EL RADICALISMO EXPLICADO POR LA SOCIEDAD RURAL

Desconcertantes declaraciones del presidente de la Sociedad Rural de Santa Fe y candidato a diputado nacional de la UCR, Hugo Iturraspe. O no tanto: el hombre nos tiene acostumbrados a confundir los tantos.

A ver: los comicios son importantes para el sector productivo (solamente para ellos, eh), es necesario votar legisladores que garanticen defender sus intereses (porque la riqueza de la provincia está en la producción agropecuaria), pero no hay que trabajar para defender intereses sectoriales. A menos que sean los del campo, claro.

Dice Iturraspe (reconociéndose radical) "pertenecemos al partido del actual vicepresidente", pero el problema es que cuando el amigazo Cobos llegó a vicepresidente el partido lo echó, de por vida. Aunque al ratito lo reincorporaron; justo pero justo vean, cuando el hombre votó en contra de la resolución 125, y los productores dejaron de pagar retenciones móviles, cosa que el presidente de la Rural -como no podías ser de otro modo- rescata y valora.

Ni hablar que "el actual vicepresidente" fue elegido por otro partido, para hacer exactamente lo contrario de lo que hizo (o sea alinearse con las medidas del gobierno del cual formaba parte), y cumplir de ese modo nada menos que con la Constitución Nacional. Raro: dice Iturraspe que de ese modo se defiende permanentemente la institucionalidad, en fin, cosas de la república radical.

En el mismo párrafo en que destaca la traición de Cobos -de quien se enorgullece en compartir partido, luego de haberlo echado- rescata los valores éticos y morales (¿será Gerardo Morales?), entre los cuales no se encuentra al parecer la lealtad y el cumplimiento de la palabra empeñada, y del mandato otorgado por las urnas.

A esta altura ya no se sabe si -cuando Iturraspe dice que han demostrado "ser un bloque homogéneo"- se refiere a la UCR, o a los agrodiputados de la Mesa de Enlace; y nostros pensamos si no nos equivocamos al titular el post, y en realidad el título debió haber sido "La Sociedad Rural explicada por el radicalismo".

Es lo que suele pasar cuando se alquila algo (como en este caso un partido a una corporación): los inquilinos se creen dueños.

En fin, otro tema más del que tendrán que preocuparse los radicales a partir del lunes.