martes, 7 de marzo de 2017

EMPEZARON LAS CLASES


La movilización de ayer de los docentes superó todas las expectativas, incluso de los propios: es evidente que la protesta de los maestros se convirtió en el vehículo para expresar en la calle la creciente disconformidad social con las políticas del gobierno, y la necesidad de decirle a Macri que hasta acá llegó.

Antes de la marcha y el paro a los docentes, sus organizaciones y sus dirigentes les tiraron con todo: carpetazos, amenazas, apretadas, "registros de voluntarios", los quisieron enfrentar con los padres y la sociedad, se pusieron la gorra para exigir en las escuelas las listas de los adherentes al paro, para descontarles el día y quebrar la huelga.

El presidente jugó a ignorarlos, y para huir de una ciudad copada por guardapolvos blancos, viajó a un califato lleno de presos políticos, donde impera el estado de excepción; a inaugurar un ciclo lectivo que no empezó, porque los docentes de allí estaban de paro, y la oferta salarial de Morales (el perseguidor de Milagro Sala) fue la más baja de todo el país, casi la mitad del "techo" previsto por el gobierno nacional para las paritarias: ¿el acuerdo de Vaca Muerta para el sector público?.

Un Macri indignado en el mismo registro de su discurso en el Congreso se llevó la historia por delante, y con un particular revisionismo señaló que "ya probamos con el método de la huelga...(que él practica intuitivamente, desde que nació y sin haber trabajado nunca)...y no funcionó..."; olvidando (cuesta creer que lo desconozca) que fueron los paros, marchas y movilizaciones de los docentes, y su carpa blanca de la dignidad en el menemato los que hicieron posible la ley de financiamiento educativo, el 6 % del PBI invertido en educación, ciencia y técnica y la paritaria nacional.

Justo los derechos que hoy su gobierno les desconoce, desentendiéndose de la gestión de la educación como en los tiempos de la ley federal, tirándoles el fardo a las provincias y poniendo en riesgo los fondos del incentivo docente, y para la compensación salarial a los docentes de las provincias más pobres. El gobierno de la "pobreza cero" queriendo condenar a miles de maestros a no llegar a fin de mes.

Otra vez se vio a un presidente ajeno a la realidad circundante, zamarreando -por enésima vez- a criaturas que visiblemente no quieren ser parte de sus puestas de escena, y claramente tenían ganas de estar en otro lado y no allí. Alguien debería decirle que ciertas pulsiones deben tratarse con ayuda profesional, antes de que deriven en algo grave.

Claro que entre uno y otro pucherito (de los dicterios contra el kirchnerismo en el Congreso, a la acusación de los docentes de "oportunistas" ayer) se hizo tiempo para toquetear la ley del blanqueo por DNU, para favorecer los negocios de amigos, parientes y favorecedores: todo un indicador de sus verdaderas prioridades. 

El paro docente y la multitudinaria marcha de ayer le ponen una vara alta a la protesta de la CGT de hoy, al tiempo que le dan un fuerte envión: habrá muchos argentinos que harán doblete y volverán a ganar las calles, en defensa del empleo, el salario y la producción nacional.

Habrá que ver si el triunvirato cegetista está a la altura de las circunstancias de la posta que le dejan los maestros, y conduce el proceso en la única dirección posible: la profundización de la lucha y la protesta, sin sectarismos ni agachadas, ni negociaciones bajo la mesa.

Un gobierno que renuncia a ganar la calle como método de expresión política recibió ayer un cachetazo tan rotundo, que no se atrevió siquiera a redondear el zarpazo del negociado de las rutas aéreas, pospuesto para mejor oportunidad en el enésimo ejemplo del "si pasa, pasa"; y los principios éticos flexibles que aparecen en escena solo cuando los ladrones han sido sorprendidos con las manos en la masa.

Los docentes ayer hicieron lo que mejor saben hacer, aquéllo para lo que se formaron: darnos a todos una lección: al gobierno de lo que como pueblo no estamos dispuestos a tolerar más, y a nosotros de como se lucha contra este régimen (porque son eso, un régimen predemocrático) autoritario, clasista y corrupto; que se quiere llevar puestos a todo y todos.

Por eso ayer y aunque hubo paro en todo el país, empezaron las clases. 

1 comentario:

  1. CIENTIFICOS Y CULTURA SON LA GRANDEZA DE LA PATRIA, A POYAR A LOS DOCENTES QUE SON LA BASE DE UNA SOCIEDAD FUNCIONAL Y LIBRE!!!!!!

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