Que expresión eligieron para el título, muchachos: "Punto final". Al fin y al cabo, Hadad lleva en la sangre el ADN carapintada; y todo lo que sirva para empobrecer a la democracia y favorecer a los negocios, lo excita y no se puede reprimir (que esto no se tome literalmente y fuera de contexto, como tolerancia de su parte a la protesta social).
Por aquéllo de árboles y bosques, los Jaimes y los Lázaros taparon los Panamaes y los ajustes, y quizás para calmar a don Héctor que está nervioso por el posible desembarco de Turner en él "Fútbol Para Cada Vez Más Pocos" y alterna mimos con palazos, apuraron este paquetazo de DNUS; entre ellos el 267 que se llevó puesta buena parte de la ley de medios (para entender su contenido, ver acá y acá)
La votación fue a mano alzada y no nominal como era habitual en Diputados en los tiempos de la escribanía kirchnerista, lo que impide saber (acta mediante) quiénes votaron a favor, en contra y quiénes se abstuvieron.
A escondidas, como con vergüenza, como si el Congreso fuera una sociedad off shore formada en un paraíso fiscal para evadir impuestos; que cuando es descubierta se niega o mnimiza.
Acaso porque eran concientes del latrocinio que estaban consagrando, llevándose puesta entre gallos y medianoche (aunque fuera a plena luz del día, lo que no deja de ser todo un síntoma) el corazón de una ley construida por 25 años de lucha de las organizaciones sociales de la comunicación; y aprobada previo amplio debate en foros, a lo largo y a lo ancho de todo el país.
Y todo a pedir de Clarín, para mantener y consolidar su imperio mediático: con el DNU ratificado ayer está en mejores condiciones de las que jamás estuvo para ejercer el predominio en el mercado de medios de la Argentina, mejor incluso que con la ley de la dictadura.
En la votación de ayer se reprodujo a grandes rasgos -aunque con números más ajustados- el resultado de la votación del arreglo con los buitres: una coalición construida de hecho en el Congreso que al dejar afuera al kirchnerismo expresa "a la Argentina normal" a la que volvimos.
¿Y qué más normal que un país en el que el Congreso se mueve al compás de Clarín?
Pero no solo de tumbar la ley de medios vive el oficialismo ampliado: acá pueden ver la nómina completa de los DNU de Macri validados con el mismo procedimiento oscuro (votación a mano alzada, para que no queda nadie escrachado en las actas); porque ninguno resiste la lupa.
Entre ellos la suspensión de la puesta en vigencia del nuevo Código Procesal Penal (moneda de cambio del gobierno con los jueces federales que a cambio le entregan el "mani pulitte" contra la corrupción...pero durante el kirchnerismo), el traspaso de las escuchas telefónicas a la Corte (sobre éste y el anterior, ver acá), la derogación de los impuestos al champagne y a los bienes suntuarios (otro logro en el camino a la pobreza cero) y el DNU 211, que abrió la puerta al "Megacanje II".
Este es -junto con el que desguazó la ley de medios- el más peligroso de todos, y expresa la desaprensión de los opositores que acompañaron al oficialismo, o peor aun, su total acuerdo con el rumbo que le ha impreso Macri a su gobierno: explicábamos acá y acá como el decreto convalidado ayer le permite al Banco Central entregar letras del Tesoro que en su momento recibió por el pago de la deuda con reservas, a cambio de dólares que les pide prestados a los bancos para ampliar esas reservas.
Sturzenegger (que ahora dice que no le preocupan las reservas, y que no comprará dólares para fortalecerlas porque para eso hay que emitir, y eso genera inflación) ya canjeó una de esas letras por un valor de 10.000 millones de dólares con una tasa cercana al 0 % (era deuda intra Estado, posible de refinanciarse una y otra vez), a cambio de 5000 millones que prestaron un grupo de bancos (los mismos que ahora pondrán los fondos para pagarles a los buitres, o colocarán los bonos para eso) a una tasa del 7,5 %; y a devolver en noviembre de éste año.
Con la venia del Congreso dada ayer, el BCRA dispone de letras del Tesoro por 65.000 millones de dólares más para repetir la maniobra, re-endeudando al país con acreedores externos privados, en moneda dura y a tasas altas: ese cheque en blanco firmaron los que votaron por ratificar el DNU de Macri.
Lo que sucedió ayer en el Congreso (por lo que se votó, como se votó y en que contexto: inflación y despidos en alza, salarios y actividad en baja, tarifazos salvajes) deja claro que con este gobierno no hay "oposición responsable" ni "moderada" posible: los que acompañan esto serán en todo caso oficialistas tibios, o no asumidos; y algunos ni siquiera eso.
Cuando se discutió el acuerdo con los buitres los que acompañaron al gobierno desde la oposición apelaron a "la responsabilidad", la "necesidad de garantizar la gobernabilidad" o los apuros financieros de las provincias, ayer no estaba nada de eso en juego. Una vez puede ser que probés, a la segunda ya es porque te gusta.
De este modo el gobierno avanza con paso firme porque buena parte de la oposición le hizo fértil un terreno que se suponía árido (el Congreso), con la misma facilidad con la que se arma una sociedad fantasma en un paraíso fiscal.
1 comentario:
se la estan buscando y ahora empiezan a entrar los nuestros del fpv...como bien decis esto no era una cuestion de "gobernabilidad" apriete de presupuesto y bla bla....esto es una agachada tremenda y encima a mano alzada para que no se sepa quien hizo que cosa COBARDES....
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