LA FRASE

"ME DICEN QUE ESTÁ VINIENDO PARA ACÁ EL MINISTRO CAPUTO, ASÍ QUE TRÁIGANME ESA REMERA QUE DICE "NO HAY PLATA"." (KRISTALINA GEORGIEVA)

sábado, 3 de agosto de 2013

¿PELIGRAN LOS QUIOSCOS RADICALES?


Leemos en Ambito Financiero: "La primera alarma en el radicalismo la encendió una ilusión de Gabriela Michetti, de la que este diario dio cuenta. Se trataba de la posibilidad, idílica y 24 horas después desmentida por el destinatario, de formar un nuevo bloque entre PRO y Sergio Massa tras las elecciones de octubre.

Se entiende esa vocación del macrismo de mostrar unidad con el intendente de Tigre y por ahora la cuestión quedó sólo en las ideas de Michetti.

Pero en la UCR arrancó en ese momento el temor por lo que podría pasar con el armado de un interbloque que reuniera a peronistas no kirchneristas que les permitiera llegar a sentarse como la segunda fuerza política con representación parlamentaria, al menos en Diputados. Hasta ahora, por lo menos en la década K, nunca se había dado la opción de un segundo peronismo (obviamente no oficial) con fuerza como para sacar suficientes diputados y seducir tras las elecciones a otras fuerzas para armar un interbloque.

El botín que está en el medio es la cuota de cargos que la Constitución nacional le reserva al primer partido de la oposición medido en representación en el Congreso, es decir la presidencia de la Auditoría General de la Nación y los estratégicos sillones en el Consejo de la Magistratura. De ahí la eterna pelea.

No parece posible -por lo menos Massa insiste hasta el hartazgo con esa garantía- que el Frente Renovador fuera a llegar a un acuerdo de fusión poselectoral con Cristina de Kirchner

De hecho, para la UCR un pacto de ese tipo despejaría el peligro de perder el primer lugar como fuerza de oposición. El riesgo es otro: si Massa y su lista logran sumar en las PASO y en octubre lo suficiente como seducir a peronistas no contenidos ante el fin del mandato de Cristina de Kirchner, un nuevo interbloque podría complicar a la UCR.

El radicalismo en esta elección, además, se somete a un test de estrés político como casi ningún otro partido. A diferencia del kirchnerismo que en este turno debe renovar las bancas obtenidas en su peor elección, la UCR debe reponer las bancas alcanzadas en su mejor elección reciente. Así, de 40 bancas propias, esta vez arriesga 22.

Finalmente, de acuerdo con el resultado, todo será cuestión de interpretaciones, duras y complejas si se tiene en cuenta que esos cargos que la Constitución reserva a la oposición son los únicos que el oficialismo debe ceder dentro de toda la administración. 

Así, no hay duda sobre la Auditoría General, donde se establece que "el presidente del organismo será designado a propuesta del partido político de oposición con mayor número de legisladores en el Congreso". Aquí hay un punto a favor de la UCR.

Pero en el reparto de cargos en el Consejo de la Magistratura puede no ser tan claro: "Correspondiendo dos al bloque con mayor representación legislativa, uno por la primera minoría y uno por la segunda minoría", dice el texto.

Queda como saldo otro cargo que no otorga la Constitución a la oposición, pero sí lo hizo la ley de medios: un sillón en el directorio de la AFSCA (que hoy ocupa el radical Marcelo Stubrin) y que puede ser tan preciado como cualquiera de los otros puestos. "

Sobre éste tema de los "quiosquitos" institucionales que usufructúan los radicales como principal oposición (al menos en los términos de estructuras partidarias tradicionales) hemos escrito varias veces en éste blog; la última de ellas acá.

La mayoría de ellos (el tercer senador por la minoría, las representaciones en el Consejo de la Magistratura o la Auditoría General de la nación) fueron gestados en el Pacto de Olivos y la reforma del 94'; y parte del canje de Alfonsín con Menem para acordar la reforma con reelección.

Expresaban la idea de Alfonsín (aun vigente) de conservar para su partido retazos de poder en el Estado que resistieran debacles electorales, pero terminaron funcionando como un placebo; que transformó definitvamente al radicalismo en un partido de no-poder; en más de un sentido.

Impotente en términos electorales, o sin vocación real de ejercer el poder aun cuando ganase elecciones: el ejemplo más contundente al respecto fue el gobierno de la Alianza. 

Mientras tanto, la "defensa de las instituciones y la república" (latiguillo permanente de la dirigencia radical) se confundió demasiado a menudo con la de estos quioscos, que posibilitan la subsistencia partidaria, en más de un sentido: representación parlamentaria más allá del volumen electoral real (el senador por la minoría), acceso al aparato estatal con los beneficios consiguientes (AGN), influencia en el diseño de la justicia (Consejo de la Magistratura).

Y visibilidad mediática obviamente: el caso de Despouy en la AGN es el más claro al respecto.

De cara al 2015, todo indica que la elección presidencial se volverá a resolver dentro del peronismo, y los radicales (aun reeditando el FPCyS en alianza con el socialismo a nivel nacional, para quedar como segunda fuerza electoral) harán de comparsa; y es dudoso incluso que tengan real vocación de llegar al poder. 

Pero la posibilidad de perder estos quiosquitos (de la que da cuenta la nota, aunque es muy improbable) les preocupa, y mucho.  

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Un par de preguntas para la gente de Santa Fe:
¿Se sabe algo allà sobre si Barletta resolvió (con calidad institucional) su enfrentamiento con Despouy?

Las denuncias contra Barletta, como el vaciamiento de la obra social durante su gestión como rector en la UNL, y otras irregularidades ¿Siguen en tràmite en la Justicia Federal, o están paralizadas?¿nunca lo procesaron al hoy candidato?

Anónimo dijo...

Traidores no voto. Prefiero votar a "nadie". Saludos.

Anónimo dijo...

Traidores no voto. Prefiero votar a "nadie". Saludos.

La Corriente Kirchnerista de Santa Fe dijo...

las denuncias (18 ó 19) están todas cajoneads, con la complicidad de jueces federales vinculados a la UCR, y a los que algunos periodistas de acá (paradójicamente) tildan de "jueces k"