Son absolutamente incapaces de sostener un debate político serio, leal, franco y honesto sobre nada.
Son enfermos de gobiernocentrismo, o peor aun: de cristinocentrismo.
Están tan obsesionados con el kirchnerismo y con Cristina y tan pero tan ardidos (ya saben donde) con el resultado de las elecciones que se nublan, y se la pasan todo el tiempo pensando y ejecutando éste tipo de pedorrradas, agarrándose de cualquier cosa (como Clarín o La Nación, por algo los leen y les creen) para pegarle al gobierno.
Echándole la culpa de todo lo malo que pasa, y de lo que no pasa (como en éste caso con las declaraciones falsas de Crismanich), también.
Deben haber festejado todas las derrotas de los deportistas argentinos en Londres, como si fueran elecciones perdidas por Cristina, o ganadas por ellos.
Son capaces hasta de festejar la llegada del barco de guerra inglés a las Malvinas, porque se ilusionan con que de paso, bombardee con un misil la Rosada.
Ni siquiera tiene sentido ponerse a discutir los resultados de las políticas deportivas nacionales (al que le interese, acá hay un buen resumen de lo actuado por el ENARD desde su creación en el 2009), porque no es ése el punto, y nunca lo fue.
Porque si lo hubiera sido hubieran tenido el mismo respeto por el esfuerzo y el trabajo de los propios deportistas (los que fueron a Londres y los que se quedaron acá) y por sus opiniones, que las dieron a quien se las pidió antes, durante y después de los Juegos Olímpicos, la enorme mayoría valorando el esfuerzo y el trabajo del ENARD y de la Secretaría de Deportes de la Nación.
Pero no les interesaba porque apuntan a otra cosa, y porque además muchos de los que hacen circular cosas como éstas en las redes sociales, o que las consumen con avidez (son adictos al pescado podrido, si les proporciona la falsa tranquilidad de que están en lo correcto al oponerse al gobierno), seguramente cuando se sancionó la Ley 26.573 creando el ENARD, protestaron porque el 1 % (neto de IVA, aclaramos) de sus facturas de celular iba a parar a financiarlo, para poder apoyar a los deportistas con becas, viajes, herramientas, material y equipo deportivo, entrenamiento y capacitación, posibilidades de competir.
O peor aun, fueron como el profesor de voley, experto en globalización y afortunadamente ex diputado Fernando Iglesias, que votaron la ley en contra como pueden ver acá:
Al igual que los socialistas santafesinos, y los diputados del Estado Libre Asociado de San Luis por los Rodríguez Saá: o sea justo los representantes de las dos ciudades que compitieron hace poco por ser sede de los Panamericanos 2019; todo un canto a la coherencia.
El resto de la Coalición Cívica, como muchos del PRO y otros opositores (con la excepción de los radicales que acompañaron), como Claudio Lozano, directamente se levantaron y se fueron de la sesión: el deporte les chupaba un huevo, entonces y ahora.
Pero en el fondo que éstas cosas pasen son una buena señal: si tienen que apelar a embarrar con falsedades a un pibe que lo único que hizo fue cumplir su sueño de participar de un juego olímpico, y encima nos llenó de orgullo trayendo una medalla, es porque realmente están al horno, y bien quemados.
6 comentarios:
Fijate la manija que le viene dando en twitter el bueno de Iglesias a cotejar la mala performance argentina con la gestión de Morresi y ya que estamos, bueh, lo de siempre.
Nuevos titulares de Clarín "La Kampora amenaza con quitar becas a los deportistas quer no hablen bien del ENARD". Clientelísmo deportivo.
C.A.
Y se rompió su ilusión de que la unica medalla que pudiera conseguir nuestra delegación fuera la de Del Potro que es "del campo"...
señores de la Kámpora: el deportista medalla de oro es Crismanich y no CRISTINAmich...
Cuando los veamos a los de la Cámpora (que problema con poner la k en todo tienen algunos) les avisamos, anónimo. Y claro, la que perdió en todos los otros deportes fue Cristina (perdón: Kretina)
Estimados amigos de la CKSF: lo que dije a las 14:46 fue una ironía. Abrazo.
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