LA FRASE

"AEROLÍNEAS ARGENTINAS NO DEPENDE DE MI CARTERA, ASÍ QUE NO VEO POR QUÉ MOTIVO ME VESTIRÍA DE AZAFATA." (LUIS PETRI)

lunes, 3 de diciembre de 2012

DE ESTO HABLABA CRISTINA


Cuando puso en funciones a Martín Sabatella al frente de la AFSCA, decía Cristina que había que prepararse para la cosas estrambóticas que se verían, leerían y oirían en los medios de cara al 7D; y ésta nota de Clarín de hoy sobre el año legislativo en el Congreso nacional es un buen ejemplo.

La nota está a tono con otros disparates publicados por el mismo diario, siempre con la letra que le aportan esas ONG que se creen las dueñas de la democracia (como Poder Ciudadano, por ejemplo, presidida por su abogado Wortman Jofré, el denunciador de periodistas).

Como por ejemplo ésta; en la que impugnaban los gastos del Congreso, ésta otra en la que decían todo lo contrario de lo que dicen hoy: les preocupaba entonces el "ritmo frenético" que el gobierno le imponía a la labor legislativa; y finalmente ésta, en la que -ahora sí en línea con lo que dicen hoy- vuelven sobre el remanido asunto de "la escribanía del Poder Ejecutivo".

Una auténtica estupidez, como si fuera racional que un gobierno que ha ganado en las urnas como lo hizo Cristina, debería adoptar en su política legislativa la agenda de la oposición, que perdió las elecciones por paliza; o que los legisladores oficialistas no voten los proyectos que impulsa el Ejecutivo: no hay Congreso o parlamento en el mundo que funcione del modo que lo plantea Clarín y las "ONG", como en éste caso Directorio Legislativo.

Invitamos a releer los post anteriores, para analizar que el taradismo conceptual de Clarín en estos asuntos es una constante, acelerado ahora por la inminencia del 7D.  

Pero vayamos a la nota de hoy, para advertir que Clarín parte de un preconcepto fundamental: todo proyecto que proponga el gobierno y sea sancionado porque cuenta con mayoría parlamentaria, será perverso, perseguirá un fin oculto o una intención aviesa o criminal; y por ende debe ser descalificado, o eliminado de la lista de temas "potables" a ser tratados por el Congreso.

Aunque se trate de recuperar el manejo de YPF para el Estado nacional (al parecer era mejor dejarla en manos de Repsol), poner al BCRA al servicio de la economía real (¿sería mejor dejárselo a los banqueros, y como financiador de la fuga de capitales?), conceder el voto a los jóvenes de 16 a 18 años (que significa ampliar derechos, sin garantía de como los ejercerán sus beneficiarios), transferirle al gobierno porteño los subtes (para terminar con una histórica distorsión en el manejo de los recursos del Estado) o regular los mercados de valores y de capitales, algo que hacen todos los países del mundo a los que ellos mismos consideran "serios".

Obsérvese que toma nota Clarín de que se pospuso para el año próximo la aprobación de la reforma de los Códigos Civil y de Comercio (a la que, para variar, tilda de "polémica") "por falta de acuerdos"; cuando antes cuestionó que el gobierno impulsara su propia agenda sin tener en cuenta ni a la oposición, ni a "la sociedad"; es decir, jamás habrá poronga que les venga bien.

Incluso al listar los proyectos referidos a temas de "interés social" presuntamente obstruidos por el oficialismo haciendo valer su mayoría, menciona la despenalización del aborto y del consumo de drogas: dos cuestiones que no avanzan, justamente, porque no hay consenso social al respecto; y porque las opiniones sobre ambos temas dividen transversalmente a todos los bloques legislativos, de modo tal que hay legisladores a favor y en contra de ambos proyectos, tanto en el oficialismo como en la oposición.

Y es muy curioso también que le peguen al kirchnerismo por no dar cabida en la agenda legislativa a los reclamos sociales, cuando por ejemplo fue el proceso político que consagró el matrimonio igualitario (recogiendo un reclamo social, pero ponderando el momento en que entendió que había consenso social al respecto); o la ley de medios, dándole respaldo político a la lucha de la Coalición por una Radiodifusión Democrática; esa misma ley que Clarín resiste con uñas y dientes, con total desprecio por esos sectores sociales que la impulsaron. Ni hablar de la trata de personas, que fue regulada como delito justamente en el primer gobierno de Cristina.

