MAJUL TIENE LO QUE HAY QUE TENER PARA SER UN PELOTUDO PRÉMIUM

(*)

Hay una gran diferencia entre Daniel Scioli y Mauricio Macri. (es verdad: Macri tiene los dos brazos) Al candidato del FPV, quien dedicó los últimos 20 años de su vida a llegar a la presidencia, no se le pasa por la cabeza la alternativa de perder y haría casi cualquier cosa por no dejar escapar esta gran oportunidad. (menos mal que pusiste el "casi") Además, si fuera derrotado, ¿cuál sería su futuro político? El peronismo puede perdonar cualquier cosa, menos la derrota. (depende, mirálo a Scioli abrazado con Buzzi el otro día) En cambio, Macri no siente que se juega la existencia en las próximas elecciones. (¿vos decís que a Macri en el fondo todo le chupa un huevo?) Trabaja para ganar, cree que va a ganar y quiere ganar. (aclaración necesaria porque el párrafo anterior generaba inquietud...entre los macristas) Sin embargo, si le dan a elegir, los fines de semana preferiría estar con su esposa, Juliana Awada, (¿sólo los fines de semana, de lunes a viernes no se la banca?) y su hija más pequeña, Antonia, (ojo, mirá que se olvidó de ponerla en la declaración jurada) en vez de bajar y subir de la camioneta de campaña. (¿no va en avión a todos lados?, con razón quiere dedicarse a otra cosa: debe tener el culo chato) En su fuero íntimo, considera que, si no prevaleciera, podría elegir entre transformarse en líder de la oposición (un cargo importantísimo en la Argentina, y sobre todo con permanencia garantizada, mirá Carrió) o disfrutar un poco de la vida, más allá de la política. (eso, el reposo del guerrero, un descanso bien merecido luego de una larga vida de trabajo con manos callosas agarrando el arado y el torno, no le vendría mal)

Sergio Massa tiene una mezcla de ambas pulsiones, (¿rascarse los huevos o el orto decís vos?) pero la que predomina es la de la búsqueda del poder, porque es la que mamó del peronismo y del kirchnerismo en los últimos años. (obvio, en la UCD no se preocupaban de esas cuestiones porque siempre tenían contactos en las fuerzas armadas y seguro terminaban en el gobierno tras el consabido golpe de Estado) Es el más joven de los tres. Y comprende que quizá su turno puede llegar dentro de cuatro años. (lo mismo les viene pasando a Pino Solanas desde 1992 y a Altamira desde 1983, y a Chacho Alvarez, y mirá como le fue) Depende de la perspectiva con la que se lo analice, la psicología de Macri podría ser mejor o más sana. (de la perspectiva, y de la moneda que le arrimen al periodista, como en éste caso) "Habla de un hombre normal, menos desquiciado. ¡Y qué bien le vendría a la Argentina un presidente menos exaltado, por lo menos desde el punto de vista emocional!", (eso, lo que está haciendo falta acá es un De La Rúa, un Binner) me dijo un licenciado en sociología que hace encuestas nacionales, (¿el profesor Giacobbe?) pero que va a votar por Margarita Stolbizer en la primera vuelta. (ahí está: apareció el voto de Marga, en algún lado tenía que estar)

