LA FRASE

"VOLVÍ PARA OFRECERLE AL PRESIDENTE MI COLABORACIÓN PARA RESOLVER EL PROBLEMA DE LOS CANDIDATOS QUE PROPUSO PARA LA CORTE." (FABIÁN RODRÍGUEZ SIMÓN)

sábado, 5 de enero de 2013

TODO, MENOS SORPRENDENTE


Nadie puede decir que se sorprendió por las decisiones de la Cámara alquilada por Clarín, ni siquiera la de habilitar la feria para el tratamiento de la causa de la ley de medios; de hecho en éste mismo blog se anticipó acá..

Al fin y al cabo, eso significa simplemente que los días hábiles que quedan de enero alcanzarán apenas para que ambas partes (el Estado y el Grupo Clarín) expresen sus argumentos en la apelación; y luego restará la etapa de prueba, el sorteo de la causa entre los camaristas para estudiarla, y otros 60 días hábiles como mínimo para fallar.

Y fue el apropiado telón de fondo (para cubrir a los tres impresentables camaristas: la esposa del abogado de Cablevisión que aparece en la foto, y los dos viajeros a Miami De Las Carreras y Guarinoni) para resolver lo que ahora les interesaba: la cautelar a favor de la Rural, para suspender el decreto de Cristina, y permitirles retener el predio de Palermo hasta que se les antoje.

Más de tres años (como Clarín para no desinvertir), o si quieren, hasta diez (como La Nación para no pagar impuestos); no importa, el mensaje es claro: acá no gobierna el gobierno, gobiernan los jueces, que son los que dicen que leyes se pueden sacar, o que decretos puede dictar la presidenta.

Sin importar si son o no competentes (claramente no lo son: se juzga la validez de un acto administrativo, lo cual es claramente competencia del fuero contencioso administrativo), y tomando en cuenta que las cautelares en esta etapa de cualquier juicio, son resueltas sin intervención de la parte contraria; en éste caso el Estado.

Luego se discutirá la competencia (cuando lo notifiquen finalmente), pero mientras tanto la cautelar seguirá vigente, el decreto no se aplica y los agrogarcas continuarán usufructuando lo mal habido.

Que para eso están jueces como éstos: para garantizar los negocios del verdadero poder.

Y después los cacerolos se indignan por Oyarbide (otro impresentable); y seguramente éstos jueces les parecerán el paradigma de la independencia.

Tan impresentables que dicen (como el viajero De Las Carreras) que dice que las resoluciones no existen porque no las notificó a las partes (no pudo dice, notificar al Estado la apertura de la feria por la causa de la ley de medios), pero las comenta ampliamente ante Clarín, que es una de las partes.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Cómo puede una cautelar frenar un DECRETO PRESIDENCIAL?