jueves, 13 de septiembre de 2018

PROHIBIDO ESTACIONAR ENTRE CARTELES



¿Se acuerdan que hace pocos días les contábamos acá el curioso caso de la licitación para la impresión de los afiches de la Lotería santafesina, en los que se presentaba Artes Gráficas del Litoral (AGL) para perder, cotizando cifras astronómicas, y que ganaran los mismos de siempre, esperando revancha en otras convocatorias, como reciprocidad por la gauchada?

Tal parece que algo parecido acaba de suceder en la licitación para contratar la obra del nuevo estacionamiento para funcionarios en la Casa de Gobierno, como pueden ver en el decreto de apertura.

Se llama a licitación, con un presupuesto oficial cercano a los 11 millones, se presentan cuatro empresas, para ejecutar una obra de apenas 90 días (tres meses) de duración.

Dos de esas empresas cotizan más del doble del presupuesto oficial, por encima de los 22 millones de pesos.

Una de ellas (que tiene otras obras contratadas con la provincia) tenía vencida la habilitación anual en el Registro de Licitadores, y la dejan afuera por ese motivo; al igual que una tercera que también cotizó bastante por encima del presupuesto oficial, pero no de un modo tan guaso.

Quedan así en carrera dos, una (la que termina ganando) que cotiza casi un 9 % por encima del presupuesto oficial, la otra más del doble.

¿Se puede pifiarla tanto en el presupuesto de una obra sencilla como un estacionamiento, con un plazo de ejecución de tres meses?

¿Se puede olvidar una empresa, que tiene en ejecución obras contratadas con la provincia, de renovar su habilitación anual en el Registro de Licitadores?

Sería muy extraño, porque hace muy pocos días, el propio Lifschitz le adjudicó a esa mism a empresa (Constructora Comercial) "adicionales de obra" en contratos que tiene en ejecución con la provincia: el 30 de agosto pasado por el Decreto 2398, $ 1.232.917,43 en el SAMCO de Santa Tomé, y el 6 de septiembre (o sea, la semana pasada) por el Decreto 2440 $ 2.150.109,01, para remodelaciones en comisarías de Santa Fe y Rosario.

¿O estamos hablando de otra cosa, como maniobras de cartelización en la obra pública, ponéle? 

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