miércoles, 27 de febrero de 2019

YO NO ME QUEDARÍA MUY TRANQUILO


La imagen de apertura corresponde a ésta nota del Cronista, cuyo texto está transcripto íntegro en la misma. Como pueden ver si la leen, en la nota no existe la más mínima mención a lo que dice el título: que los principales exportadores de soja y sus derivados “tranquilizarían” a Macri porque le aportarían al país cruciales divisas por exportaciones, en éste año electoral.

Se suelen confundir los ingresos del fisco por retenciones (que son en pesos, aun cuando calculadas sobre el precio en dólar de los productos de exportación), con la liquidación de las divisas (dólares, u otra moneda extranjera) en el mercado cambiario.

Esa confusión campea por toda la nota, que confunde el problema fiscal (al que apuntan las retenciones, con la disponibilidad de divisas genuinas, que no provengan del endeudamiento externo. Son dos problemas y cuestiones totalmente distintas.

Si se lo mira estrictamente desde el panorama del sector agroexportador y más específicamente el vinculado a la soja, la propia nota no da cuenta de un panorama halagüeño como sugiere el título: al haberse reimplantado las retenciones a las exportaciones industriales, en un pie de igualdad con las del poroto de soja sin procesar, las ventas externas se reprimarizaron, restándoles en consecuencia valor agregado.

Eso supone menores ingresos de divisas a la larga, porque no es lo mismo el precio de una tonelada de porotos de soja sin procesar, que una de aceite.

Pero además existe otro factor que el artículo ni siquiera menciona: el gobierno de Macri eximió a todos los exportadores (incluyendo a los del complejo sojero y aceitero) de la obligación de liquidar en el país las divisas de las exportaciones. Por eso pueden hacerlo cuando quieran, o nunca.

De allí que no sorprende que en la nota (al contrario de lo que sugiere el título) no se haga la más mínima mención a compromiso alguno de las empresas del sector con determinados volúmenes de liquidación de divisas, para alimentar la oferta en el mercado cambiario, y así restarle presión a la demanda de dólares.

Y con el aumento de la demanda de divisas propia de todos los años electorales, es ridículo pensar que los grandes grupos exportadores vayan a hacer otra cosa que lo que vienen haciendo, porque el gobierno se los permitió: sentarse arriba de los dólares a esperar que se incremente su demanda en el mercado, acelerando así la tasa de devaluación para obtener más pesos, por cada dólar que no tengan más remedio que liquidar.

1 comentario:

  1. No sabés como van a liquidar dólares este año las sojeras.
    Con esta previsibilidad cambiaria, con inflación cero y en un año electoral,las cerealeras traen todas las divisas y pasan todo a pesos.
    Van a inundar de dólares el mercado, y sumado a la lluvia de inversiones prevista para éste año en más de 80.000 millones de dólares, al billete verde lo vamos a usar de rollo de cocina.
    El Colo.

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