En la biografía no autorizada que escribí en diciembre de 2012, (no autorizada por la sintaxis) Jorge Lanata concluyó que para ser presidente de un país como la Argentina tenés que ser un psicópata y no poseer ni un rasgo de humanidad. (o sea que para él el más apto fue Videla. Igual, en EEUU le dan la razón, si no mirá los Bush padre e hijo. Ni hablemos de Alemania con la Merkel) Por eso, entre otras razones, había rechazado la propuesta de ser candidato a jefe de gobierno de la ciudad. (claro, si le ofrecían ser candidato a presidente aceptaba, porque cumplía con todos los requisitos) Los animales políticos que ocupan cargos en la Justicia, (¿cómo, en la justicia hay "animales políticos", no son todos juristas independientes?) los ministerios, los sindicatos y las áreas de decisión de las grandes empresas piensan exactamente lo mismo. (por eso ponen al frente a psicópatas sin el más mínimo rasgo de humanidad) Un juez de Comodoro Py que el martes estuvo en la entrega de los Premios Perfil a la Libertad de Expresión (Bonadío) lo interpretó así: "Ni Macri ni los candidatos de Cambiemos tienen el fuego sagrado del peronismo. (obvio: el fuego sagrado del peronismo es el que se prende para hacer los choripanes) Les hace falta un poco más que la reivindicación de la República. Hacen falta mucho dinero, (Macri cumple el requisito, a menos que vos creas que la declaración jurada que presentó va en serio) pocos escrúpulos (ahí Carrió y los radicales pueden hacer su aporte) y una dedicación a tiempo completo. (ahí cagaron todos, venían bien. Pero el tipo éste ¿estaba hablando de la política o de cómo hacer carrera en la justicia?) La misma obsesión de Néstor y de Cristina". El magistrado lo sabe porque los padeció. (¿también en la época en que fue funcionario de Corach y Menem los padeció, eran bravos como jefes?) El ex presidente se levantaba y se iba a dormir pensando en la política y el poder. Hay decenas de anécdotas que lo recuerdan discutiendo, y no de manera suave, con su compañera de toda la vida, por alguna decisión no compartida. (en cambio Mauricio con Juliana ni un sí ni un no: ella le dice "ni se te ocurra clausurarme un taller clandestino" y él le responde "pero mi amor, ¿cómo pensás que a mi me importan un pito todos esos bolivianos esclavizados que trabajan para vos?) Durante el primer viaje oficial que Kirchner hizo a Nueva York, al entonces canciller Rafael Bielsa le sorprendió que el jefe del Estado recorriera la ciudad a pie y no se detuviera a ver ni una vidriera ni la cartelera de una obra de teatro. Bielsa, un hombre muy interesado en la cultura, le preguntó por qué. Kirchner le respondió que lo único que le interesaba era la política. El ministro insistió: "¿En serio?". Y el jefe del Estado lo pensó mejor y le contestó: "Bueno. Lo único que me importa, además de la política, es hablar de Racing con Máximo". (bueno, Macri en algo es parecido: sólo le interesa hablar de Boca, lo demás realmente le chupa un huevo, lo dijiste vos mismo un par de párrafos más arriba)

Macri comprendió de manera cabal que su "amigo Daniel" haría cualquier cosa para llegar a la presidencia cuando confirmó que Scioli había instruido a sus voceros para que salieran a denunciar a Fernando Niembro. (claro, porque hasta ahí la campaña venía tranqui, con denuncias contra Scioli porque se fue de viaje con la provincia inundada, Mariú Vidal saliendo por el conurbano con las botitas de goma y Mauricio ofreciendo todos los equipos del gobierno de la ciudad) "Daniel y Fernando eran amigos. Fernando lo iba a ver, de vez en cuando, a su despacho del Banco Provincia. Nunca pensó que Scioli daría la orden de aniquilarlo", me dijo alguien muy cercano al líder de Pro. (Niembro) La misma fuente (Niembro) sostuvo que la demora en aceptar la renuncia de Niembro obedeció a que Macri no quería lastimarlo. "Fernando tiene problemas de corazón (sí: le falta, el corazón) y había terminado de salir de una situación familiar complicada. (por suerte la pudo resolver traspasándole La Usina a la ex mujer, para que tuviera con qué parar la olla) Por eso Mauricio no quería soltarle la mano", relató. (Mauricio, el humanitario del año; como lo comprueba el caso del Garrahan, ay, Majul) 

