miércoles, 1 de julio de 2015

UN CASO DE SÍNDROME DE ESTOCOLMO


El sábado pasado  veíamos acá como este muchacho Méndez se ofendía porque Scioli les pedía dejar de hacer política y ponerse a trabajar para resolver los problemas del país.

Apenas pasaron 3 días y el ofendido Méndez parece no tan susceptible como para dar su opinión ¿personal? sobre la campaña, y definirse claramente por Macri como su candidato preferido porque -dice- sus ideas para la industria y la economía en general son más precisas y concretas que las del candidato del FPV.

No nos dice -en cambio- cuáles son esas ideas, pero la parecieron bien, por concretas.

Raro ¿no? porque supongamos que venga alguien a decir que les va a aumentar el impuesto a las Ganancias a las empresas en un 100 %, y va a subir las contribuciones patronales a la seguridad social a los niveles anteriores a 1993 (cuando Cavallo las rebajó en un 33 %).

Sería preciso y concreto, sin lugar a malos entendidos; sin embargo parece poco probable que a Méndez le agradara.

De modo que -a menos que quieran tomarnos por boludos- lo que a Méndez la gusta de Macri son sus ideas para la economía y la industria, y no el modo más o menos concreto con el que las expresa.    

Claro que Méndez no expresa la opinión de todos los industriales: vemos acá en El Cronista como la gente de la CGE le sale con los tapones de punta precisamente por éstas declaraciones.

Que suponen que -fiel a una constante histórica de buena parte de nuestra "burguesía nacional"- otra vez vuelven a reincidir en apoyar políticas que -más tarde o más temprano- destruyen la producción y el trabajo nacional.

Cual si padecieran síndrome de Estocolomo, aplauden a sus victimarios, los apoyan y los quieren ver en el gobierno, seducidos por las promesas de baja de impuestos, eliminación de regulaciones estatales o flexibilización de las normas laborales para "disminuir el costo argentino".

Porque de eso se tratan -dichas en criollo, y sin papas en la boca- las "ideas más concretas y concisas" de Macri en materia de política económica e industrial: basta ver quiénes lo rodean y le soplan esas "ideas" para darse cuenta de lo que hablamos.

Está claro que -parafraseando a Perón, de quien se cumplen hoy 41 años de su muerte- la Unión Industrial Argentina no es ni unión, ni industrial, y mucho menos argentina.

Tanto como que muchos empresarios-como Méndez- de empresarios tienen poco, y de lobbistas políticos y fugadores seriales de capitales, mucho; razón por la cual suponen (quizás con conocimiento de causa) que están a salvo de cualquier cimbronazo fruto de las políticas que con frecuencia añoran y respaldan.

A menos que -como también les ha pasado en el futuro- abran la caja de Pandora neoliberal y los males desatados se los lleven puestos a ellos también, y vuelvan a pedir la ayuda del Estado para capear el temporal.

El personaje en cuestión -aunque se considere a sí mismo importante, al punto de hacernos saber a quien prefiere como presidente- es si se quiere menor.

Lo que no es menor es el fenómeno que expresa, que no es otro que el de la deserción de su responsabilidad histórica de lo que debió haber sido parte de una clase dirigente que contribuyera en serio al engrandecimiento del país; y prefirió en cambio ser apenas la comparsa de otros, que son los que mueven en serio las palancas. 

4 comentarios:

  1. Hay algún estudio acerca de cuánto dinero significaría volver los aportes patronales a los niveles porcentuales anteriores a 1993? Sería bueno saberlo, así, cada vez que rompan la paciencia con la suba del mínimo no imponible para ganancias, se les conteste "ok, lo subimos pero lo compensamos con la vuelta de los aportes patronales a los niveles de 1993, están de acuerdo?"

    Algo me dice que no van a querer aceptar.

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  2. No es sindrome de estocolmo, ya que macri no seria su victimario. En realidad Mendez representa a la parte del sector industrial que gana cuando el sector industrial en general pierde. O sea, el sector asociado a la desregulación y eliminación de aranceles de importación, que puede reducir salarios sin perder mercado, dolar alto y maximizar ganancias porque esta ligado al comercio exterior. Distinto es el caso de la CGE, cercana a la expansion del consumo interno y pone el grito en el cielo cuando escucha a Mendez.

    Mendez no es un rehen, es el secuestrador.

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  3. Alguien que de politica sabía ''un poquito'' y del cual hoy conmemoramos 41 años de su desaparición dijo una vez:
    '' la UIA no es Union, no es Industrial y no es Argentina''
    Mas clarito imposibol
    Abrazo peronista

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  4. Las inquietudes de Mendez desaparecen obsequiándole una pastilla azul y la visita de un gato sub 25.

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