A ver si algún lector atento encuentra alguna diferencia entre el editorial de hoy de La Nación (completo acá) y esta columna del amigo Rogelio en el diario del Loco Lindo de ayer; en la que -entre otras lindezas- leemos: "los mandatarios que en estos días lleguen a La Habana descubrirán una ciudad ordenada, limpia, sin mendigos, proxenetas ni lúmpenes avergonzando la vía pública con su desagradable presencia. Tampoco se observarán pintadas políticas opositoras en las paredes y, mucho menos, opositores manifestando en la vía pública. Quienes viajen en auto lo harán con la tranquilidad de saber que ningún piquete interrumpirá su recorrido. Y los que se alojen en los lujosos hoteles habilitados por la revolución dispondrán de la comodidad de saber que nunca jamás una huelga o algo parecido perturbará su estadía.
Una maravilla. Una maravilla de la dictadura revolucionaria que si de algo sabe es de orden y disciplina. Una maravilla el empeño en los últimos días de los funcionarios cubanos para garantizar que el paisaje esté a la altura de los solemnes objetivos revolucionarios. Según Yoani Sánchez, la bloguera instalada como un forúnculo en la isla de la felicidad, funcionarios de la policía política, alcahuetes debidamente instruidos, matones y provocadores a sueldo, esbirros de cachiporra pesada y pistolas de gatillo fácil, se encargaron de visitar las casas de los opositores para advertirles con sus encantadores modales y su aleccionadora pedagogía, que si apreciaban su libertad y su salud lo mejor que podían hacer era no dejarse ver por la calle.
Mientras la policía política realizaba esta civilizadora faena, la policía de todos los días se ocupaba en trasladar mendigos, rufianes, prostitutas, pungas y lúmpenes de todo pelaje a lugares más discretos y ocultos. ¿Como hacía el general Bussi en Tucumán? Exactamente, como hacía Bussi en Tucumán. Con una diferencia. Bussi, por lo menos, tenía la delicadeza de no justificar sus trapisondas en nombre del hombre nuevo y la felicidad de los pueblos.
Nuestra Señora se adelantó tres días a la reunión. ¡Cómo perderse ese paraíso de orden, limpieza y autoridad! ¡Cómo no envidiar a los Castro! Allí los opositores no fastidian, los diarios no hablan y los partidos políticos no existen. ¡Así da gusto gobernar!, habrá pensado nuestra señora, mientras se acicalaba con algunos de sus modestos y austeros vestuarios para lucir jubilosa en la entrevista con el señor Fidel Castro.
La señora está alojada en uno de los hoteles emblemáticos de La Habana -dicho sea de paso, uno de los más caros en una ciudad donde la hotelería es cara- y disfruta de garantías y privilegios que la inmensa mayoría de los cubanos no tienen. En su estadía en La Habana, la señora dispone de un cordón de seguridad -que es lo que mejor saben hacer los Castro- dispuesto por el régimen cubano para que no la moleste nadie ni, mucho menos, los periodistas ¡Qué felicidad!." (las negritas son nuestras) .
¿Difícil, no?
Pero les vamos a dar una ayudita: la pista la da el propio Rogelio cuando cuenta que en La Habana la hotelería es cara.
Lo sabe por experiencia propia porque en su momento no le alcanzaba para pagarse el hotel allá; y se lo pagamos entre todos (ver acá más datos); cosa que -hasta donde sabemos- no habría sucedido con el editorialista fantasma de La Nación.
La otra diferencia es que a La Nación no se le ocurrió (por lo menos en el editorial de hoy) elogiar a Bussi.
3 comentarios:
Viaje oficial 2004.Con plata ajena.
Pero hay otro viaje del chimpancé Alaniz también con plata ajena y ocupando el lugar de otro (ese otro era un estudiante real, no como Alaniz,que era solo un baboso hombre grande merodeador del bar).
U.N.L., año 1984. Brigadas del café. Nicaragua.Cuando decía ser sandinista.
También tuvo etapas de PC, Partido Intransigente, UCR, siempre intentando conseguir alguna ventaja (económica) personal y exhibiendo un solo aspecto de coherencia: ser un reaccionario irracional.
Hoy, fundamentalista ortodoxo liberal, filo católico.Donde terminan todos los extraviados.
A su vejez, escribe por un sueldito lo que le dictan sus patrones revolucionarios, dueños de El Litoral.
Don Rogelio, un simio ejemplo de vida.
El Colo.
Macri se presentó en concurso preventivo neuronal.
ja! y yo que pensaba que estaban hablando de USA, la verdad que lo que dicen de Cuba mucho no desentona con lo que pasa con los yanquis, solo que ellos son "democráticos"(jaja).
Anda a protestar en USA, habla mal del gobierno y te escuchan, te espían los mails, sociedad sometida bajo el miedo de un ataque terrorista facilitando su seguimiento por la NSA y el FBI, ciudades enteras construidas gracias a los traficantes de drogas y armas. Prostitución, drogas, armas, mafias, exclusivos lugares para los ricos y para los pobres.
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