Por A.C.
Se renueva la preocupación de Clarin acerca de la situación institucional del Banco Central, preocupación que la oposición abandonó por completo, luego de la batalla que encabezara el autor del libro “Sin Reservas”, la obra económica más brillante de la historia argentina, injustamente olvidada.
En la nota “El Gobiernocongela el pliego de Marcó del Pont en el Senado”, Clarin intenta -como siempre sin éxito- marcarle los tiempos al Gobierno Nacional, pretendiendo que el Ejecutivo impulse en el Senado el pliego para la confirmación de la Presidenta del BCRA.
Al cerrar la nota, se muestra la real motivación del grupo: “Además, la Presidenta tiene otro motivo para demorar el nombramiento de la economista. Marcó del Pont es una de las funcionarias que suena para reemplazar a Amado Boudou, que dejará el Ministerio de Economía si es que -como todas las encuestas preanuncian- se convierte en Vicepresidente. En ese sentido, en el Gobierno piensan que nombrar a Marcó del Pont ahora sólo serviría para adelantar una jugada . Por si acaso, cerca de la economista advierten que ella preferiría quedarse en el BCRA y no ir al Palacio de Hacienda.”
A Clarin, evidentemente, lo intraquiliza la posibilidad que Marcó del Pont acceda al Ministerio de Economía, y por eso, fiel a su estilo periodístico riguroso, de investigación y serio, ya adelanta “por si acaso“ que “ella preferiría” quedarse en el BCRA, según “cerca de la economista advierten”.
Sin precisar -por supuesto- quien o quienes son los que están tan cerca y le advirtieron a Clarin lo que Marcó preferiría, éstas investigaciones periodísticas y sus categóricas conclusiones, lo afirman como el diario más creíble del país, por estar a la vanguardia con información de fuentes directas e irrefutables, y con una gran lucidez para anticipar los hechos, como cuando expresa “…….Amado Boudou, que dejará el Ministerio de Economía si es que -como todas las encuestas preanuncian- se convierte en Vicepresidente” .
Y como la preocupación es profunda, Clarin no se limita a la investigación periodística, y toma también el camino de la docencia, lanzando -en la misma página- un Curso de Economía Republicana, con un título impactante: “Federalismo, república e independencia”.
Vamos a presentar primero al disertante, que es el Sr. Hernán Lacunza, hoy titular de Empiria Consultores, pero que antes fuera Subgerente General de investigaciones económicas del BCRA, durante la gestión de Redrado, y que tuvo que irse junto con el autor del libro “Sin Reservas”.
Como pueden ver en la nota de título impactante pero de contenido nulo, Lacunza mezcla sin ningún sentido, artículos de la carta orgánica del BCRA, con preceptos constitucionales y con frases de enorme contenido técnico como “no es buena idea poner en las mismas manos la “maquinita” de impresión de billetes, a fin de evitar la tentación de confundirla con la “máquina de la felicidad” .
Fuera de la catarata de incoherencias mezcla de monetarismo e indigación republicana , lo que en realidad le molesta a Lacunza y a su consultora, es la polìtica que se implementa desde el BCRA, interviniendo en el mercado en resguardo de los intereses del país, y que el Gobierno Nacional cancele vencimientos de la deuda a través del Fondo del Bicentenario, y que no se recurra a solicitar préstamos al mercado, y por lo tanto el Estado Nacional no pague comisiones a las consultoras como la de Lacunza.
Como lo publicita en su página web, Empiria Consultores brinda asesoramiento (o tiene ganas de brindarlo), a gobiernos locales, extranjeros y a organismos internacionales (de crédito).
Y como con la gestión actual, no han tenido posibilidad de cobrar suculentas comisiones por asesorar al Gobierno en la toma de créditos para cancelar servicios de la deuda, eso altera los nervios federales, republicanos e independientes de las consultoras como Empiria.
Por eso Lacunza, lanza su categórica nota en defensa de la independencia absoluta del BCRA, aunque tenga que reconocer que “El Banco Central no es una “isla” en la estructura institucional de un país, sino un mero brazo instrumental de la política económica para alcanzar el desarrollo sostenido”. Pero Lacunza no está de acuerdo con la política económica del Gobierno Nacional, y tampoco con la participación en la misma del BCRA, y por eso nos regala esta confusa exposición.
Como la economía seguirá transitando el camino iniciado en el 2003, continuará en los próximos días en Clarin, el Curso de Economía Republicana, un curso donde dificilmente se pueda aprender algo, pero que sirve para reírse mucho.
3 comentarios:
Lacunza, si quiere plata, que agarre una pala y labure. O que salga a vender el libro de Redrado.
La nota esa de Federalismo, Republica e independencia en el Clarinete es lamentable. Son de cuarta. De cuarta. De donde salió el Lacunza ese, pobre muchacho.
A.C., publique más seguido que sus notas son muy buenas (Elabas)
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