar para que el gobierno no saque votos el año que viene; porque sino la re-reelección (que es para Cristina, ojo, ¿se creen que se le escapó?, no señor) sale con fritas.
Para comerlas junto con el vacío que hay en la parrilla opositora, o si dejamos el arco vacío, el kirchnerismo nos llena la canasta el año que viene, y Barletta convoca a todos, pero no hace una convocatoria, debe ser un concurso de acreedores, para liquidar los restos del radicalismo; en fin, todo muy complejo.
Pero seguramente en la próxima procesión de Corpus (porque ya pasó San Cayetano) todo ésto se aclara, o nos dejan de poner las bolillas negras con tanta sanata.
Porque como dijo Cleto, la re-reelección no está en la agenda de la gente, que por lo que está verdaderamente preocupada, es por el recargo por las compras en el exterior con tarjetas de crédito, un tema que domina la mesa de los domingos, sin ir más lejos.
Trabajan para derrocar a Cristina, no para poder cambiar el país. Con una opo como esta ¿quién necesita propaganda? Son unos genios.
ResponderEliminarEl decrépito Binner ahora no pone bolilla negra... pero no hace mucho lo despreció a De Narváez. Para mi que hay un puja entre estos dos por el Coleston 2000 que casi ni se consigue por culpa de Moreno jajajajaj
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