"La industria del acero de América latina alertó sobre la invasión de
productos siderúrgicos chinos a precios subsidiados e instó a los
gobiernos de la región a trabajar en conjunto para evitar que los
grandes excedentes de país asiático se vuelquen masivamente al mercado
regional. (o sea están pidiendo la intervención del Estado, en forma de protección arancelaria o administración del comercio exterior, para frenar importaciones a precio de dúmping por supreproducción)
“En un mercado mundial en el que todas las empresas ajustan y paran plantas por la sobreoferta, China cada vez produce más y exporta más, lo que sólo se explica porque esas empresas, la mayoría propiedad de Estados provinciales chinos, no se manejan con las mismas reglas del resto”, explicó Martín Berardi, director de Ternium y presidente de Alacero. (o sea que le piden al Estado que las proteja de la competencia de empresas estatales, que por ser tales no ajustan ni paran plantas por la sobreoferta, y por eso producen y exportan más. Ojo con el argumento chicos, a alguno se les puede ocurrir estatizarlos directamente en lugar de "protegerlos", como hizo Chávez con Sidor)
Desde Alacero recomendaron a las autoridades políticas negociar en conjunto con China, diversificar sus fuentes de financiamiento y fortalecer el comercio intrarregional. “No queremos proteccionismo pero sí nivelar el campo de juego”, protestaron. (no, claro, piden la intervención del Estado contra sus competidores del mercado pero eso no sería proteccionismo. y "diversificar sus fuentes de financiamiento" debe leerse como volver al FMI y los "mercados" porque China -lo dicen en el documento- no es una economía de mercado)
El CEO de Ternium, Daniel Novegil, presentó las conclusiones del trabajo institucional que elaboraron los economistas Bernardo Kosacoff y Dante Sica. El resultado más del informe es la reprimarización de la economía de la región durante los últimos 15 años años, con una caída global de la participación de la industria en el PBI. El más afectado fue Brasil, cuyo complejo manufacturero pasó del 18% en 2004 a 11% en 2014. No es el caso de la Argentina, en el que la industria mantuvo su nivel de participación durante todo el período. (o sea que el único país que evitó reprimarizar su economía y por el contrario creció en desarrollo industrial fue el que no aplicó las políticas que ellos suelen sugerir, y ahora ustedes reiteran. Mirá vos)
Con todo, el plan general recomendado a los gobiernos del subcontinente es impulsar un plan de reindustrialización que promueva inversiones en el sector, fortalezca toda la cadena de valor y el tejido industrial, desarrolle programas de inversión en infraestructura y recupere el proceso de integración regional para intensificar el comercio intrazona. (perfecto, estamos de acuerdo, la pregunta es quien pone la tutuca ¿ustedes o el Estado, que también los tiene que proteger de la competencia?)
En el capítulo argentino, la recomendación es una mejora en el tipo de cambio, promoción de inversiones, reducción impositiva y de costos de logística, protección contra “la competencia desleal” y “movilidad laboral”. (o sea devaluación, jubileo fiscal, flexibilidad laboral e inversión en infraestructura por el Estado -con menos impuestos- mientras los protege de la competencia. La chancha, los 20 y la máquina de hacer chorizos)
Dentro de este panorama áspero, la situación argentina presenta un panorama particular. Frente a la caída regional del consumo, que en Brasil acumuló más de 20% en dos años, en el país el mercado se expandirá 3%. Esta actividad está traccionada por el mercado interno y el activismo estatal para sostenerlo: construcción pública y privada (plan Procrear incluido), fabricantes de línea blanca y energía (con YPF) a la cabeza. El dato negativo fue la demanda de industria automotriz. (es decir que la Argentina se diferenció del resto de América Latina justamente por las políticas contracíclicas implementadas por el gobierno, criticadas por Paolo Rocca y sus amigos, todo el tiempo. Y la industria automotriz cae porque su principal mercado es Brasil, que hace tres años está en recesión y la profundiza, por seguir las políticas que ellos recomiendan acá. Unos genios)
En este marco, es probable que antes de fin de año Acindar ponga en marcha el nuevo tren de laminación para producir aceros especiales par la construcción, que demandó una inversión de 100 millones de dólares y elevará la capacidad de producción de la compañía en unas 450 mil toneladas. El año que viene se espera la inauguración de la nueva planta de Gerdau Sipar. (o sea una inversión que no querían hacer pero el gobierno los forzó a hacer a través de sus directores en la empresa en representación de la ANSES -que no querían aceptar- y otra que llegó en medio del discurso de "estamos aislados del mundo por el cepo y no llegan inversiones")
Pese a que el consumo interno es el que este año permitió aguantar al sector siderúrgico local, la gran apuesta de los directivos de las principales firmas argentinas es que el cambio de gobierno llegue con algún nivel de corrección cambiaria y de recorte fiscal bajo el brazo. Y más ortodoxia económica, salvo con China. “Se viene una economía más abierta”, dijo Berardi, quien también confirmó que por el duro panorama global “se está frenando el alto horno uno” de Siderar. (es decir que estarían dispuesto a pegarse un tiro en el dedo gordo del pie reclamando políticas exactamente inversas a las que les permitieron crecer y capear el temporal de la crisis, y vamos a una economía más abierta pero cerrada a los chinos, que son la primera economía del mundo, reconocida por el FMI. Claro que con la devaluación solucionan el problema, vía recomposición de la tasa de ganancias, que pasarían de siderales a galácticas; porque además de exportar venden al mercado interno con listados de precios que ya están en dólares, y posición brutalmente dominante)
José Giraudo, de Acindar (Arcelor Mittal), concluyó: “Lo que vamos a
ver es una transición de un modelo orientado al consumo hacia un modelo
orientado a la inversión. Y admitió que “esto puede tener un efecto
transitorio que obligará a ajustarse a la coyuntura”." (contra toda la evidencia -aportada por el estudio que ellos mismos contrataron- que indica que en la Argentina creció la inversión en el sector, impulsada por el consumo o sea la mayor demanda, impulsada a su vez por los planes del gobierno, dicho por ellos mismos. No necesitan protección: necesitan un sicólogo)
(*) Las negritas son nuestras, el original completo acá.
Posdata: acá ya saben en que diario sólo te cuentan los reclamos del sector (de Techint, bah, lo que no está en la AEA no está en el mundo), sin la más mínima mención al documento de los economistas contratados por ellos, que da cuenta de los logros alcanzados en el desarrollo de la industria en el país.
Posdata: acá ya saben en que diario sólo te cuentan los reclamos del sector (de Techint, bah, lo que no está en la AEA no está en el mundo), sin la más mínima mención al documento de los economistas contratados por ellos, que da cuenta de los logros alcanzados en el desarrollo de la industria en el país.
Esto es lo que más me aterra de la oligarquía criolla: no su vocación oligárquica, sino su ENORME MEDIOCRIDAD y ABSOLUTA CORTEDAD DE MIRAS.
ResponderEliminarBueno, pero hay que reconocer que estas bellas personas vienen a terminar con un viejo mito, no es cierto que pretendan cambiar la economía manejada por el estado a otra economía manejada por gerentes, no, éso es mucho pedir, por sus calidades y percepciones, mo pasan de ordenanzas los cosos, la picha será de gerente pero.....
ResponderEliminarCuanta mentira por Dios.... la producción siderúrgica este año terminará por debajo de la del año 2003, ¿cómo lo explican?
ResponderEliminarDos cositas Alcides: 1) Explicáselos a ellos, que son los que encargaron el informe, 2) Linkeá las estadísticas de las que obtenés tus datos, que te llevan a tan concluyentes afirmaciones
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