OTRA VEZ LA BURRA AL TRIGO, ....

...o el socialismo a endeudarse.

Las impactantes cifras del nuevo endeudamiento contraído en poco más de un año por el gobierno nacional oscurece ver que por el mismo camino transitan las provincias, e incluso algunos municipios.

Dentro de estos últimos el caso de Rosario (administrada por el socialismo hace 27 años) es paradigmático, tanto que -como lo muestra la imagen de apertura- la gestión municipal de la intendenta Fein piensa insistir ante el Concejo con el pedido de autorización para endeudarse en 200 millones de dólares; con bonos a emitirse con prórroga de jurisdicción incluida.

Casi la mitad de ese endeudamiento (al menos en el proyecto original) está destinado no a inversiones en infraestructura o el mejoramiento de los servicios, sino para cancelar otras deudas contraídas con anterioridad (tanto deuda flotante con proveedores y contratistas, como servicios de otros préstamos anteriores), y para capitalizar el siempre alicaído Banco Municipal; y que no quede fuera de las regulaciones técnicas del Banco Municipal.

En reiteradas oportunidad hemos señalado acá que en el anterior festival nacional de endeudamiento nacional (allá por la década de los 90’, durante el menemato) el socialismo se sumó gustoso a la movida, contrayendo numerosos préstamos endulzado por el “uno a uno” de la convertibilidad; hasta que todo explotó por los aires durante el gobierno de la Alianza.

En ésta entrada contábamos el caso de los préstamos destinados al programa de “Grandes Aglomerados Urbanos del Interior” autorizados en la provincia por la Ley 11.625 (1998), y captados mayoritariamente por los municipios del Gran Rosario.

Como los préstamos se contrajeron con el Banco Mundial actuando la nación como prestataria y la provincia de Santa Fe como subprestataria, al vencimiento de cada una de las cuotas de compromiso, de intereses o de amortización del capital, pagaran o no los municipios (entre ellos Rosario) funcionaba el mecanismo de garantía, que consiste en la afectación de los ingresos por coparticipación federal al pago de los servicios de la deuda.

La nación pagaba y le descontaba a Santa Fe de sus recursos coparticipables, por deudas contraídas por distintas municipalidades; y luego la provincia les descontaba a éstas de sus ingresos por la misma vía lo que había pagado, claro que “financiado”

Así pasó ya durante el gobierno de Obeid a través de los Decretos 155 y 2739 del 2007, descontando en 3 cuotas los vencimientos que la provincia había pagado de una sola vez.

Llegado al gobierno el Frete Progresista Cívico y Social, en el 2008 las municipalidades que habían pedido los préstamos defoltearon la deuda y dejaron de pagarla, pero la nación hizo efectiva la garantía y le descontó los pagos a la provincia de Santa Fe.

A partir del 2009 y durante todos los gobiernos de Binner y Bonfatti y lo que va del de Lifschitz, la provincia siguió actuando como “financiera” de los municipios que pidieron los préstamos pagando “cash” los vencimientos; y recuperando lo pagado en cuotas, pero ahora ya no en  -como dispuso Obeid- sino en 6.

Así pasó en los años 2009 (Decretos 27 y 1745), 2010 (Decreto 1536), 2012 (Decreto 936), 2013 (Decreto 3966), 2014 (Decretos 1366 y 4614), 2015 (Decreto 1571) y el año pasado (Decretos 1276 y 2472).

Demás está decir que cada vez que la provincia les descuenta en seis cuotas los pagos que tuvo que hacer en uno (o que le descontaron de su coparticipación) esos pagos se hacen en pesos, corriendo por cuenta del Estado nacional conseguir los dólares para cancelar en esa moneda los vencimientos originales, en éste caso ante el Banco Mundial.

¿Pasará lo mismo con estos 200 millones de dólares que pide Fein, si le autorizan el endeudamiento?

Faltó aclarar un pequeño detalle: el 99,14 % de la deuda externa contraída por el programa "Grandes Aglomerados Urbanos del Interior" en la provincia corresponde a la municipalidad de Rosario.