EL NEGOCIO DE DENUNCIAR

Después de pasar apenas unas horas detenidos, quedaron en libertad el hijo de Aldo Ducler (el "financista de los k" del que hablaban los medios) y sus dos abogados, uno de ellos el conocido Alejandro Sánchez Kalbermatten; mientras se les sigue la causa por extorsión en perjuicio de los Eskenazy.

Primera curiosidad: no les aplicaron la "doctrina Irurzun", porque al parecer el juez entendió que estando libres no pueden entorpecer la causa.

Según cuenta acá Tuny Kolmann en Página 12, la maniobra consistió en pedirles plata a los Eskenazy a cambio de no denunciarlos por presuntas maniobras fraudulentas que los involucraban junto con Néstor Kirchner en la compra de acciones de YPF que hicieron en su momento.

Segunda curiosidad: exactamente lo mismo que hizo en su momento Carlos Pagni en aquel famoso video, o sea pedirles plata a los Eskenazy a cambio de callar determinadas cuestiones vinculadas a su gestión en YPF. Pagni -aclaramos por las dudas- sigue libre, y nunca tuvo inconveniente alguno pese a la prueba colectada en su contra: debe ser el fuero periodístico.

Juan Manuel Ducler es el hijo del financista que falleció en la vía pública poco después de haber ido a la Unidad de Información Financiera (UIF) a ofrecer aportar documentación presuntamente comprometedora para los Kirhcner...a cambio de dinero. Es de familia se ve el oficio.

Ducler hijo insistió -y los medios hegemónicos le dieron espacio generoso para ello- en que la muerte de su padre no había sido natural, pese a que estaba filmado por una cámara de seguridad el momento en el que le da un infarto en plena calle, y la autopsia fue contundente al respuesto. 

Su abogado, Sánchez Kalbermatten, es más conocido aun: si googlean su nombre con el agregado de la palabra "denuncia", obtendrán una infinidad de resultados, vinculados a todas las presentaciones judiciales del muchacho contra el kirchnerismo y sus funcionarios y dirigentes; arte en el que descuella junto a otras figuras como Santiago Dupuy De Lome.

Entre sus denuncias más relevantes, se cuenta la que hizo contra Boudou por la causa Ciccone; pero además fue el que se encargó de sembrar una pista falsa con un testimonio trucho en la investigación por la desaparición de Jorge Julio López, y más recientemente fue el abogado de Mariano Martínez Rojas en las causas que se le siguen en su contra. 

Sí, el mismo Martínez Rojas que mandó la patota a golpear a los trabajadores de Tiempo Argentino, y que por estas horas es la estrella principal de otro video en el que cuenta plata, que por supuesto los medios ya se la endilgaron al kirchnerismo.

El "denunciante serial" junto con el "arrepentido clave" (como Fariña, Pérez Corradi o los Lanatta) son piezas claves en el entramado mafioso que reconoce como terminales los medios del Grupo Clarín, los despachos judiciales de Comodoro Py y -ahora- el gobierno, a través de la Unidad de Información Financiera (UIF), la Oficina Anticorrupción (Kirchnerista) y en ocasiones, el Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich.

Merecen mencionarse en esta pintura de un sistema a la abogada que trabajaba en la IGJ (Inspección General de Justicia) y traficaba información para sustento de las denuincias de Margarita Stolbizer, la "task force" armada dentro de la AFIP para llevarles data a la propia Stolbizer y Carrió para armar más denuncias, y la abogada de la Procuración que tras declarar en contra de Alejandra Gils Carbó en la causa armada en su contra por la compra de un inmueble para forzarla a renunciar, acaba de aterrizar en la Cámara de Diputados como asesora de la propia Carrió. 

Hay más ejemplos, como "el diariero de Nisman", que es empleado del Ministerio de Modernización, designado por éste gobierno.

Un sistema más corrupto -mucho más- que la propia corrupción que dice denunciar y combatir, y que no es de extrañar que apele a este tipo de personajes acostumbrados a moverse en ambos márgenes de la ley (con más frecuencia, del de afuera que del de adentro), o simplemente lúmpenes que se prestan a cualquier cosa, por una recompensa conveniente.

Este es el verdadero material con el que se amasa el bizzaro "mani pulitte" criollo que mantiene embelesados a los cerebros lisos, pegados como moscas a la pantalla de TN o Canal 13, o atrapados leyendo los folletines policiales de ocasión en Clarín o La Nación. No hay mucho más, y ninguna persona de bien realmente preocupada por la corrupción en el país se prestaría a ser parte de tal mercado de pulgas.

Como ésto es todo lo que tienen y con esto trabajan, no es de extrañar que deban apelar a los Bonadíos para que inventen traiciones a la patria, y judicialicen medidas de política exterior como el memorándum con Irán, o de política económica como los contratos de dólar futuro.

Pero si se los raspa un poco, detrás de estos "ciudadanos preocupados por la corrupción" aparece lo que son: una manga de langostas depredadoras, dispuestas a todo por el precio adecuado.