NUEVAS ESTRATEGIAS SINDICALES PARA DEFENDER A LOS TRABAJADORES

Se ve que todo éste asunto de la división de las centrales sindicales trae aparejados cambios en las formas de organización y protesta de los gremios, a los que habrá que irse acostumbrando.

Hace pocos días Moyano (que se autoatribuye ser el más genuino representante de los trabajadores argentinos) anunciaba el lanzamiento de un nuevo partido político, gestado (según dijo) por él porque es necesario que los trabajadores tengan de una buena vez, una fuerza política que los represente.

Raro, porque esa misma idea la tuvieron los partidos de izquierda, desde que empezaron a existir en la Argentina (claro que nunca la terminaron de poner en práctica del todo, por razones que sería largo enumerar acá, o a lo mejor no, pero son sabidas); y la terminó concretando el peronismo, hace ya casi 70 años.

Y el propio Moyano (que suele jactarse de tener el peronómetro patrón original, casi el que usaba el propio Perón) participaba de esa misma idea, pero ahora cambió parece: si el peronismo no lo conduce él, deja de representar a los trabajadores.

Algo parecido a lo que planteaba Vandor, con Perón vivo.

Pero volvamos a la noticia: el conflicto del sindicato de camioneros con Maxiconsumo (uno de los principales distribuidores mayoristas de todo el país, que abastece sobre todo a los supermercados chinos) no es por salarios, ni tampoco por despidos o en defensa de fuentes de trabajo.

Como la mayoría de los conflictos que los Moyano han promovido desde su gremio en los últimos años, es por encuadramiento sindical: quieren que alrededor de 1000 trabajadores de Maxiconsumo que trabajan en tareas de logística, pasen de ser empleados de comercio (del gremio que maneja hace décadas Cavallieri), a camioneros; algo que lograron hace unos años con algunos.

No podemos dejar de mencionar que el gremio que conducen los Moyano es una excepción en el modelo sindical argentino (ése, que gestó Perón hace décadas), porque agrupa a trabajadores por oficio (manejar algo que tenga ruedas), y no por actividad o rama de actividad económica.  

Probablemente muchos de los trabajadores de Maxiconsumo quieran lo mismo que Moyano, porque los camioneros ganan más que los empleados de comercio; pero acá el asunto es otro.

Y es que -como se señala en la nota- si el conflicto se generaliza a todo el país y se prolonga, afectará seriamente la cadena de comercialización provocando desabastecimiento (como el lock out patronal del campo en el 2008, ¿vieron?), y la eventual caída de los acuerdos de precios que el gobierno acaba de cerrar con algunas cadenas de supermercados.

En cualquier caso, lo único que haría sería alimentar más el proceso inflacionario, lo que afectaría -en primer término- a los trabajadores; el supuesto objeto de los desvelos de Moyano.

Que dijo hace poco que esos acuerdos de precios eran para limitar las paritarias o ponerle un cepo (obviando que lo mismo hizo Perón en 1952 y en 1974, sin ir más lejos, y apelando a un ejemplos históricos que le deben resultar gratos); así como también dijo que él para negociar aumentos, se basaba en la inflación de los changuitos y las góndolas, cosa lógica: todo el mundo lo hace, desde hace años, desde que se reactivaron las paritarias.

El problema es que con esta forma de protestas (por las razones que se dijeron: encuadramiento sindical) le está metiendo presión a las góndolas y los changuitos, en lugar de pelear por mejores salarios para los trabajadores, o medidas que atenúen el impacto de la inflación.

A lo mejor somos nosotros que somos duros de entendederas y no alcanzamos a comprender estos nuevos (y revolucionarios) métodos de lucha en defensa de los trabajadores (de todos, no sólo de los afiliados a Camioneros: Moyano dijo hace poco que no descartaba ser candidato a presidente, suponemos que sabrá que no le alcanza para eso con el voto de los que manejan camiones); a menos que estas sean nuevas formas de hacer campaña de su recién lanzado partido; con el que aspira a representarlos.

El problema es que son demasiado parecidas (al menos en sus efectos, eventualmente en sus propósitos) a las de otra gente que ni siquiera se plantea defender a los trabajadores; como los agrogarcas que amenazan con sentarse arriba de los silos-bolsa por tiempo indeterminado.    

Debe ser por eso que acá dicen de la Rural que si Moyano y Michelli arman otro paro, se prenden en la movida.