CON RAZÓN TANTO APURO

Ahora se entiende el apuro de Lifschitz por cerrar la paritaria con el solo acuerdo de UPCN, y liquidar los sueldos con el primer tramo del nuevo aumento.

No era solo para dar por cerrada la discusión salarial y cumplir con el pacto fiscal que firmó con Macri, acotando el gasto público y respetando el "cepo" puesto por la nación a las paritarias.

De paso era para que los funcionarios políticos (empezando por él mismo, claro) cobraran el aumento otorgado a los empleados públicos.

Con una aclaración: la Ley 10.174 que se menciona en el decreto no es "de enganche", es decir no obliga al Poder Ejecutivo a reajustar los sueldos de sus funcionarios, cada vez que les aumenten a los empleados y en la misma proporción.

Solo los "autoriza" a hacerlo, para cumplir así con lo dispuesto por la Constitución de la provincia en sus artículo 69 y 80 en cuanto a que el gobernador, el vicegobernador y los ministros del Poder Ejecutivo reciben por sus servicios "...la retribución que fije la ley...".

Es decir que aumentarse el sueldo es discrecional, pero solo lo puede hacer si antes aumenta los de los empleados. 

Y otra cosita, por el mismo decreto se fijan los nuevos valores de los viáticos diarios, a liquidar a partir del 1º de marzo y del 1º de agosto, como los tramos del aumento:

Los funcionarios políticos (el gobernador incluido) perciben en concepto de viáticos un importe equivalente a aplicar el coeficiente 1,3 al valor fijado para los empleados públicos; lo que supone que su viático diario será de $ 1.992,30 a partir del 1º de marzo, y de $ 2.156,80 a partir del 1º de agosto.

Saquen la cuenta de cuantos quilos de pan (unidad de medida elegida por el propio Lifschitz para las comparaciones) pueden comprar por día, solo con ese rubro.