EL PRESUPUESTO DE LA ANSES Y LA PLATA DE LOS JUBILADOS

Fuimos el otro día a la charla organizada por el amigo Diego Rubinzal y la gente del CEDEBH sobre la seguridad social, y volvimos con los puños llenos de verdades como quien dice; en especial sobre zonceras tan habituales por acá como "la plata de los jubilados" y el 82 % móvil.

Y con un renovado interés por aportar elementos para la discusión de un tema en el cual (al igual que la deuda externa) el kirchnerismo tiene mucho para mostrar por lo hecho en éstos años; y tiene que soportar la sanata de los que parecen tener todas las soluciones, aunque cuando fueron gobierno no hicieron un carajo.

Decíamos nosotros acá y acá que, en el marco de la discusión del Presupuesto 2014, volvió la discusión por el 15 % de la coparticipación que se destina a financiar el sistema nacional de seguridad social.

Según el argumento habitual de la oposición, las provincias cedieron esos fondos cuando el sistema de seguridad social tenía déficit porque estaban las AFJP; y por ende ahora que habían desaparecido y la ANSES tiene superávit, ese aporte ya no tendría razón de ser.

Hemos dicho muchas veces que ambas cosas son inexactas: el sistema previsional era deficitario aun antes de crearse las AFJP (que en todo caso lo que hicieron fue agravarlo), y si a la ANSES la privaran de esos fondos, tendría déficit.

Y para comprobarlo nos fuimos al Presupuesto nacional 2014 que se acaba de aprobar en el Congreso, en la parte correspondiente a la ANSES que pueden ver en éste cuadro: 

Ahí se ve clarito que la parte de los impuestos coparticipables que se destina a la ANSES son 94.982 millones de pesos (un 26,17 % de los recursos del organismo), mientras que el superávit previsto es de 26.537.

Lo que implica -en números redondos- que si se dejaran de afectar a la ANSES ese 15 % de la masa coparticipable, pasaría de inmediato a tener un déficit anual de 68.445 millones de pesos.

Incluso suponiendo que sólo se desafectara de ese 15 % la parte que corresponde a las provincias (recordemos que también la nación pone la suya), la cosa no cambiaría: serían unos 53.829 millones menos, y el déficit de la ANSES seguiría siendo de 27.292 millones de pesos.

Otra de las muletillas habituales es quejarse porque "usan la plata de los jubilados para cualquier cosa", poniendo como ejemplos el programa PROCREAR, la tarjeta Argenta, el "Fútbol Para Todos" y las computadoras de Conectar Igualdad.

Lo cual nos lleva a ver el siguiente cuadro del Presupuesto nacional 2014, que muestra los programas cuya ejecución tiene a su cargo la ANSES:

Como vemos, no figura "Fútbol Para Todos", sencillamente porque nunca se pagó con los fondos de la ANSES, vulgarmente llamados "la plata de los jubilados".

Como tampoco figuran ni el plan PROCREAR, ni la tarjeta Argenta por otra razón muy sencilla: esos programas se atienden con los recursos del Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS); o sea con los activos que fueron traspasados al Estado cuando se liquidaron las AFJP, y no con los recursos corrientes de la ANSES, con los que se pagan mes a mes jubilaciones, pensiones y asignaciones familiares.

Y el Fondo -por esa razón- no figura en el presupuesto de la ANSES, ni en el presupuesto nacional de cada año. 

Lo que sí figura porque se atiende con los recursos de la ANSES es el programa "Conectar Igualdad", pero en el segundo cuadro vemos que representa apenas el 0,53 % del gasto total del organismo, para distribuir durante el año que viene 524.408 computadoras entre todas las escuelas secundarias públicas del país.

Si la ANSES no sostuviera con sus recursos "Conectar Igualdad" (tal lo que plantean algunos) esos fondos apenas alcanzarían para pagarles $ 27,85 más por mes a cada uno de los 5.685.403 jubilados y pensionados nacionales, sin contar las pensiones de los ex combatientes de Malvinas que también paga el organismo.

Si en cambio se privara a la ANSES de los fondos que provienen del 15 % de la masa de impuestos coparticipables (además de que la ANSES tendría un déficit importante) los aumentos semestrales que reciben esos mismos jubilados y pensionados serían mucho menores, de acuerdo a lo que establece la fórmula de la ley de movilidad, según se explicó acá.