LAS COSAS POR SU NOMBRE

Ahí nos vamos entendiendo, y hasta cierto punto, habría que agradecerle al nuevo presidente de la UIA la sinceridad.

Porque vieron que todo el tiempo nos están hablando de "competitividad": que si la perdimos porque el tipo de cambio está bajo, que si la inflación la erosiona, que la tenemos que recuperar; pero nunca nos explican bien que es lo que ellos entienden por "competitividad".

Y acá el amigo Méndez lo dice muy clarito: márgenes, o sea, utilidades, beneficios, ganancias.

De modo que "competitividad" expresa (en términos del marxismo clásico) el nivel de la plusvalía; o en términos más pedestres y comprensibles, el tamaño de la pala con la que la piensan seguir levantando.

O haciendo lobby para lograrlo, por eso el mismo Méndez dice en la nota que "se comprometió "a trabajar por la unidad de los empresarios. Este es un gobierno muy fuerte, y si no hay unidad la relación se torna despareja"."

Pero mirá que monada el muchacho, al final es como Lanata: siempre se pone del lado del más débil, que en este caso son los empresarios.