En el sitio web del gobierno provincial (ver acá) está disponible la información de lo gastado en publicidad oficial año por año, desde el 2012 y hasta el 2017 inclusive; discriminado por gráfica, radio, TV, Internet y vía pública; así como también por medio y por organismo oficial que pautó.
De acuerdo con esa información, el año pasado el gobierno de Lifschitz habría gastado un total de $ 360.418.064,03, lo que supondría un aumento del 67,86 % respecto a lo gastado en el rubro en el 2016, que no fue un año electoral.
Sin embargo, esa cifra representaría solo el 49,54 % de los $ 727.448.000 que preveía el presupuesto del 2017 para publicidad oficial; resultado que solo es posible porque analizando la discriminación de la pauta por organismos (ver acá) se advierte que no está lo gastado en ese rubro por la Caja de Asistencia Social (Lotería de Santa Fe), que tenía asignados a esos fines $ 362.560.000; o sea más que todo el resto de los organismos juntos.
Si advertimos que en el conjunto de los organismos cuyos gastos en publicidad sí se informan el porcentaje de ejecución de las partidas en concepto de "publicidad oficial" del presupuesto fue del 98,77 %, y lo proyectamos a las de la Lotería, tendremos que el gasto real en pauta del gobierno de Lifschitz el año pasado debe haber andado por los $ 718.500.000, más o menos.
El gasto en publicidad oficial de la Caja de Asistencia Social (Lotería de Santa Fe) tampoco se informa para los años 2012 a 2016 ambos inclusive; pero se lo puede sacar de la misma página web del gobierno provincial, en la parte en la que se encuentran las respectivas Cuentas de Inversión de cada año (la del 2016 es la última disponible).
De ese modo pudimos determinar que lo gastado en publicidad oficial por la Lotería en el 2016 fue $ 298.213.936,88, contra los $ 214.716.886,88 informados para el resto del organismo, lo que supone que en ese año la provincia gastó en total $ 512.930.823,76, y de ese total, el 58,14 % correspondió a la Caja de Asistencia Social; o lo que es lo mismo: no se informa más de la mitad del gasto en publicidad del gobierno provincial, en el apartado en el que se dice dar información pública sobre ese rubro de gastos en particular.
Con el mismo método de análisis, pudimos establecer que en el año 2015 la Lotería representó el 47,62 % del gasto del gobierno provincial en publicidad oficial ($ $ 210.000.826,2 sobre un total de $ 440.952.201,19) sin que fuera informado; y en el 2014 el 57,83 % ($ 157.541.731,27 sobre un total de $ 272.417.415,80), pero tampoco figura en el informe respectivo.
Siempre siguiendo el mismo método, tenemos que en el año 2013 la Lotería representó el 46,32 % del gasto en publicidad del gobierno de la provincia ($ 92.940.264,19 sobre $ 200.648.129,91); y finalmente para el 2012, Lotería representó el 52,41 % del gasto en publicidad oficial ($ 60.677.379,34 sobre un total de $ 115.750.774,58). En ambos casos, no aparece registrado en el informe sobre el gasto en publicidad.
Para que se vea que el método es correcto y existe una tendencia (que es que la Lotería representa la mitad o más del gasto del gobierno provincial en publicidad oficial), en el presupuesto de éste año hay asignados $ 908.504.000 a gastar en pauta oficial en los medios, de los cuáles $ 462.580.000 corresponden a la Caja de Asistencia Social (Lotería): el 50,91 %.
Y hay otras dos tendencias constantes sostenidas en todo el período analizado (2012-2016, y 2017 con Lotería proyectado porque no está disponible aun la Cuenta de Inversión del año pasado), a saber:
* La participación porcentual de la Lotería en el gasto total en publicidad oficial del gobierno provincial cae en años electorales (2013, 2015, 2017) y sube en los que no lo son (2012, 2014, 2016).
* El incremento del gasto en publicidad del resto de los organismos (excluida la Lotería) en años electorales crece mucho más que en los que no lo son, respecto del año inmediato anterior: así subió un 95,57 % en el 2013 respecto al 2012, un 101,04 % en el 2015 respecto del 2014 y el ya informado 67,86 % del 2017 respecto al 2016.
La explicación de ambas tendencias es muy sencilla: si bien siempre la publicidad oficial es una forma de "comprar" opiniones favorables en los medios más allá de su contenido, en los años electorales crecen las campaña de lisa y llana propaganda, tendiente a mostrar la obra de gobierno para captar votos; y eso no se puede hacer a través de los avisos de la Lotería, que solo puede publicitar sus juegos, o a lo sumo los destinos sociales de sus utilidades.
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