Sobre la virtual paralización de las operaciones en el puerto de Santa Fe, leemos en el diario del Loco Lindo: "Alrededor de 100 toneladas de semilla de algodón, provenientes del norte provincial, se cargaron esta mañana en el Puerto de Santa Fe con destino al Sultanato de Omán, en la península arábiga. Los cuatro contenedores no se embarcaron en la capital santafesina sino que se trasladaron en camión hasta el puerto de Buenos Aires, desde donde partirán a destino por vía marítima. Esto se debe a que en diciembre de 2016 la terminal santafesina perdió la habilitación de Aduana para despachar contenedores, al finalizar la concesión del operador (que era quien contaba con la autorización correspondiente) y haber quedado desierta la posterior licitación para incorporar uno nuevo.
Mientras en 2016 se vendieron unos 400 contenedores (10.000 toneladas) de semilla de algodón al exterior desde el puerto local, en la presente campaña -ya finalizando- apenas lograron concretar la venta de 250 toneladas (10 contenedores).
Por este motivo las autoridades del Ente se encuentran tramitando ante Nación la habilitación para constituirse como operadores. Con este objetivo se reunieron -en marzo- el intendente José Corral y el titular del Ente Portuario, Sebastián Fumis, con Jorge Jiménez Kockar, subdirector general de Operaciones Aduaneras del Interior. El funcionario nacional se comprometió a dar de baja la autorización que poseía la firma Loginter como primer paso del proceso para habilitar al Ente Portuario como operador de la terminal.
Las partes también acordaron volver a reunirse para delinear las inversiones necesarias para dar cumplimiento a las nuevas exigencias que impuso la resolución 3871/2016 de Aduana, de las que estaba exento el operador que funcionó hasta diciembre, por tener una habilitación preexistente. Fumis, en diálogo con El Litoral, explicó que el trámite del Ente apunta a logra la habilitación de la terminal, pero no la operación por los altos costos que demandaría. “Tenemos que avanzar -dijo- en la habilitación con los nuevos estándares, pero apostamos a que el capital privado tome la posta”.
Según explicó, las obras necesarias van desde la construcción de un canil donde alojar los perros de Aduana hasta un cerco perimetral, circuito cerrado de tv e iluminación. Pero el condicionante para operar, por lo que ninguno de los 5 adquirientes de pliegos en la última licitación se animó a realizar una oferta, es la instalación de un escanner de contenedores que vale u$s 3 millones. El funcionario aseguró que están cotizando las obras a realizar, pero podrían demandar varios meses, razón por la cual no creyó posible la instalación de un nuevo operador en el corto plazo." (las negritas son nuestras)
Sobre el funcionamiento del puerto de Santa Fe en manos del "ente público no estatal" que lo administra hemos escrito muchas veces acá, y pueden consultarlo siguiendo la etiqueta respectiva a la derecha del blog, pero ahora recapitulemos un poco en el análisis, en base a la información que nos aporta la nota:
* El puerto santafesino está manejado por el "círculo rojo" local, a través de la figura del "ente público no estatal" que viene de los tiempos del menemismo, donde el Estado es el convidado de piedra, o el socio bobo.
* Como parte del "círculo rojo" o vocera de sus intereses, la UCR local (en éste caso representada por Corral, antes por Barletta, que propusieron al tristemente célebre Vorobiof) asumen la responsabilidad política por la gestión; porque el socialismo así lo dispuso, abandonando la que le cabe por conducir el gobierno provincial.
* Los sectores privados que manejan de hecho el puerto ni siquiera lo explotan por sí mismos (pese a que se supone que tienen la "experticia" en la materia), sino que lo conceden a su vez a un operador privado; pero estos tampoco se muestran muy dispuestos a hacer las inversiones necesarias para que el puerto pueda operar con eficacia, y cumplir con las reglamentaciones vigentes.
* La actual conducción formal del ente manifiesta expresamente -pese a eso- que insistiráen el camino de tercerizar la gestión en un operador privado.
* La Ley 11.011 (que creó el Ente) establece en su artículo 10 que la provincia no puede concurrir en auxilio económico de los entes portuarios, salvo autorización expresa por ley especial.
* La principal inversión que debería hacerse para que el puerto opere a pleno es la compra de un escanner de contenedores que cuesta 3 millones de dólares, al tipo de cambio de hoy unos 52 millones de pesos, más o menos.
* O sea, menos que los 56 millones de pesos que se van a a gastar en remodelar la plaza frente a la Casa de Gobierno, o los 60 millones de pesos que se llevan gastados en el "Parque Biblioteca de la Constitución"; ambos proyectos "sugeridos" por la Municipalidad de Santa Fe a la provincia, como vocera del "círculo rojo" santafesino.
* Lo que supone -concluyendo con el análisis- que invirtiendo el orden de prioridades, bien pudo el Estado provincial invertir lo que era necesario para que el puerto de Santa Fe operara en mejores condiciones en su actual emplazamiento (porque del otro ya no se habla más, hace rato); pero asumiendo directamente en sus manos la operación, cortando con el nudo gordiano de los intereses privados que medran con los bienes públicos.
* Claro que para eso es necesario confrontar de plano con los intereses del "círculo rojo" local, y eso requiere un nivel de decisión política que ni la UCR de Corral y Barletta (que puso a Vorobiof primero y a Fumis después), ni el socialismo (cuyo primer candidato a diputado nacional es el Ministro de la Producción provincial) están en condiciones de garantizar, ni tienen el más mínimo interés en tener.
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