LA FRASE

"VOLVÍ PARA OFRECERLE AL PRESIDENTE MI COLABORACIÓN PARA RESOLVER EL PROBLEMA DE LOS CANDIDATOS QUE PROPUSO PARA LA CORTE." (FABIÁN RODRÍGUEZ SIMÓN)

jueves, 9 de agosto de 2012

VALERGA ARÁOZ, OTRO QUE -COMO LANATA- ESTÁ PODRIDO DE HABLAR DE LA DICTADURA


Igual que el gordo bufarra, que fue a Jujuy y en lugar de interiorizarse por la causa del apagón de Ledesma, se la agarró con Milagro Sala, este muchacho Valerga Aráoz está tan podrido de que le hablen de la dictadura, que se olvidó que fue uno de los jueces que juzgaron a las Juntas en el gobierno de Alfonsín (ver foto); y ahora defiende a uno que está acusado de ser cómplice civil del genocidio:


Aunque pensándolo bien, si nos ponemos a hilar fino y separamos la decisión histórica de Alfonsín de promover ese juicio (con los límites concretos que tuvo, que estaban en su idea de hasta dónde tenía que llegar, pero no por eso menos destacable), de la persona de los jueces (y fiscales) de carne y hueso a los que la historia los puso en ese lugar, y lo que terminaron haciendo después en muchos casos (nos vienen a la mente Moreno Ocampo y el inefable Gil Lavedra), capaz que la decisión de Valerga Aráoz de asistir a Blaquier no nos sorprenda tanto.

Porque recordamos al pasar que (sin ir más lejos) también defendió en su momento a Enrique Mathov, el ex Secretario de Seguridad de De La Rúa, en la causa por los muertos por la represión en diciembre del 2001; con lo que es probable que haya sido en el momento del juicio a las Juntas, cuando verdaderamente se sintió incómodo en su fuero íntimo.

3 comentarios:

Alguien dijo...

Chicos, un poquito de madurez. Basar la defensa en que un empresario no estuvo vinculado con la dictadura no quiere decir que uno simpatice con la dictadura. Decir que sólo hay tres o cuatro testimonios incriminatorios, que son ambiguos o desmentidos por los propios declarantes o inexactos tampoco. Ninguno de ustedes condenó a las juntas militares a pocos años de iniciado el proceso democrático y desconozco si tendrían los huevos para hacerlo. Entonces habría que ser un poquito cuidadoso al criticar a ciertas figuras.

Alguien dijo...

En efecto, nadie dice acá: "Eh loco, re-bancamos el genocidio" ni nada que se le acerque. Acá se dice "pará, qué se yo qué se hace con todas las camionetas de mi empresa"; o bien "está mujer dio seis versiones contradictorias entre juicio y juicio y el fiscal tomó la que le conviene"; "este documental no se filmó en Ledesma"; "está información no salió de ningún expediente"; "Ledesma construyó, entre el 76 y el 77, el doble de viviendas para sus empleados que las que hizo la provincia de Jujuy entre 2008 y 2009"; "el sindicalista citado por la querella dice que tenía trato cordial con la empresa y obtenían ventajas"; "acá hay un hombre que dice que vio una camioneta de la empresa al secuestrarlo y al mismo tiempo que tenía los ojos vendados"; "la mayor parte de los 9 empleados que trabajaban en la empresa al momento de la detención volvieron a ella al reaparecer, y algunos fueron ascendidos o subsidiados por ella"; etc..

La Corriente Kirchnerista de Santa Fe dijo...

Alguien dijo: parece que no leíste el post entero, porque expresamente se rescata la decisión de Alfonsín de juzgar a las juntas.

Parece que sos radical o del estudio de Valerga Aráoz (tan al tanto defensa de Blaquier estás), porque de la decisión de Valerga Aráoz (a quien nadie obligó a aceptar a Blaquier como cliente de su estudio) de defender a Mathov de su responsabilidad por la represión de diciembre del 2001 no decís ni pio.

Claro: en un caso (Alfonsín) hay algo para exhibir con orgullo, en el otro (De La Rúa) un muerto en el placar que ocultar.

Habría que preguntarse donde está la inmadurez