LA FRASE

"LA CANTIDAD DE PERROS DEL PRESIDENTE ES UNA DE LAS CUATRO O CINCO COSAS EN LAS QUE LOS ARGENTINOS NOS TENDRÍAMOS QUE PONER DE ACUERDO." (MANUEL ADORNI)

lunes, 10 de enero de 2022

LAS CARPETAS DE PULLARO

 

El 26 de noviembre del año pasado la política provincial se vio sacudida por la noticia: allanamientos simultáneos en las sedes Santa Fe y Rosario del Ministerio de Seguridad, ordenados por fiscales del MPA, para -dijeron entonces- impedir que se destruyera documentación comprometedora sobre una presunta red de espionaje ilegal montada en tiempos en los que la cartera estaba a cargo de Marcelo Saín.

Se habló de carpetas conteniendo datos sobre dirigentes políticos (del oficialismo y de la oposición provinciales), gremiales, empresariales, periodistas e instituciones. Pasaron desde entonces 45 días y poco -o nada- sabemos de los avances de la causa en la justicia, salvo la difusión (por obvia filtración de los fiscales que la manejan) de una lista con 661 nombres de los presuntos "espiados" o "carpeteados".

Y por supuesto aparecieron las primeras víctimas: dirigentes políticos desprestigiados (como el ex ministro de Seguridad y actual diputado Maximiliano Pullaro), o ignotos (como "Paco" Garibaldi) se apuraron a presentarse "espontáneamente" para averiguar que datos habían recopilado sobre ellos, y denunciar que estábamos ante un hecho gravísimo, sin antecedentes en la provincia en tiempos democráticos.

Un mes y medio después de los allanamientos (que se practicaron sin orden judicial por hacerse en oficinas públicas) no hay hipótesis delictivas firmes, ni siquiera los fiscales aciertan a explicar bien cuáles son los delitos que investigan, ni quienes serían los presuntos responsables, tanto así es que no hubo ninguna audiencia imputativa (indagatoria) en la que a alguien se le endilguen los delitos; si es que estos a su vez -de existir- son de competencia federal, pues el espionaje ilegal sería competencia de la justicia federal, por violar la Ley 25520 de inteligencia nacional.

Tampoco existen las famosas "carpetas" de las que se habló en un comienzo, y los propios fiscales deslizaron que, de existir, no serían tan importantes para la causa como se dijo al principio. Ni tampoco gente que denuncie haber sido amenazada o apretada bajo la extorsión de revelarse contenidos comprometedores de las "carpetas" que no aparecieron: cualquier parecido con los cuadernos de Centeno, es pura casualidad.

Lo que sí pasó -además de las reacciones de los que "indignaron" enseguida y sin mayores elementos de juicio, demostrando de donde venía la maniobra- fue que ya no se habló más de otras causas que se venían ventilando en la justicia provincial, como la del juego clandestino que involucra al senador Traferri.

Y que la oposición, en ese tiempo transcurrido desde lo allanamientos para acá, pospuso el tratamiento del presupuesto provincial para éste año enviado por el gobiernador, lo mismo que la ratificación de la adhesión de la provincia al pacto fiscal firmado con la nación, y aprobó la ley tributaria con cambios que le restaron recursos al Estado provincial, en beneficio de los municipios y comunas.

Eso, y que durante este mes de enero la Legislatura -convocada a extraordinarias por el gobernador- está en receso, cerrada, y los legisladores opositores explican en las redes desde sus lugares de veraneo, por qué no pueden tratar ahora el presupuesto y el pacto fiscal.

Si hubiera que cerrar una conclusión sobre los presuntos "carpetazos" que no son tales (porque por empezar, no hay carpetas) basados exclusivamente en hechos antecedentes y consecuentes, habría que decir que mucho de lo que pasó después, explica los allanamientos espectaculares, que no llegaron a nada concreto, ni tienen la intención de hacerlo. Tuits relacionados: 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pullaro fué y es socio de Cantero.