LA FRASE

"LE DIJE AL PRESIDENTE MILEI QUE ESTOY MUY INTERESADO EN INVERTIR EN SU PAÍS, ESPECÍFICAMENTE CONTRATANDO A LOS CIENTÍFICOS DEL CONICET, ARSAT Y EL PLAN NUCLEAR QUE SU GOBIERNO ESTÁ DESPIDIENDO." (ELON MUSK)

jueves, 28 de mayo de 2020

LETRA CHICA


Leemos en Infobraden que a partir de las nuevas condiciones impuestas por el gobierno para recibir la ATP para el pago de parte de los sueldos al personal, algunas empresas que lo recibieron en abril estarían evaluando renunciar a recibirlo a partir de mayo, para lo cual el propio gobierno ya habilitó la opción en la página de la AFIP.

Las nuevas condiciones (que debieron haberse impuesto desde el principio, en nuestra opinión) refieren a que las empresas que obtengan la ayuda no deberán operar con cuentas o sociedades en paraísos fiscales (requisito que la nota por delicadeza no menciona), ni distribuir dividendos entre sus accionistas, ni operar en la bolsa con bonos u acciones (tipo el "contado con liqui" o el MEP), para acceder de ese modo a dólares y fugarlos. 

O sea, nada que demuestre que "tienen resto" y en consecuencia no necesitan la ayuda del Estado para pagar salarios, y al mismo tiempo, cortar vías que metan presión sobre el dólar oficial, para forzar una devaluación.

Lo que no hay en la nota es la más mínima mención a alguna empresa o grupo empresario en concreto que haya manifestado su intención de renunciar al beneficio bajo las nuevas condiciones, así como tampoco sabemos hasta hoy quiénes son los que venían operando en las últimas semanas con el contado con liqui o el MEP, y solo sabemos quienes fueron los mayores compradores de dólares para fuga durante el gobierno de Macri por una publicación de Horacio Verbitsky en "El Cohete a la Luna", pese a que la información proviene del Banco Central. 

Esto último es un grave error del gobierno pues, como el propio "Perro" señala en su nota, si sostienen que fugar capitales no es delito, no hay nada malo en que se publique quienes lo hicieron; porque además ayuda a entender desde que lugar hablan muchos de esos empresarios, empresas y grupos económicos, que -por ejemplo- suelen pedir transparencia y reglas de juego claras, saber quienes reciben "planes sociales" del Estado, o conocer en detalle las declaraciones juradas patrimoniales de los funcionarios públicos.

También esos mismos actores suelen financiar medios y periodistas (cuando no son directamente sus dueños o patrones) que abogan por saberlo todo acerca del Estado y el uso de los dineros públicos, salvo el que se destina a beneficiarlos a ellos (los únicos subsidios que molestan), o los fondos que el Estado deja de obtener como consecuencia de la evasión. Esos mismos grupos, empresarios y empresas se cuentan entre los habituales financistas de las "ONG's" que promueven "habeas data" para acceder a información pública, o ponen el foco en el Estado y la política como los únicos responsables de la corrupción, como si ésta no exigiese corruptores.  

No es casual que esas mismas empresas y empresarios sean los beneficiarios de los recurrentes blanqueos de capitales de nuestra historia; que garantizan la amnistía fiscal por impuestos no pagados en tiempo y en forma, al mismo tiempo que el oscurantismo y el secreto sobre sus bienes o activos "blanqueados": recordemos que el proyecto original del último blanqueo aprobado durante el gobierno de Macri contemplaba aplicarle el Código Penal a los periodistas que revelaran datos de él.

Cuando se trata de los intereses de los dueños de la Argentina, no hay nadie (o casi nadie) con cartelitos de "Queremos preguntar", y si algún caso cobra difusión, se trata de lúmpenes o perejiles como Milei, que sirven como consumo irónico en las redes sociales, o para distraernos de los grandes jugadores que de verdad se la llevan toda, delante de nuestras narices. 

Como los titulares de las cuentas fantasmas en paraísos fiscales detectadas por la OCDE en 2017 que el gobierno de Macri omitió prolijamente investigar en una especie de segundo blanqueo, y que hoy investiga la AFIP de Marcó Del Pont sin que sepamos quienes son; aun cuando nos lo podamos imaginar. Permitiendo ese "secretismo" estamos desperdiciando una poderosa arma en la batalla cultural, para que entre todos entendamos quienes son los verdaderos causantes de los problemas estructurales del país; que no son justamente los beneficiarios de la AUH, o los jubilados de la moratoria.

Pero si alguno dijera que en esos casos rige el secreto fiscal (que no ampara a los funcionarios públicos, cuyos patrimonios son analizados con lupa en los medios cuando no defienden los intereses que esos medios representan y expresan), cabría preguntarse de que secreto fiscal estamos hablando cuando de lo que se trata es de dar a conocer -como, reiteramos, ellos mismos reclaman tantas veces- saber que se hace con los dineros públicos. 

Y sin embargo como lo muestra uno de los tuits que cierra el post, ya consiguieron "tributaristas" del palo que alertan por la posible revelación de la nómina de los que recibieron la ATP, porque se violaría el "secreto fiscal". Que chantas hermosos. Tuit relacionado:

No hay comentarios: