LA FRASE

"LE DIJE AL PRESIDENTE MILEI QUE ESTOY MUY INTERESADO EN INVERTIR EN SU PAÍS, ESPECÍFICAMENTE CONTRATANDO A LOS CIENTÍFICOS DEL CONICET, ARSAT Y EL PLAN NUCLEAR QUE SU GOBIERNO ESTÁ DESPIDIENDO." (ELON MUSK)

miércoles, 25 de mayo de 2011

PAGNI, EL HOMBRE QUE NUNCA FESTEJA


Por Sandra Viñas
El lunes a la mañana, luego de una largo y lento escrutinio consecuencia del nuevo modo de votar que tenemos los santafesinos, repasé los titulares de los diarios de publicación nacional y me encuentro con un nuevo desparpajo y audacia de Carlos Pagni y su análisis titulado: Cristina, con poco para festejar.
Este artículo lamentable, por su contenido (y baja calidad en la escritura) es la fiel manifestación de como este grupo, como el del “Gran Diario Argentino”, persiste y trabaja de modo continuo atento  y en miras a vulnerar y socavar  una gestión, una forma de construcción política y un proyecto  iniciados por Néstor Kirchner y cuya continuidad está garantizada por Cristina.
Lo mismo sucede cuando uno acude a otros medios de comunicación masiva: si encendés la TV parece que en Argentina está todo mal y obviamente esto se debe única y exclusivamente a las acciones del Gobierno Nacional. Estas “malas noticias” tienen una iteración cada 30 minutos. Particularmente se ponen al aire cuando los grupos concentrados multimediaticos se refieren a situaciones que no pueden ocultar o negar dado que si lo hicieran, sus consecuencias serían altamente negativas: perder todo tipo de credibilidad (más aún de la que han perdido). Traigo a colación algunos autores que  reflexionaron sobre estas prácticas, como Pierre Bourdieu[i] (1991) o Luis Althusser (1988) planteando que las creencias sociales y colectivas se concretan y representan en la práctica cotidiana de los individuos, por lo que los hechos “manifiestos y evidentes” no pueden ser ocultados. Si esto sucediera el riesgo es perder todo tipo de credibilidad social.
En este escenario los monopólicos medios de comunicación tienen diversas estrategias y acciones. Una de ellas y desplegada de manera reiterada, por exitosa, es la que nos muestra, con un nivel de improvisación y morbosidad inusitadas, hechos trágicos como los sufridos en otras partes del planeta (catástrofes naturales, accidentes aéreos, etc). Esta acción comunicacional se refiere muchas veces, a hechos que de ningún modo los afecta en términos de riesgo económico y político. Por el contrario, no difundirlas sería un grave error y los afectaría de modo negativo .
Ahora bien, si un hecho los afecta en términos económicos, la subestimación y relativización de la noticia y la reducción a la mínima expresión y visibilidad, sería la forma de presentar a la situación-noticia, La distorsión o el invento sobre los hechos serán la consecuencia de este procedimiento. Estamos claramente frente a una compleja lógica de manipulación ideológica, que pueden encuadrarse en las siguientes categorías:
·       Construcción ficcional de la realidad, cuya impunidad se mantiene en el tiempo o es rebatida con posterioridad por otros medios de comunicación. El inconveniente es que muchas veces no se llega a rebatir a tiempo.

