domingo, 11 de noviembre de 2018

SIN NOVEDAD EN EL FRENTE


Casanello desvinculó (por el momento) a Cristina, de la causa de la "ruta dinero K" a la que nunca estuvo vinculada; pese a cinco años de operaciones judiciales y extrajudiciales, que incluyen al programa de Lanata y su gira mundial financiada por Paul Singer.

Lo que el juez dice en su resolución era sabido desde el principio, incluso por los que armaron la causa. Tanto como es sabido que es muy probable que la Cámara haga lugar a las apelaciones, e intente de algún modo volver a vincular a Cristina con la causa. Ha hecho cosas peores, como por ejemplo apretarlo a Casanello para que la indagara.

Así como ahora un voz oficial (la del juez) dijo que hay que sacarle la letra K a la ruta del dinero, hace poco otras voces oficiales dijeron que ni Máximo Kirchner ni Nilda Garré tienen ni tuvieron cuentas en el exterior. Seguimos esperando -en vano, porque nunca llegarán- las rectificaciones de Daniel Santoro y Clarín por la publicación de información falsa. 

Tampoco apareció la foto de Boudou con Vanderbroele, como no sucedió la reunión entre Cristina y Casanello en Olivos, como quedó claro que Aníbal Fernández no era "La Morsa" y el propio Lanatta (el del triple crimen) confesó que desde la producción del programa de Lanata le pagaron para que lo involucrara en la causa, mintiendo al respecto.

El periodista Pablo Duggan (al que nadie podrá acusar de kirchnerista) publica un libro demostrando de modo contundente que Nisman se suicidó, y que desde el gobierno presionaron a la Gendarmería para que hiciera una pericia trucha tendiente a demostrar que lo mataron. Nada que no se supiera desde el principio, ahora confirmado desde el otro lado de la grieta.

El PBI robado no aparece por ningún lado aunque sigan las excavaciones y allanamientos, y la causa de la fotocopia de los cuadernos tiende a languidecer, por el propio peso de su orfandad probatoria. Y así podríamos seguir con muchos otros ejemplos de cosas que se dieron por ciertas y luego se revelaron falsas; pero que ya cumplieron su propósito político en tiempos de post verdad, audiencias replicantes y premios vergonzosos de FOPEA. 

Y aquí nos queremos detener precisamente: todo este asunto de "la corrupción K" deberá en algún momento ser sopesado debidamente, para calibrar su real incidencia en la conformación de la subjetividad social en orden a las decisiones sobre el voto; para separar la paja del trigo y establecer claramente cuantos realmente prestan atención a estas cuestiones a la hora de votar, y cuantos las utilizan como fundamento aparente en el debate cotidiano, de motivos reales ocultos, mas vinculados a sus ideas de país, sociedad, Estado, política y economía.

La diferencia -a los fines de la militancia y la praxis política- es crucial, porque para el núcleo duro del voto macrista nada cambiará por un fallo judicial más o menos, y es inútil intentar hacer que cambien su percepción: para ellos el kirchnerismo es intrínsecamente corrupto y si la justicia aun no ha logrado demostrarlo, es porque es cómplice, o ineficiente. No necesitan pruebas porque tienen convicciones íntimas, en las palabras del juez Moro.

En todo caso y si se quiere leer más allá de las consideraciones estrictamente jurídicas de la resolución de Casanello, se la puede interpretar con la metáfora del vidrio arañado que se empieza a astillar, hasta que se termina rompiendo: acaso en Comodoro Py y los tribunales hayan empezado a olfatear que los tiempos políticos han cambiado, porque Macri y su gobierno declinan en imagen positiva, en la misma medida en que Cristina crece en las encuestas como alternativa para ganarle.

La disputa política entonces sigue estando por otro lado, por afuera de los culebrones judiciales y las operaciones del periodismo servilleta: en las "efectividades conducentes" de las que hablaba Ubaldini, más vinculadas al estómago, las facturas de los servicios y las alquimias para llegar a fin de mes. Esas cuestiones que son precisamente las que crearon el escenario que están reflejando las encuestas. Tuits relacionados:


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