Una cosa hay que admitir: el tipo tiene agallas.
Porque someterse voluntariamente a una sesión de tortura, donde un periodista independiente, incisivo y comprometido solo con la verdad seguramente le va a tirar con todo, no cualquiera; eh.
En fin, roguemos que no corra sangre.
Nooooo!!!
ResponderEliminarClaudio Tepongo lo da vuelta como una media. Pobre tipo.
Esperemos que resista.