LA FRASE

"VOLVÍ PARA OFRECERLE AL PRESIDENTE MI COLABORACIÓN PARA RESOLVER EL PROBLEMA DE LOS CANDIDATOS QUE PROPUSO PARA LA CORTE." (FABIÁN RODRÍGUEZ SIMÓN)

miércoles, 20 de diciembre de 2017

DE NUEVO A LAS ANDADAS


Los resultados de las elecciones de octubre le mostraron al massismo que la "ancha avenida del medio" se angostaba devorada por la polarización, y que la estrategia de hacer "oposición responsable y constructiva" no daba frutos; menos cuando el gobierno de Macri dejaba en claro que profundizaba el rumbo de un ajuste impopular.

De allí su cambio de estrategia en el Congreso (coincidente con la salida de escena de Massa, que se quedó sin banca), que lo hizo converger con el kirchnerismo en alguna estrategia común contra la reforma previsional; conducida en el recinto por Graciela Camaño. Claro que lo espantoso del proyecto oficial ayudó para emblocar en su contra a mayor cantidad de opositores, para ser justos.

Sin embargo, no tuvo que pasar mucho tiempo para que volvieran a las andadas: en la madrugada de hoy se votó la reforma tributaria impulsada por Macri, que es mucho peor aun que la previsional; porque es una especie de "bomba racimo" que desparrama proyectiles para todos lados.

A saber: permite el revalúo impositivo y contable a las empresas para aliviarles la carga de Ganancias, las premia con una baja de 10 puntos en la alícuota del impuesto si en lugar de distribuir dividendos los reinvierten (aunque sea comprando LEBAC´s, como advirtió Kicillof ayer), rebaja los aportes patronales beneficiando a las grandes empresas en perjuicio de las Pymes (inmediatamente después de haber votado una rebaja en términos reales de las jubilaciones con el argumento de que el sistema no es sustentable), grava con Ganancias a las cooperativas, termina con la autarquía del ENARD privándolo de los fondos que le llegaban directamente del impuesto a la telefonía celular, y aumenta la carga impositiva sobre los monotributistas; sumándose así a la mayor presión que se va a verificar el año que viene en Ganancias para los trabajadores; a los que además el proyecto aprobado les grava con el impuesto las indemnizaciones por despido y los retiros voluntarios.

No obstante tales extremos (o precisamente por ellos) y como se puede ver en la imagen de apertura, el massismo se abstuvo en la votación, en lugar de rechazar el proyecto. Recordemos que también en su momento avalaron la rebaja y eliminación de retenciones, con la excepción de las mineras a las que por supuesto nadie defiende, salvo los gobernadores de la provincias cordilleranas.

En un punto se entiende: estando De Mendiguren en sus filas no podía esperarse que se opusiera a una reforma que aprueba muchas de las medidas contenidas en el pliego de demandas de la UIA y de la cúpula empresarial argentina, buena parte de la cual (empezando por Techint) había apostado en su momento a la candidatura presidencial de Massa, y aportó a su campaña.

En el transcurso del debate de ayer bastaba ver -y contrastar- el contundente discurso de Axel Kicillof llamando a las cosas por su nombre, con la exasperante tibieza de Marcos Lavagna; que expresaba hasta donde está dispuesto a llegar el massismo cuando están en juego los intereses de las grandes empresas: una cosa es asumir discursivamente la defensa de los jubilados, la otra es oponerse a los financiadores.

Esa es -lamentablemente- la cruda realidad y esos son los límites de la "ancha avenida del medio", que no habilitan el discurso tribunero de Massa (lejos, lo peor del massismo) diciendo que "Macri gobierna para los ricos"; cuando sus diputados en el recinto no se animaron a levantar la mano contra esos ricos, cuando se los beneficia rebajándoles impuestos.

Lejos de ser un inconveniente para el massismo en sí, lo expuesto lo es para el conjunto de la oposición; porque la construcción de una alternativa política competitiva de cara al 2019 requiere mucho más que una eficaz convergencia en la acción en el Congreso (de por sí dificultada con éste tipo de actitudes), sino más bien una previa discusión sobre cuáles son los intereses que se desean representar polìticamente, y cual es el proyecto polìtico que ha de impulsarse en consecuencia.

3 comentarios:

Carapachay dijo...

Mientras tanto en clarinlandia, acusan a Massa de aliarse con Cristina para dar un golpe. No se puede negar que son muy ocurrentes.

claudio maxl dijo...

Si tu enemigo se esta ekivocando dejalo tranka, a la aspiradora d 100.000 palos al consumo (con la consiguiente caida en recaudacion x IVA y ganancias) tras el sakeo a jubilados q asegura profundizar la recesion q ya no podra ser ocultada x el rebote d gato muerto estadistico se le suma la profundizacion del deficit x la reforma aprobada anoche, dejemoslos tranka....

Anónimo dijo...

No son ocurrentes. Son profesionales del odio. Y lo inoculan a través de los medios. Mientras saquean el país,hacen que muchos giles miren para otro lado.
El Colo.