·       Interpretación errónea de los hechos llevada a cabo por los mass media bajo diversas estrategias comunicacionales, modificando la percepción de la realidad para dirigir sus resultados en beneficio de sus propios intereses. Esto es palpable cuando observamos titulares, copetes o zócalos que citan solo una parte de una frase o discurso para luego darle a través del comentarista o “analista” una interpretación resinificada del original. Otra modalidad es la negación de los hechos temiendo graves consecuencias económicas para el grupo. La utilización del énfasis en “negrita”, sobre lo que consideran importante es un modo regular de emitir un mensaje a consumidores culturales de tiempo escaso para la lectura completa de un texto. La selectividad del mensaje direcciona y alimenta la lectura selectiva.
·       Restricción en el uso de la palabra a quienes ponen en riesgo su existencia y modos de producción de la información. Esta estrategia tiene la intención de eliminar la posibilidad del poder de construcción de subjetividad o juicio personal e individual por parte de los ciudadanos. Esta limitación al uso del derecho de expresión, consagrado por nuestra Constitución Nacional, es el mejor refugio que tienen estas empresas que dicen defenderse de las embestidas del gobierno. Su defensa frente a los “ataques” y su victimización es la forma adoptada cuyo mejor maquillaje está encarnado en la frase periodismo independiente, profesional y desinteresado.

Para ir cerrando entiendo que,  el titular que provocó estas palabras no es más que uno de los tantos ejemplos con los que nos encontramos cuyas pretensiones fueron planteadas en el inicio del texto. No podemos dejar pasar inadvertidas maniobras que menoscaban nuestros derechos como ciudadanos libres de escuchar voces y miradas diferentes y plurales. Es necesario que ejerzamos nuestra capacidad crítica frente a una realidad que se construye bajo una visión hegemónica.
La unidireccionalidad del relato convincente de nuestros días es un juego macabro que intenta construir la realidad social,  funcional a sus intereses económicos y corporativos.
Siguiendo a Follari[ii] en la construcción del concepto Partidos Mediáticos, la Nación  “… asume la defensa del libre mercado, pero no en la versión bizarra del menemismo y sus estelas de corrupción, sino en una más límpida y pura: la de López Murphy, candidato neoliberal por excelencia sin mezcla de peronismo, y hombre formado en la Escuela de Chicago. Sin embargo, se trata de un diario tradicional que intenta mostrar seriedad y una supuesta neutralidad: eso ayuda a que sus posiciones sean a menudo atenuadas y matizadas, y que se dé lugar a todas las posiciones ideológicas, aun cuando con peso diferencial entre sí….”. En cuanto a Clarín “…pretende también una objetividad al estilo de la que propone La Nación, aunque de estilo más aggiornado.”


Esta breve crítica al funcionamiento de los medios oligopolicos, ha puesto de relieve que, los bloques hegemónicos comunicacionales, lejos de mediar e  informar, ejercen funciones políticas de modo continuo y permanente velando por sus intereses corporativos a partir de diferentes estrategias comunicativas y discursivas. Una lógica perversa que se aprovecha de los más vulnerables o al menos eso es lo que intenta. De todos nosotros depende.


[i] BOURDIEU, Pierre (1991). El sentido práctico, Taurus, Madrid.
[ii] El autor el profesor-investigador en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Univ. Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina), y profesor de posgrado en diversos países latinoamericanos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

che, esta compañera es peronista? Sandra viñas, digo. Escribe tan bien y tan difícil que para mí es parienta de los viñas gorilas que pasaron a los brazos del señor. El Bourdier que yo conocí jugaba de 8 en paraguay y tuvo un paso efímero por unión. y en cuanto a profesores cuyanos... solo conocí a Pozo, que da cátedra bajo los tres palos. bajen el nivel así los peronistas podemo leer, podemo

Anónimo dijo...

Anónimo, no caigas en los estereotipos, que para ser peronista no es necesario escribir mal. Los peronistas pueden escribir, pueden

Anónimo dijo...

Vale seguir el esfuerzo actual de instalar la figura de Binner, caídos loas otros candidatos intentados. Binner que recala en la Fundación Observatorio Pyme de Techint, a la que subsidia para un trabajo de campo en la provincia que puede obtener gratis de las estructuras del giobierno nacional, con más de pesos un millón en un poco más de un año, y a cambio de la tribuna en la fiesta anual y prensa en los medios aliados de la multinacional, reúne por su acción y procedencia, los caracteres de político confiable y acuerdista con el poder instalado, por lo que hoy se lo presenta como el prohombre capaz -y al que quieren embalar- para enfrentar a Cristina.... Será???