Este jueves se cumplen los dos años del lanzamiento del programa PROCREAR, a través del DNU 902/12 de Cristina (ver acá).
Y a dos años de lanzado, leemos en Diario Registrado algunas cifras sobre su impacto:
* 113.327 viviendas en marcha, de las cuales 79.333 corresponden a líneas tradicionales de crédito hipotecario y 33.994 a desarrollos urbanísticos.
* Los montos de inversión para líneas de crédito individuales ascienden hasta el momento a 21.075 millones de pesos, a los que hay que sumarles un monto comprometido por otros 20.010 millones de pesos para los 104 desarrollos urbanísticos a lo largo de todo el país.
* Por cada casa que se construye a través de Procrear, se generan más de tres puestos de trabajo directos y 675 puestos indirectos cada 1.000 viviendas, lo que representa aproximadamente 184.311 puestos de trabajo directos y más de 39.621 puestos en forma indirecta.
En tiempos en los que se habla de fin de ciclo, y no terminamos de tener en claro que harían muchos que se peinan para la foto para llegar a gobernar el país en el 2015, el PROCREAR no es cuestionado en público casi por nadie; aunque a menudo se critica el uso que hace el gobierno de la mal llamada "plata de los jubilados"; es decir los recursos del Fondo de Garantía de Sustenabilidad de la ANSES, compuesto por los activos transferidoas a la disolución de las AFJP.
Claro que el hecho de que no lo critiquen, no significa que lo hayan apoyado desde el principio, o no lo vayan a discontinuar si llegaran al gobierno.
Recordemos que existieron quienes se opusieron a la liquidación de las AFJP (la medida que posibilitaría -entre otras cosas- lanzar el PROCREAR), y aun entre quienes la apoyaron, votaron en contra el artículo 8 de la Ley 26.425 que disponía utilizar los fondos "de acuerdo a criterios de seguridad y rentabilidad adecuados, contribuyendo al desarrollo sustentable de la economía real a efectos de garantizar el círculo virtuoso entre crecimiento económico y el incremento de los recursos de la seguridad social.": acá pueden ver la lista completa.
Pero supongamos que alguno pueda decir que se opuso entonces porque no se imaginaban que esos recursos se iban a utilizar en el futuro para lanzar el programa de créditos para vivienda más ambicioso de los últimos 60 años.
El problema es que cuando se discutió en el Congreso la ratificación del DNU que lo creó (es decir con el PROCREAR ya lanzado, y con sus primeros efectos a la vista), tampoco lo respaldaron: ver acá la lista completa de los "ausentes".
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