- RTA y radios nacionales en todo el país
— Julia Strada (@Juli_Strada) February 4, 2024
- Trenes y red ferroviaria
- Correo Argentino y 1400 sucursales en todo el país pic.twitter.com/f3mbyKP1HP
Hace mucho tiempo atrás y a propósito de la recuperación para el Estado durante el kirchnerismo de ciertas empresas y funciones privatizadas en el menemismo, decíamos nosotros en esta entrada que, contra la idea general instalada, el proceso político inaugurado por Néstor y continuado por Cristina no se manejó con dogmatismos sino con criterio pragmático, analizando caso por caso de las empresas y funciones implicadas para determinar si era o no conveniente que el Estado las retomara, y si estaba en condiciones de hacerlo.
Dijimos entonces que ese criterio resultó insuficiente en algunos casos (como el de las distribuidoras eléctricas del conurbano o los trenes), y convivió con otras medidas de ampliación de los roles del Estado como el plan satelital, que expresaban -estas sí- la decisión de que fuera el Estado y no el mercado el que liderara determinados procesos vinculados al desarrollo del país, para imponerles una dirección vinculada al interés general, y no a las lógicas puramente rentísticas del capital privado.
Hoy asistimos a un festival de revisitación de los tópicos del Consenso de Washington que se enseñorearon en las políticas públicas del país en los 90', con los resultados conocidos y sin la más mínima revisión o autocrítica de la experiencia por parte de los que -como Milei y su gobierno- están planteando volver a repetirla, con una sábana de 41 empresas públicas a ser privatizadas contenida dentro de la ley ómnibus original.
Que esa sábana haya sido acortada durante las negociaciones sostenidas en el Congreso entre el gobierno y la oposición "dialoguista" no cambia el hecho de que quienes apoyen la ley, estarán convalidando la entrega a precio vil del patrimonio público en nombre de un dogmatismo ideológico cerrado (en éste caso sí) según el cual todo lo que hace el Estado está mal, o los privados lo harían mejor.
Un dogmatismo sin base empírica en la realidad, no solo porque la experiencia histórica argentina concreta demuestra -en la nación y en las provincias- que la gran mayoría de las privatizaciones fueron desastrosas (lo que no implica que muchas hayan sido pingües negocios para los privados), sino que en todos los casos en que el Estado retomó la gestión de las empresas o servicios que estaban en sus manos, mejoró la gestión según cuanto indicador se tome en cuenta para evaluarlo.
Tomemos si no el caso del Correo, Aerolíneas, YPF y AYSSA recuperadas para la gestión estatal durante el kirchnerismo, e incluso los propios trenes de pasajeros en el AMBA, tras la tragedia de Once: todas funcionaron mejor que cuando estaban en manos privadas, y no hay usuarios pidiendo que vuelvan a ser privatizadas, salvo los dogmáticos del neoliberalismo.
Ni hablemos de aquellas empresas que jamás estuvieron en manos privadas como el Banco Nación o ARSAT, en las que tampoco aplica -como no aplica en los casos de Aerolíneas o YPF- el criterio contable del déficit, porque están dando ganancias, y no reciben aportes del Estado, o estos disminuyeron conforme mejoró su gestión operativa.
Hay sí, como decíamos, un dogmatismo de los talibanes del mercado como discurso que pretende legitimar la entrega, y hay también un deseo de rascar la olla para sacar recursos de donde sea para pagar la deuda que ellos mismos contrajeron. O al menos eso es lo que nos dicen, porque nadie debería sorprenderse que los ingresos que se obtengan por las eventuales privatizaciones se vuelvan a ir por la canaleta de la fuga de capitales.
Y lo que hay -por encima de todo- es una formidable piñata de negocios para los amigos, por las que parece no escandalizarse ninguno de los cruzados contra la corrupción...del kirchnerismo. Tuits relacionados:
Pasando en limpio, para Barletta y la UCR es más estratégica LT 10 que Aerolíneas Argentinas, YPF, ARSAT o el Banco Nación, @serdelfino.
— La Corriente K (@lacorrientek) February 3, 2024
Vieron como siempre los ajustes impostergables que tiene que hacer el Estado o todos nosotros coinciden como anillo al dedo con los negocios que espera aprovechar alguna empresa o grupo económico del país o del extranjero? Debe ser casualidad.
— La Corriente K (@lacorrientek) February 3, 2024
No es ideología, son negocios. Y financiamiento del pago de la deuda que ellos mismos contrajeron, para fugar capitales. La derecha argentina es un esquema Ponzi.
— La Corriente K (@lacorrientek) February 2, 2024
Ninguna empresa recuperada por el Estado desde 2003 funciona peor que cuando estaba en manos privadas. Todas funcionaron mejor. Las quieren privatizar puramente por negocios, disfrazados de motivos ideológicos. https://t.co/pdeUHI5Bsq
— La Corriente K (@lacorrientek) February 2, 2024
Muy pero muy buena nota. Notón, digamos. Los viejos peronchos no necesitamos cháchara. Somos hijos de lo mejor que le pasó a la patria, Perón y Evita. Y Ella puede colgarse orgullosa la cucarda de la más odiada y perseguida después de los fundadores. Por algo será. Salud querida compañera. La paz te necesita. Abrazo, compañeros
ResponderEliminarhasta los trenes con alberto extendieron sus terminales , en Córdoba , San Luis y Mendoza , por ej.
ResponderEliminarlos trenes del roca x ej hasta tienen aire acondicionado
veníamos de trenes sin luces nocturnas y sin ventanillas y hasta muchos sin los asientos originales de cuero, todos vandalizados saqueados, con las vías abandonadas
LOS QUE QUIEREN """PRIVATIZAR"""
AEROLINEAS
TRENES
RIO TURBIO(OTRA VEZ!)
Solo son parte del tercer intento de desguace de nuestra República Argentina
Por ahora no nos bombardean como a Yugoeslavia, o Ucrania, o Gaza
A Lengua Bola (a) Julio césar Cleto Cobos parece que le ardió la cola. Cuando la 125 se graduó de “basura”. Pq traidor es el que está con vos y después te “traiciona”, este tipo con el único que está es con él mismo y según el momento con algunos correligionarios.
ResponderEliminarEs un hábil mequetrefe oportunista aprovechó el mal momento de Néstor que soñaba con la transversalidad. A Cristina nunca le gustó la idea y antes de después del “no positivo” hubo trifulcas matrimoniales debido a la incorporación del sujeto que no ocupa. “Sinceramente” entre otras pruebas.
Hasta Morales Solá, en una editorial se preguntaba si era necesario que el vicepresidente volviera a Mendoza en un viaje triunfal en auto atravesando la Pampa húmeda. Iba saludando como la reina de la vendimia en su Mza natal. Declaró que no iba a ir a la Exposición de la Rural, no quería quedar como ortiba y cagador, prendido a la oligarquía con olor a bosta Sarmiento dixit. Cuentan allegados que recibió una llamada telefónica en la que le sugirieron que fuera a visitar a la citada muestra o aparecía en la primera plana de todos los diarios, pero no para felicitarlo. A media semana, un día miércoles, apareció en la exposición haciéndole cariñitos a las vacas y a los corderos.
Aahhh, talvez algún día nos cuente que fue lo que negociación el finado Teta Baglini en paz descanse y el Coty con Cargill, Monsanto y otros, cuando se fue al baño y pasó por su oficina. Pero este “botón" culpó a la hijita, dice que fue la nena la que lo llamó y le dijo que votara en contra de la 125, otra Antonia, ¡mamaaa!