¡ATENTO MARIANO T, AVÍSELES QUE NO JODAN, QUE VA A TERMINAR VOLVIENDO EL IAPI EN SERIO!

Escuche Mariano, nosotros entendemos todo: que están haciendo un sacrificio heroico, ahorrando (como diría Avellaneda) sobre el hambre y la sed de sus propias familias, corriendo el riesgo de lanzarlas a la miseria (si es que ya no están ahí), para devolvernos a todos los argentinos las libertades conculcadas.

Que han elegido una forma de resistencia pacífica casi gandhiana, para derribar por asfixia financiera a una dictadura que les ha arrebatado -sobre todo- su dignidad, porque esto no es por plata; como bien sabemos.

Aunque no falta algún mal pensado que, lejano al conocimiento profundo de la sensibilidad del hombre de campo, piense que lo que están tratando de hacer es forzar una devaluación.

Por favor, nada más lejos del chacarero argentino; ése, que se levanta de sol a sol a forjar diariamente la grandeza de la patria (con la que se funde en una misma cosa), y lo único que pide a cambio es poder alimentar a su familia.

Todo eso lo comprendemos y nos emociona, pero vea, hable con los suyos, convenzalos de no llevar las cosas a los extremos porque ésta gente del kirchnerismo no tiene escrúpulos, ni reconoce límites: hoy le están diciendo que estudian volver a la Junta Nacional de Granos, y mañana (sin previo aviso, en las sombras de la noche, a traición, como acostumbran) le clavan el puñal; y se despiertan una madrugada, prenden la radio y se encuentran con que les anuncian -por cadena, para colmo- que volvió el IAPI.

Y con él, todos los males y desgracias que ya conocemos (y que usted describió tan bien acá): el pan negro, que altera los hábitos alimenticios del pueblo, y lo condena a las privaciones, fruto de un gobierno desalmado.

Dios (que está en todos lados, pero en realidad, vive en el campo) no lo permita vea; hable con los suyos Mariano, hágalos reflexionar, que en el fondo son buena gente, aunque algunos tengan un fondo grande, y cueste llegar.

Y sobre todo convenzalos de que dejen de lado esas prácticas de la rebeldía fiscal, que acá el artículo dice que se evaluó como posibilidad en la asamblea ruralista de Pehuajó, pero hay algunos que ya la empezaron a poner en práctica por su cuenta, hace unos cuantos años, casi 200.

Lamentablemente inorgánicos que se mandan solos, sin respetar el mandato de las entidades fundacionales de la patria (como la Rural) hay en todos lados; pero no desmerecen al conjunto.