Por A.C.
Binner ante la prensa, lanzó anteayer los ejes de la propuesta económica de su candidatura presidencial. Sin muchas precisiones, habló de reducir paulatinamente las retenciones a las exportaciones de los productos agropecuarios y de liberar -también progresivamente- la cotización del dólar.
Cuando Binner (candidato sin chance de llegar a la presidencia) plantea modificar el tipo de cambio o las retenciones, parece olvidarse que el modelo económico actual, que consiguió y mantiene elevados niveles de crecimiento de la economía, utiliza herramientas que permitieron obtener resultados categóricos.
El margen de maniobra que posee actualmente el Banco Central para regular el movimiento de la divisa norteamericana, no es atribuible a un hecho mágico. Es consecuencia de la acumulación de reservas obtenidas en el marco de una politica económica que posibilitó que el PBI creciera un 84% durante el período 2003/2010.
En el modelo de crecimiento implementado, que consiguió y mantiene elevados niveles de crecimiento de la economía, el tipo de cambio administrado y competitivo, enfocado al aumento de exportaciones y sustitución importaciones, generó superávit comercial y el crecimiento de la industria con su impacto positivo en el empleo. Hoy la industria crece por encima del promedio de la actividad económica y ésto demuestra que vuelve a ser el motor de la economía.
Es imposible pensar en un modelo de desarrollo con inclusión para más de 40 millones de argentinos, si la industria no es el motor del crecimiento.
Por su parte, las retenciones a las exportaciones de productos primarios, permiten generar reservas y junto a la recuperación de la recaudación, generada por mejoras en el nivel de actividad, dan lugar al superávit fiscal.
Ante ésta situación, el candidato por un lado plantea reducir las retenciones, es decir transferir divisas al sector exportador y por lo tanto disminuir las reservas del Estado. Y por otro lado, devaluar la moneda. ¿No estarà mirando la realidad solo con los lentes del sector sojero? Un socialista extraño este tipo.
Pareciera hablar del tipo de cambio a largo plazo cuando se refiere a “liberar progresivamente la cotización del dólar “. En en el tipo de cambio en el largo plazo, son variables determinantes la paridad euro-dólar, la cotización del real, y también los términos de intercambio como el precio de la soja, entre otros. ¿Pero sería inteligente , favorable a la continuidad del crecimiento económico, dejar flotar hoy el tipo de cambio al ritmo de variables que no ofrecen ninguna estabilidad a consecuencia de la crisis del mercado mundial ? ¿No estaríamos incorporando, importando, la volatilidad de mercados que no pueden resolver la crisis desatada en el 2008? Mientras se preocupa también por la inflación según sus declaraciones, propone un tipo de cambio alto, que tiene inevitablemente un costo inflacionario asociado. Poco claro el candidato. Además, ni siquiera menciona las consecuencias que generan en una economía concentrada como la argentina, los grupos económicos formadores de precios y por lo tanto, el protagonismo que tienen en el proceso inflacionario que tanto lo preocupa. ¿Tendrá intereses comunes con esos grupos o ignora un dato tan elemental?
También ataca las retenciones. Mirá vos. En su Gobierno Provincial, por ejemplo en el área de Salud ,el monto global destinado a infraestructura sanitaria previsto en el 2010 era de 278.810.508 pesos. De ese total, más de 223 millones, o lo que es lo mismo el 80,05%, tuvo como fuente de financiamiento el Fondo Federal Solidario. Es decir Fondo soja, retenciones.
En el caso de Educación, la programación financiera del Presupuesto Analítico 2010 alcanza la suma total de 141.414.249 pesos para las áreas de Educación y Cultura, de los cuales 111.251.711 pesos, es decir el 78,68%, tiene financiamiento del Fondo Soja. El ahora candidato, como gobernador de Santa Fe firmó durante el año 2010, 35 decretos modificando la fuente de financiamiento de alguna obra y en todos esos decretos, se disminuyen los fondos del Tesoro provincial y se aumentan los provenientes de las retenciones a las exportaciones de soja. Y ahora plantea disminuírlas.
Más allá del pobrísimo grado de ejecución de la obra pública durante su gobernación, a pesar de tener los fondos (soja) disponibles ¿ que hubiera sido de su gestión sin retenciones? Con el sideral aumento de los gastos corrientes que generó el gobierno progresista y sin los recursos de las retenciones, la provincia hubiera colapsado.
Anda preocupado también el socialista fanático del mercado por atraer inversiones al país. Dice que hacen falta reglas de juego claras y recordó un supuesto pedido de los hombres de negocios. “Los empresarios nos requieren permanentemente la necesidad de tener seguridad jurídica”, sostuvo. “Si tenemos reglas de juego claras, es posible generar la confianza necesaria para que haya inversión”, completó.
Tendría que informarse un poco el candidato. En el 2010, la inversión en el país alcanzó los 93.777 millones de pesos. Con éste salto la inversión ya representa el 23,5 por ciento del PBI, el mayor registro de la historia sobre un producto que creció más de un 80 por ciento desde 2003. Para el final del 2011, se estima que la inversión superará el 25 por ciento del PBI; así se acercará a los registros que mantienen los grandes países desarrollados. Las mayores inversiones se dieron en los sectores automotor, metalúrgico y la construcción. Sin embargo, Binner nos quiere convencer que en el paìs falta clima de negocios. Claro, será en comparación con las extraordinarias inversiones que él consiguió para su provincia durante su mandato, gracias a las insuperables gestiones y medidas económicas implementadas por él y su ministro Sciara.
Al final, lo que propone el candidato del Grupo Clarin, La Nación y del Reino de la Soja, es la misma receta de los fanáticos del mercado: transferir más recursos a sectores que tienen rentabilidad extraordinaria y además devaluar , para disminuír así los costos internos y aumentar aún más los márgenes extraordinarios de ganancias de esos sectores. ¿Pero, y los costos sociales que traerían esas transferencias de recursos y la concentración de riqueza en pocas manos? No importa, ese es un detalle menor, que no forma parte de las inquietudes progresistas de Hermes, socialista y fanático del mercado.
Todos toman la misma sopa! (baja de las retenciones)
ResponderEliminarYa está...