EL QUE MIENTE ES EL DIARIO DEL LOCO LINDO

 

Leemos en el diario del Loco Lindo el enojo con las declaraciones de Randazzo cuestionando el doble standard de los medios para juzgar en el caso Ciccone a Boudou, y al gobierno socialista de la provincia cuando contrató en forma directa la impresión de las boletas únicas para las elecciones del año pasado con AGL (Artes Gráficas del Litoral) y Boldt S.A. (la empresa a la cual el vice señala como la responsable de estar detrás del affaire Ciccone).

El principal cuestionamiento a los dichos del ministro del Interior es que -según el diario del Loco Lindo- no hubo una contratación directa para adjudicar los trabajos.

Bueno, los propios actos oficiales del gobierno provincial desmienten a los socios locales de Clarín.

Lo que sigue es la parte pertinente del Decreto 487/11 firmado por Binner para adjudicar la impresión de las boletas únicas (el texto íntegro del decreto lo pueden ver acá):

Clarito: por los plazos del cronograma electoral no se podía hacer a tiempo una licitación pública (al menos eso adujeron los organismos oficiales de la provincia que intervinieron en el trámite), y entonces se hizo una contratación directa fundada en el artículo 108 inciso a) de la Ley de Contabilidad (razones de probada urgencia o derivadas de una emergencia imprevisible).

Lo otro que no cuenta en su editorial (inserto en la sección Política, pero para defender sus intereses empresariales) el diario del Loco Lindo es que -en realidad- la oferta más conveniente había sido originariamente la de MR IMPRESIONES: concretamente de poco más de 15 millones de pesos, es decir 8 y pico menos que lo que finalmente terminó pagando el gobierno provincial.

Pero su oferta fue desestimada (como pueden ver en el decreto), entre otros aspectos, porque planteaba realizar parte de los trabajos en una planta de Santa Fe, y otros en una ubicada en Buenos Aires.

Lo cual es muy curioso, porque una de las adjudicatarias (AGL), y tal como también surge del decreto, subcontrató parte de los trabajos justamente con una planta ubicada en Buenos Aires: la de la empresa IMPRIPOST (ése es el nombre correcto, hay un error en el decreto); sociedad compuesta por partes iguales entre el Grupo Clarín y el Grupo Techint; de hecho la planta impresora está ubicada en General Pacheco en las instalaciones de éste último, como pueden ver acá en la página web de la empresa.   

Es decir entonces que no sólo se hizo una contratación directa, sino que además se desestimó a una oferta mucho más barata (la de MR IMPRESIONES) por una razón que en el caso de AGL se dejó de lado.

¿Habrá influido el hecho de que en MR IMPRESIONES se imprimían (por lo menos a la fecha de la contratación) el diario Tiempo Argentino y otras publicaciones del Grupo Szpolsky?

Tampoco dice el diario del Loco Lindo que la adjudicación de la impresión de las boletas se repartió entre AGL y Boldt S.A. como parte de una negociación en la que ésta última empresa (ver en la imagen del decreto sus antecedentes) exigió una parte del contrato para desistir de la impugnación que había presentado contra la sociedad Clarín-El Litoral, justamente por sub contratar con Impripost parte de los trabajos.

Y mejor que no profundicemos en la composición accionaria de AGL y su historia, porque si bien es cierto que hoy día las acciones se reparten un 50 % y 50 % entre AGEA S.A. (Arte Gráfico Editorial Argentino, o sea Clarín) y el grupo El Litoral; un año y medio antes de que AGL comenzara a existir como sociedad, Clarín había formado AGL, que entonces era Artes Gráficas Litoraleñas, con un aporte suyo del 99,5 % del capital; y la sociedad desapareció misteriosamente para que surgiera la AGL que hoy conocemos: Artes Gráficas del Litoral.

La de la planta de Sauce Viejo que inauguró Binner, que después dijo que no sabía que era una sociedad entre Clarín y El Litoral.

Acá están contados en un post anterior otros detalles de la contratación de la impresión de las boletas únicas; para el que le interese.