Es cierto. No fue magia. Fue la aplicación directa y descarnada de la transferencia de riqueza de los menos favorecidos a los más privilegiados, los que realmente están protagonizando la Revolución de la Alegría.
Ahora, para el logro del otro plan, el de la Pobreza CERO, me gustaría saber cómo y cuándo se disponen, él y su equipo, a hacer desaparecer del mapa a los damnificados, a las víctimas, a los daños colaterales de esa revolución que hace que unos cuántos se estén hiper-recontra-cagando de risa.
¿O se encargará la Ministra de Seguridad de ese tema "humano"?
Realmente, se trata de la Corte de los Milagros. Y FUE VOTADA.
Es cierto. No fue magia. Fue la aplicación directa y descarnada de la transferencia de riqueza de los menos favorecidos a los más privilegiados, los que realmente están protagonizando la Revolución de la Alegría.
ResponderEliminarAhora, para el logro del otro plan, el de la Pobreza CERO, me gustaría saber cómo y cuándo se disponen, él y su equipo, a hacer desaparecer del mapa a los damnificados, a las víctimas, a los daños colaterales de esa revolución que hace que unos cuántos se estén hiper-recontra-cagando de risa.
¿O se encargará la Ministra de Seguridad de ese tema "humano"?
Realmente, se trata de la Corte de los Milagros. Y FUE VOTADA.