Otro tanto se puede decir de la boleta única: lejos de ser un reclamo social, es un planteo de ciertos sectores de la política (algunos ya arrepentidos del experimento, como le pasa al socialismo acá en Santa Fe) y de las mismas ONG que miran con lupa al Congreso, generosamente esponsoreadas por empresas y grupos económicos privados.

El kirchnerismo no la impulsará porque la propia Cristina dijo claramente que está en contra, y tiene todo su derecho a hacerlo, porque además no es cierto que evite el fraude electoral (ese fantasma que siempre agitan los que pierden elecciones, sin aportar jamás una prueba) y sí que destruye a los partidos políticos, privilegiando a los candidatos por encima de las fuerzas estructuradas; como pasó acá en Santa Fe con Miguel Del Sel; y termina afectando la gobernabilidad.

Siendo además que fue este mismo proceso político el que (sin contar con el apoyo de la mayoría de los opositores) sancionó en el 2009 una reforma política que estableció las PASO, modificó las reglas para el financiamiento de los partidos y sus campañas electorales, estableció la asignación igualitaria y gratuita de los espacios publicitarios y fijó requisitos más rigurosos para obtener y conservar la personería electoral; todas reformas mucho más importantes desde el punto de vista de la transparencia, la democratización y la equidad de los procesos electorales, que la boleta única.

Y hablando de derechos y temas puestos en el interés de la agenda social: ¿quién define los temas de interés social, el diario Clarín, Greenpeace, Poder Ciudadano?

Porque en éste mismo período legislativo (y según fue detallado acá) se aprobaron el nuevo régimen nacional del trabajo agrario, la ley de tierras, la muerte digna, la identidad de género, la ley de la música, el mecanismo institucional de prevención de la tortura y tuvo media sanción el régimen laboral del personal de casas de familia.

Hay en todos estos análisis sobre la labor del Congreso (además de muestras explícitas del estrambotismo mediático del que hablaba Cristina) una idea bastante pavota de como funciona la representación política en las sociedades modernas, muy propia de los 90'; y que consistiría en que la agenda pública es fijada desde fuera de la política y los partidos, por grupos o entidades presuntamente asépticos o incontaminados por las visiones ideológicas, pero que además no tienen que hacerse cargo de los problemas cotidianos de gestionar el Estado; como si eso no fuese también una responsabilidad primordial de la política.  

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Una dedcatoria especial para Magnetto, "Balada triste de trompeta" por Estela Raval o Rafael o alguno de sus verduleros.
Hoy es lunes 3D y el viernes 7D, como decimos los viejos "como se pasa el tiempo ya vienen las fiestas".
Sí estos 3 años se pasaron volando.

Anónimo dijo...

Micheli, que más parece el muñeco de Michelín, habla y dice que la soberbia de la señora presidenta hace tambalear la democracia y, además, que comparte el documento de los obispos.
Claro, ya que no encuentran atajos o fisuras por donde colarse, ahora salen a preocuparse por la democracia, cuestión por la que ellos se interesan solamente si se accede a todos sus aprietes.
Compañeros, el 8D nos habremos quedado sin oposición en la Argentina, sino buscan otro instrumento musical que calme aunque más no sea a las bestias dispersas.

Anónimo dijo...

LA VERDAD QUE ME LLAMA MUCHO LA ATENCION COMO QUIEREN LAVAR CEREBROS Y USTEDES MISMOS LO TIENEN LAVADOS. NO DAN MARGEN DE ERROR A OPINIONES DISTINTAS Y SE MANTIENEN COMO FANATICOS TAL CUAL FUERON TANTOS LOS GRUPOS QUE DESAPARECIERON POR NO VER MAS ALLA DE SUS PROPIAS NARICES.

La Corriente Kirchnerista de Santa Fe dijo...

¿Y vos por qué escribís todo en mayúsculas?, por curiosidad no más, por no mencionar que más de la mitad de las leyes sancionadas desde el 2003 para acá y de las que se mencionan en el post, tuvieron votos opositores a favor. De argumentar ni hablar ¿no?

Anónimo dijo...

Le llaman - lavar cerebros - a obtener la razón, la justicia y logros en
el campo social con argumentos. Y es lógico, están acostumbrados a destruir
cerebros. La noche de los bastones largos, la noche de los lapices, son ejemplos
de lo que les gusta hacer con los cerebros.
Seria interesante que alguna vez se pusieran a pensar en cuando obtuvieron
la aceptación de las mayorías sin que fuera a punta de fusil.

Saludos,