En la línea de "anunciamos que vamos a hacer algo como si ya lo hubiéramos hecho" (ya utilizada en el caso de salud), leemos en el diario del Loco Lindo que el gobierno provincial planea terminar para fin de año las obras del desagüe Llerena; que servirá para mejorar sustancialmente el escurrimiento del agua de lluvia y aliviar así los problemas de anegamiento de muchos barrios de Santa Fe.
Según cuentan, además de "proyectar la terminación" de la obra para fin de éste año, la provincia "invierte" (así en presente) en ella 51 millones de pesos.
Si la información es cierta, entonces lo que miente es la ley de presupuesto 2015 que acaba de promulgar Bonfatti, que dice otra cosa como podemos ver acá:
Según el presupuesto la obra no cuesta 51 millones (como dice el artículo) sino 39, y hasta la fecha sólo se habrían invertido 3 millones de pesos.
Y también según el presupuesto, no se terminaría para fin de éste año, sino que quedarían 6 millones de pesos a invertir en el 2016.
Recordemos que ésta obra fue licitada en mayo del 2013, y la más barata de las ofertas presentadas estaba un 66,30 % por encima del presupuesto oficial (ver acá).
Y recordemos también que para adjudicarla, la provincia "negoció" -al margen de lo que dice la ley de obras públicas- con la empresa de la oferta más barata (lo de más barata es un decir) para finalmente adjudicársela "apenas" un 40 % por encima del presupuesto oficial (ver acá).
¿Será que ahora el "salto" de los 39 millones de pesos que dice el presupuesto provincial que cuesta la obra a los 51 que dice el artículo que en realidad terminará costando es porque no hubo tal negociación "por la rebaja", y finalmente se adjudicó en la segunda cifra una obra originariamente valuada en 22 millones de pesos?
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