Lo más granado (y garca) del empresariado nacional convocó anoche a la nueva esperanza blanca para que explique que haría con la economía; y el muchacho se mostró como presidenciable: ojo pibe, que recién el domingo debutás en primera, y hay que ver como jugás, para llegar a la selección te falta todavía mucho.
Pero el convite empresarial a Massa no deja de tener su lógica: la provincia de Buenos Aires concentra el 38 % del padrón nacional, y los resultados allí tendrán sin dudas repercusión en todo el tablero político del país; a lo que hay que sumar que el esposo de Malena (la que putea como ninguna) es casi la bala de plata que les viene quedando para tumbar al kirchnerismo; considerando que tras las generales de éste año las próximas elecciones serán las presidenciales.
Como no podía ser de otra manera Massa fue y dijo lo que esperaban que dijeran, a $ 800 por cubierto (que cosa ésta de algunos empresarios argentos: para invertir en producir y generar empleo no ponen un sope, para que les digan lo que quieren oír aunque no sea la verdad, pelan enseguida la billetera). Y lo aplaudieron, como a López Murphy en su momento.
Y los medios hegemónicos se mojan todos tomando nota del aplausómetro: acá Clarín y acá La Nación, por ejemplo.Acá en Página 12 hay más info, claro que con otra mirada, no tan contemplativa.
Toman nota de que el mayor aplauso lo logró el candidato cuando -hablando de la ley de medios- dijo que había que respetar la decisión de la Corte: ¿sabrán algo que nosotros no sobre el fallo que se está cocinando hace cuatro años?
La melodía interpretada por el intendente de Tigre suena conocida: "hay un escenario de falta de previsibilidad y mirada de largo plazo", "hay que trazar una raya, dejar de mirar para atrás y darse una política de construcción de futuro", "pidió usar el “sentido común” y aprovechar para tomar plata en el exterior cuando la tasa es baja. También afirmó que estaría dispuesto a una vuelta de las AFJP para quienes deseen contratar un seguro de retiro, adicional a la jubilación estatal obligatoria. “El sistema de capitalización para todos fracasó, pero podría ser un régimen complementario", "Debemos terminar con la idea de querer regular todo, de ponerle el pie en la cabeza todo el tiempo” repensar “quiénes son nuestros socios en el mundo”, ", "El sector que más aporta a la balanza comercial es con el que peor estamos. El campo, que es la actividad que más posibilidades de crecimiento tiene, es el que sufre más fricciones...".
Cualquier parecido con aquel Menem al que llevaron en el 89' a la Fundación Bunge y Born para explicarle el plan de gobierno que tenía que aplicar, no es pura casualidad.
Lo que es difícil ahí es encontrar lo bueno del kirchnerismo que -supuestamente- Massa se propondría rescatar.
Pero a la hora de elegir una definición de las que tuvo, nos quedamos con ésta: "Necesitamos un marco jurídico para mostrarle al mundo que en la Argentina se van a respetar las reglas, gobierne quien gobierne.".
Es el famoso cuento de las "políticas de Estado a largo plazo"; políticas que justamente no las fijaría el Estado, sino los intereses permanentes, que son impermeables a las vicisitudes políticas y las contingencias electorales: o sea, los que estaban representados anoche en la cena a la que fue Massa.
En ese marco, las elecciones son una anécdota, casi para que los políticos se entretengan y la gente tenga que perder un ratito en la cola de las escuelas para votar, una vez cada tanto: lo que importa, el rumbo del país, para donde vamos, que se hace con él, se resuelve en otro lado, en otros lugares.
Por ejemplo en lugares como la cena de anoche; o en otros donde concurren los mismos comensales, pero no en público.
De lo que se deduce que el famoso post kirchnerismo del que tanto se habla (hoy supuestamente expresado por Massa, como último prospecto presidenciable) consistiría en volver al pre kirchnerismo; al rol del Estado y de la política tal y como se lo concebía en el 2003, antes de que Néstor Kirchner entrara -con sus convicciones a cuestas- por la puerta de la Casa Rosada.
este hdp si gana vende el pais como menem, no lo dudo, y nosotros esta vez si, seremos culpables.
ResponderEliminarUpa,lei mal,en lugar de presidenciable,lei despreciable.
ResponderEliminarNo soy de La Cámpora, ni tengo amistad con D'Elía y lo echaría a Moreno, y voy a suspender la sirvienta y voy a poner más cámara en mi casa, porque si el prefecto me culiaba la sirvienta capaz que la empomaba a la educadísima Malena, mi angelical esposa.
ResponderEliminarEspero que carapálida Lavagna y Luli Redrado no me defrauden.
Y las viejas guerrilleras de las Madres y de las Abuelas, se dejen de joder porque en mi gobierno las voy a fusilar, además de indultar a los genocidas y de confirmar a Lorenzetti y a toda la CSJ, con Fayt incluido y por las dudas su momia si no llega a los 200 años.
Esta es mi propuesta.
SERGIO MASSA, Intendente de Tigre Volador.
P.D.:
ResponderEliminarMe olvidé decir que voy a declarar ciudadano ilustre al Gordo Bufarra de Jorge Lanata.
También voy a disponer que en cada pueblo exista una sola señal televisiva: TN.
Hector Horacio Magnetto y Ernestina Herrera de Noble, quedarán en el bronce para la posteridad porque levantaremos una gran escultura en su honor al lado de la de Roca, y en un mausoleo especial descansarán los restos del ilustre y poco reconocido patriota Jorge Rafael Videla.
También le colocaré cinturón de castidad a la Malena mientras esté afuera de casa.
SERGIO MASSA. Intendente de Tigre Volador.
El mismo listado de "medidas" neoconservadoras. Me sono rarisimo que ni siquiera las haya disfrazado un poco, como si dijera "banquenme que yo voy a hacer exactamente lo que uds. quieren".
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