Ahora parece que tenemos un nuevo estandarte moral de la República: el Moyanito que maneja (por pedido del padre, que dijo anoche que es él el que le da letra, y no se metan con el nene) el sindicato de camioneros.
Ya bastante jodida está la cosa como para tener que aguantar este tipo de pelotudeces, y si hay alguna chance de que el quilombo se solucione, exige que empecemos a hablar en serio.
Ni vale la pena mencionar que la anterior amenaza de un paro general de los Moyano fue por el exhorto suizo en la causa Covelia.
Guarda: ni siquiera estamos diciendo que pasó verdaderamente ahí, apuntamos que hasta acá, cuando se hablaba de corrupción en los mismos medios que ahora los miman tanto, los Moyano estaban del lado adonde apuntaba el dedo, y no eran el dedo.
Tampoco diremos que de las gestiones de Jaime y Schiavi en Transporte saben más ellos que nosotros, porque el Subsecretario de Transporte Automotor era -desde el 2003 y hasta hace un mes- un tipo puesto por papá Moyano.
Guardemos los carpetazos y las chicanas, y pasemos a los argumentos; porque los carpetazos y las chicanas que se pueden revolear en éste asunto los conocemos todos, y desde mucho antes.
No alimentemos más el prejuicio anti sindical de la clase media, ni el racismo de la gorileada que no se banca a los negros, aunque ahora parece que lo quiere a Moyano por rubio.
Pero tampoco nos tomen por pelotudos, queriéndose hacer los Ongaro de ocasión; una cosa no quita la otra.
Y paren de decir por cada cosa que hace el gobierno que no les gusta, que es una dictadura; porque parecen cacerolos.
¿O acaso el peronómetro de Moyano autoriza ese exabrupto con una presidenta elegida por 12 millones de votos?
Porque hasta donde se sabe, tiene mandato hasta diciembre del 2015, y dentro de un año más o menos hay elecciones legislativas, con internas abiertas obligatorias; donde el que quiera, puede presentar una lista.
Como podía el año pasado, sin ir más lejos.
Sea en el Frente Para La Victoria, o en la Coalición Cívica.
Si nos ponemos de acuerdo en eso, a lo mejor es más fácil entenderse en el resto.
3 comentarios:
Ah bueno, pero si no menciona la valija de Antonini Wilson esto está incompleto. Me falta ese cierre para darle crédito, che.
Me parece que Moyano padre lo manada al cabeza de tacho del hijo gordo para que diga 2 millones de pelotudeces y despues a el le quede margen de "negociación" . Pero esta vez con la puteada en público por la pantalla de TN la recontracagó. Yo que soy afiliado desde 1984 y decidí que soy peronista por corazón conviccion y pensamiento (gracias al Colorado Ramos) digo que cuando recibis el apoyo de la SRA Buzzi y TN te cruzaste al otro lado y realmente para mi no tiene vuelta. Que se vaya a la puta que lo parió. Firma Oscar Borrajo
No soy peronista, pero hoy leí (creo que en el blog de Antonio) una frase muy adecuada: El que insulta a Cristina no es mi compañero.
Háganme lugar, mío tampoco. ¿Cristina hija de puta? ¿a ver, quien es ese Mariotto? ¿Pueden ser mas obvios, miserables y traidores, bloqueando combustible en pleno invierno al grito de "vamos por todo"?
Es dificil surfear entre ponerse firme y marcar lo malo... o darle de comer a los gorilas. Esa discusión podía entenderla en los ultimos años cuando el tema era Moyano, pero ya no hay caretas, me parece. ¿quien decía: el leal critica, el obsecuente traiciona?
Me gustaria leer a los voceros de Scioli defendiendolo y tratando de venderlo como la mejor continuación del proyecto despues de ésto. Abrazos
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