¿Puede haber sido esa demora lo que le impide ahora a Cambiemos seguir aumentando la intención de voto? (ah, no fue por haber lavado guita para la campaña a través de empresas y contratos fantasma, sino por haberse demorado en soltarle la mano al impresentable de Niembro, claro, se entendió perfectamente) De nuevo, los "toques" de "emocionalidad" son los que convertirían al ex presidente de Boca en un candidato mejor. (pará un poco con la campaña del PRO que se nota mucho Majul, ¿ahora decís que lo que lo perjudicó electoralmente a Macri es lo que lo hace el mejor candidato?) Pero para los expertos en pragmatismo peronista (listo, es oficial: ya hay "expertos" para todo, cerremo' todo y vamoló) es la evidencia de que Macri no tiene "lo que hay que tener". (¿huevos, cerebro, constancia, ganas de laburar, bigote?) Scioli y Massa miran encuestas todos los días. Propias y ajenas. (hacé la prueba de escribir alguna vez una columna sin mencionar la palabra "encuestas") El gobernador de la provincia exige a sus colaboradores que trabajen para llegar al 45% de los votos y todavía tiene la esperanza de poder alcanzarlo. Su recorrida de esta semana en el conurbano se explica porque quiere evitar posibles fugas y consolidar el voto peronista. (ah, ¿no estaba buscando precios en el Mercado Central? decí que te tenemos a vos Majul, si no quien sabe que haríamos) El ex intendente de Tigre le pidió a su grupo de apoyo "una semana más" para intentar arrebatarle a Macri el segundo puesto. Fuerza la máquina, los recursos y las propuestas. (y fuerza la lógica sobre todo, porque está diciendo disparates con ametralladora) El equipo de Cambiemos, al contrario, parece moverse con una parsimonia sorprendente. (eso es porque desde el PRO no convocan a los expertos de la UCR, que le pondrían vértigo a la cosa) "El que se equivoca, pierde. El que se desespera, también", me dijo uno de los jefes de campaña. (¿cuál, el que le recomendó a Macri la candidatura de Niembro u otro?) Esa carencia de dramatismo es lo que exaspera, incluso, a los dirigentes más políticos de Pro. "Nos estamos jugado la vida y los integrantes de la mesa chica nos dicen que nos quedemos tranquilos." (es que "los integrantes de la mesa chica" son uno: Caputo, que tiene la vaca atada, y si le falta guita, le pide a Macri y listo) Los macristas que vienen del peronismo son todavía más alarmistas. Consideran que ganarle a Scioli equivale a romper con 30 años de sistemas de negocios. (obvio, para reemplazarlo por un sistema transparente, donde todos los contratos se hacen por licitación, se publican en el Boletín Oficial y nunca se los dan a los amigos. Ah, no, pará...) "A estos tipos no los vamos a sacar del poder agitando el fantasma del fraude y hablando de mejorar la calidad institucional. Tenemos que responder golpe por golpe. Denuncia por denuncia". (también está la alternativa de sacar más votos en las elecciones, no la descarten de antemano)

Los que manejan encuestas cualitativas (un invento tuyo, que ahora te copia Pagni, llegaste Luis) sostienen que la mayoría de la gente está "desconectada" del escenario electoral. (o hinchada las pelotas con la campaña y los spots en la tele, manejálo) Y que la verdadera batalla va a empezar dentro de dos semanas, con la publicidad de los candidatos en la calle. (¿y los afiches que vienen pegando hace meses que son, otros curros de la consultora de Niembro?) ¿Se esperan nuevos carpetazos? En el Frente para la Victoria aseguran que todavía no pusieron toda la carne en el asador. (ah, claro, y te cuentan a vos que están preparando nuevos carpetazos, sos un genio Majul) Los estrategas que trabajan con Macri (si son "estrategas" y "trabajan" en el PRO no tienen mucho futuro, avisáles) afirman que si insisten en los ataques, la campaña sucia se podría llegar a convertir en un boomerang. "Lo único que mueve el amperímetro de los votos es la preocupación por la economía", (¿en serio, vos decís que el caso Nisman y las denuncias de corrupción no prenden en la gente, que le chupan un huevo? ¿o sea que escribiste como 100 columnas al pedo hablando de temas que no le interesan a nadie? Dolor país) explican los encargados de comunicación de Pro con una encuesta cualitativa (ufff) en la mano. Mientras tanto, apuestan a una campaña "emocional". (¿y por qué no hablan de economía entonces, que clase de "estrategas" son? con razón Niembro se animó a tanto: cualquiera se da cuenta que a Macri le afanan la guita fácil)

"Empatía con el ciudadano y no desesperación por seguir en el poder. Eso es lo que hay que tener para ser presidente", (ojo, entender algo de que se trata la cosa ayuda un poco, no lo menosprecien) contestó un alto funcionario del gobierno de la ciudad que también lee encuestas todos los días. (o sea que optó por la alternativa que más le gustaría a Macri: poder rascarse los huevos, porque le queda tiempo para leer encuestas)

(*) Las negritas son nuestras, el original acá.