Ayer por la tarde la Cámara de Diputados le dio sanción definitiva al proyecto de ley enviado por Cristina para "blindar" las participaciones accionarias del Estado en un conjunto de empresas, incluyendo las que son parte de los activos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) de la ANSES; que fuera comentado en detalle en ésta entrada.
El proyecto -que nosotros calificamos entonces como un "cepo" a las privatizaciones- contempla que para que el Estado se desprenda de esas acciones se necesita autorización previa por ley del Congreso, otorgada por una mayoría de dos tercios de los votos de los miembros presentes de cada Cámara (el mismo requisito establecido para las acciones del Estado en YPF según lo explicado acá); y crea además la Agencia Nacional de Participaciones Estatales en Empresas, que tendrá a su cargo definir y coordinar la estrategia a seguir por el Estado en esas compañías, en base a su participación accionaria en cada una.
La iniciativa tuvo 127 votos positivos (todos del FPV y sus aliados) y 84 en contra, que son de los legisladores que se pueden ver en las imágenes del acta respectiva, que ilustran el post.
Como se puede ver, a la hora de votar en contra de un proyecto promovido por el gobierno que en este caso trata de proteger el patrimonio estatal y dificultar su venta como se hizo en los 90', coinciden todos: los supuestos "progres" y los supuestos representantes de "la nueva política", los que ven todo mal lo que hace el gobierno y los que dicen que van a "conservar lo bueno, modificar lo malo y hacer lo que falta", los que en los 90' avalaron las privatizaciones y los que se opusieron.
Revisando el listado, se ve una enorme coincidencia de fuerzas políticas (y en no pocos casos, de las mismas personas) con los que en su momento también votaron en contra de la ratificación del DNU 441/12; que eliminaba las restricciones establecidas en tiempos de Menem y Cavallo por la Ley 24.241 (la que creaba el sistema de AFJP) a los derechos políticos que el Estado puede ejercer en su condición de accionista de esas empresas: acá pueden ver el listado de los votos negativos en ese caso, para comparar.
Es decir que algunos no sólo quieren un Estado bobo (que tenga acciones que no le permitan ejercer ningún derecho), sino además dejar la puerta abierta para volver a los 90', y a la política de privatizaciones.
Además de los 127 votos a favor y 84 en contra, hubo 5 abstenciones; que como no podía ser de otra manera correspondieron a los "terribles revolucionarios" del frente de izquierda y del degenarismo, seguramente disgustados porque el proyecto no dispuso -lisa y llanamente- expropiar todas empresas, sin indemnización.
Y también hubo 40 ausentes, entre ellos algunos vagos consuetudinarios célebres que no creen necesario darse una vuelta por el Congreso cuando se discuten leyes, o que no consideraron ésta en particular tan importante como para estar.
Entre los "borrados" más célebres podemos mencionar al rabino Bergman, Graciela Camaño, De Mendiguren, De Narváez, Victoria Donda, Claudio Lozano, Mc Allister, Sergio Massa, Facundo Moyano, Margarita Stolbizer y Federico Sturzenegger
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