Para esa anónima trabajadora o trabajador con el que nos encontramos al final del peregrinaje por las góndolas del supermercado.
Que no forma ni remarca precios, ni se apropia de los excedentes de las cadenas de valor, ni abusa de su posición dominante, ni especula con el dólar para generar inflación.
Y tampoco es accionista del supermercado, ni le dan participación en las ganancias como dice la Constitución.
O que no toma la decisión de esconder los productos de "Precios Cuidados", o no reponerlos.
O que no toma la decisión de esconder los productos de "Precios Cuidados", o no reponerlos.
Que además gana poco, o está en negro o precarizado/a; y tiene que trabajar más de la jornada legal, porque lo/la hacen quedar a reponer productos, o limpiar el local.
Y cuando le aumentan el sueldo, tiene que aguantar que lo usen como excusa para seguir remarcando los precios.
Pero que termina siendo una especie de sicólogo/a social, y receptor/a de todas las puteadas que en realidad se deberían comer los hijos de puta que aumentan los precios.
El blanco erróneo de nuestra catarsis.
Pensemos en eso, y en que son trabajadores/as igual que nosotros, que sufren como nosotros la inflación y tienen nuestros mismos problemas.
Tengámoslo en cuenta para la próxima, para no confundir el enemigo.
Me alegra compañeros que hagan este comentario, aunque soy de visitar poco el super porque prefiero comprarle a mis vecinos comerciantes pequeños que con ese negocito sobreviven, pese a los mayoristas que cuando deben reponer poco margen de ganacia les dejan. Y es así todos esos empleados son los nuevos esclavos porque a las horas de atención deben sumarles 3 horas más que casi nunca le son reconocidas en el salario.
ResponderEliminarAsí que magas, hiper y supermercadistas por mí se pueden a la puta madre que los parió.
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ResponderEliminarespecialmente en los super"dia", !que nombre! da vergüenza ajena el ambiente desagradable que se nota. en los chinos... y en todos, coincido con la nota, parte de los faltantes de la década ganada. Y parte de la caradurez de los sindicalistas
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