Hace un par de días Miguel Lifschitz dijo en un reportaje que le dejaba a Perotti "un Fórmula 1", porque Santa Fe era, junto con Córdoba, la provincia mejor administrada del país.
Debe ser un Copersucar de la década del 70 el Fórmula 1 del que habla el gobernador saliente, porque la realidad se encarga de desmentirlo a cada paso: como muestra la imagen de apertura, el gobierno que le diseñó a Perotti el presupuesto de su primer año de gobierno con un plan de obras públicas de 42.000 millones de pesos, tiene obras paradas por falta de pago, con despidos de trabajadores de las empresas contratistas.
Y eso que las empresas que forman la UTE adjudicataria no son cualquiera, sino "las 3 hermanas" favoritas de las obras provinciales y municipales en la ciudad de Santa Fe y aledaños: COEMYC, Mundo Construcciones y Ponce Construcciones. Mundo es, además, la empresa que aspira a quedraes (si no es que ya se quedó) con la concesión por 30 años de la terminal de contenedores del puerto de Santa Fe.
Al mismo tiempo, el ministro Saglione dice que el déficit de la provincia para el cierre de este año es de 9000 millones de pesos, pero no explica de donde lo saca: en la página web oficial la última cifra disponible es del 30 de septiembre pasado, y para entonces estaba pisando los 12.000 millones de pesos.
Tanto debe la provincia que el 29 de noviembre pasado el propio Lifschitz dictó el Decreto 3917, por el cual transfiere casi 83 millones de pesos de "Servicios de la Deuda" a la Fiscalía de Estado, para que pueda levantar embargos por esa cifra trabados contra la cuenta Renta Generales en el Nuevo Banco de Santa Fe, por proveedores y contratistas a los que les deben facturas y certificados.
Ese mismo día (29 del mes pasado) Lifschitz, el de la "provincia Fórmula 1", siguió refinanciándoles deudas por anticipos de coparticipación a los municipios y comunas como hizo en su momento con Rosario (ver al respecto acá), claro que por montos menores: a Santo Tomé (Decreto 3931), a San Cristóbal (Decreto 3932), Zenón Pereyra (Decreto 3934), Maciel (Decreto 3935), San José del Rincón (Decreto 3936) y Capitán Bermúdez (Decreto 3961).
Ese mismo día 29 y por el Decreto 3929, le liberó a la Municipalidad de Santa Fe un ATN (Aporte del Tesoro Nacional) por 25 millones de pesos, que lo pisaron porque era para Corral, y ahora lo destraban para que lo cobre Jatón.
El mismo Jatón que se va a beneficiar con un "aporte no reintegrable" de 120 millones de pesos otorgado por Lifschitz el día antes (28 de noviembre) para la disposición final de los residuos sólidos urbanos de la Municipalidad de Santa Fe.
Curioso: mientras permaneció impasible en el conflicto de Corral con una de las empresas recolectoras de residuos que suspendió los servicios y se irá de la ciudad por deudas que contrajo con ella la Municipalidad, la cercanía de la asunción de Jatón como intendente le despertó a Lifschitz la preocupación por la basura en la ciudad capital de la provincia. Tuit relacionado:
Miguel Lifschitz dijo que "no vamos a poner obstáculos" y que deja una Santa Fe que es "un Fórmula 1" https://t.co/wfwmY176aA pic.twitter.com/dwAOXBscTz— Agencia Télam (@AgenciaTelam) December 5, 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario