LA FRASE

"VOLVÍ PARA OFRECERLE AL PRESIDENTE MI COLABORACIÓN PARA RESOLVER EL PROBLEMA DE LOS CANDIDATOS QUE PROPUSO PARA LA CORTE." (FABIÁN RODRÍGUEZ SIMÓN)

martes, 23 de abril de 2013

SIGUEN LLEGANDO CARTAS


La captura corresponde a una encuesta de Infobae que indaga respecto a los motivos por los cuales el gobierno aceptaría introducir cambios no -como dice el diario de Hadad- en "el proyecto de reforma judicial" (son seis proyectos muchachos, lean su propio diario para estar mejor informados); sino concretamente en el que regula el funcionamiento del Consejo de la Magistratura.

Vemos que -quizás como una consecuencia de una muy alta autoestima- los caceroleros se autoatribuyen (a no dudarlo que los que votaron esta opción participaron de las protestas del 18A, o se sienten identificados con ellas) haber forzado al gobierno a modificar el proyecto.

Lo cual es muy interesante, porque hasta hace unas horas convocaban al 24A (la convocatoria debe seguir por las redes sociales) para, lisa y llanamente, impedir que la reforma se vote; sin más alternativa.

En una visión más realista, los que votan en la encuesta han puesto a la carpa blanca de la oposición y el paro de Piumatto (sumados) en un módico 7,86% de influencia, en la decisión de introducir cambios, de los un 0,92 % corresponde a la carpa opositora: lo que se dice una verdadera bisagra de la historia, en la percepción ciudadana.

Y las palmas se las lleva la carta que los jueces federales le mandaron a Lorenzetti, y que éste le hizo llegar a los diputados, de la que se habla acá en el propio Infobae, y acá en La Nación para señalar que el gobierno aceptaría cambios en el régimen del manejo presupuestario del Poder Judicial (que seguiría en manos de la Corte), y en la designación de los secretarios y funcionarios jerarquizados de la justicia, que seguiría como hasta ahora: en manos del dedo de los jueces, y no por concurso como planteaba otro de los proyectos. 

La famosa carta la transcribimos en parte acá para que se entienda mejor lo que dice:


Vamos a tratar de traducir al criollo el idioma de los jueces, porque como sabemos suelen usar una jerga poco accesible al hombre común. Esto sería más o menos lo que están queriendo decir:

* Nos preocupa la reforma judicial impulsada por el gobierno, exclusivamente en cuanto se mete con el manejo de la guita del Poder Judicial: las cautelares, los grupos vulnerables, que te van a sacar el departamento y la caja de seguridad y todas esas garchas, quedan para los giles que salen a cacerolear, el CELS, el CIPPEC y Poder Ciudadano.

* El manejo de la guita (y la política salarial, los contratos, los nombramientos y la designación de los jueces subrogantes) tiene que seguir como hasta ahora: en mano de la Corte y de los jueces, y no del Consejo de la Magistratura, como planteaba el proyecto y dice el artículo 114 inciso 3) de la Constitución: "El Consejo de la Magistratura, regulado por una ley especial sancionada por la mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cada Cámara, tendrá a su cargo la selección de los magistrados y la administración del Poder Judicial.

Serán sus atribuciones:

3. Administrar los recursos y ejecutar el presupuesto que la ley asigne a la administración de justicia."   

Si algún gil se creyó que nosotros íbamos a garantizar la defensa de la Constitución aunque nos recorte algún privilegio, que se joda por creerse todo lo que dicen en TN.

* El Consejo de la Magistratura es una auténtica poronga que no sirve para nada, y que sólo se le pudo haber ocurrido a los radicales. A menos que lo manejemos nosotros; por eso como no podemos decir que nos oponemos a que la gente vote a sus miembros, le quitamos las funciones que le da la Constitución, para manejar la guita del Poder Judicial.

Y sin reformar la Constitución, ¿o se creen que somos kirchneristas, que andamos metiendo mano en el texto sagrado?

* Estamos de acuerdo (en teoría) con que los empleados de la justicia sean designados por concurso, pero es mucho laburo hacer concursos, por eso sigamos como hasta ahora: a dedo nomás; o por lo menos que hagan concursos para nombrarlos, pero a los de otros, ni se les ocurra hacerlo con los nuestros, como los secretarios. 

* Estos son los temas que verdaderamente nos importan, y le pedimos a Lorenzetti que se haga cargo de resolverlos. Si puede convencer a los legisladores de cambiar los proyectos, mejor, y si no que le busque la vuelta para que los declaremos inconstitucionales; y listo, como ya le dijimos. Que para algo somos jueces.

Guita, poder, acomodos, influencia, dedo: eso es lo que piden los jueces, y eso es lo que (al menos según el 42,51 % de los que contestaron la encuesta de Infobae) le deberíamos a los caceroleros, si es que el gobierno accede a introducir los cambios que piden.

Y después dicen que los cacerolazos no conducen a nada.

Eso sí: antes el gobierno era intransigente, ahora se enfurecen (como Carrió) porque pactó con Lorenzetti (¿el manejo de la chequera del Poder Judicial por el fallo de la ley de medios?)

Mientras tanto la oposición trasladaría la carpa a Tribunales:


PD: ¿la del círculo rojo es "Chiqui" González, la ministra de Innovación y Cultura de Bonfatti?

Si es así, escuchó "carpa" y pensó: "esta es la mía, mimos, zancos, payasos".

Y al menos en lo último, no le erró ni medio.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Que te pasa, Poder Judicial?
¿Estás nervioso?

El Colo.

Anónimo dijo...

Da gusto recorrer en estos días los Juzgados Federales.
Las caras de preocupación conviven con los funcionarios que están de acuerdo con una reforma que la realidad pide a gritos hace treinta años.
Parece que se terminan los privilegios, y entonces, los preocupados son los personajes que tienen muchas limitaciones.
Se abre el Feudo, y van a salir a la luz manejos injustificables. De gente y de presupuestos.
Para los preocupados, los que se sienten avasallados en sus principios republicanos,siempre está la alternativa de renunciar y dedicarse a la profesión en el ámbito privado. Con lo capaces que son, seguramente tendrán éxito.

Anónimo dijo...

http://goo.gl/AolIj