LA FRASE

"NO ES TAN DIFÍCIL DE ENTENDER: ESTELA DE CARLOTTO ES GOLPISTA Y EL GENERAL VIDELA LO ÚNICO QUE HIZO FUE COMBATIR AL TERRORISMO." (VICTORIA VILLARRUEL)

martes, 14 de mayo de 2013

EL DESEMBARCO


Leemos en la corneta: "Legisladores de la oposición intimaron al titular del directorio de la Comisión Nacional de Valores (CNV), Alejandro Vanoli, para que no intervenga el Grupo Clarín, con argumentos que van desde la acusación de ser considerado “infame traidor a la patria”, hasta denunciado por “abuso de autoridad”.
La diputada Elisa Carrió (Coalición Cívica) le envió ayer una carta documento a Vanoli, en la que le advirtió que se “abstenga” de resolver la intervención, porque sería “violatorio” de la Constitución Nacional. Lo hizo, “frente a la información certera de que ese Directorio estaría evaluando proceder a la intervención de grupos empresarios como parte de su estrategia nacional de aniquilar la libertad de expresión”. Carrió recordó que la Constitución prevé para quienes lleven adelante medidas “que tiendan a interrumpir el orden constitucional y el sistema democrático” serán considerados “traidores a la patria y podrán ser “inhabilitados a perpetuidad a ejercer cargos públicos y excluidos de los beneficios del indulto y la conmutación de penas”.
También la diputada Patricia Bullrich (Unión por Todos) se opuso a que la CNV actúe contra el Grupo Clarín y sostuvo que “no puede actuar como un organismo represivo que intervenga empresas que a la Presidenta no le gusten. La discrecionalidad y el abuso de poder están penados en el Código Penal y aquellos funcionarios que lo hagan los denunciaremos de manera inmediata. Por eso les advertimos respecto a las consecuencias judicas de la acción que están por realizar y le pediremos a la sociedad que no nos deje avasallar en nuestra libertad de expresión, que ya está a punto de extinción”.
Desde la semana pasada, distintas fuentes vienen alertando sobre la intención del Gobierno de preparar algún tipo de intervención en Clarín Papel Prensa. El tema sobrevoló ayer el noticiero Telenoche , de Canal 13 – del Grupo Clarín –, donde debatieron sobre esta grave situación y las denuncias formuladas en el programa Periodismo Para Todos . los periodistas Jorge Lanata, Marcelo Bonelli, Joaquín Morales Solá, Nelson Castro, Fernando González, Carlos Pagni, Daniel Santoro y Nicolás Wiñazki, con la conducción de María Laura Santillán y Santo Biasatti. Desde el estudio de Todo Noticias, el periodista Adrián Ventura contó cuáles serían las herramientas legales que usaría la CNV para esa posible intervención.
Lanata conmovió a su audiencia al cierre de su programa del domingo, cuando después de mostrar las pruebas sobre la bóveda que construyeron los Kirchner en su casa de Calafate, dijo: “Termino el programa de hoy sin saber si el domingo que viene vamos a estar acá. No tengo idea. Si algo pasa, si nos sacan, hagan algo. No sé qué. Hagan algo. No les pido que lo hagan por mí. Se los pido, pero para que hagan algo por ustedes ”. (los subrayados son nuestros)

La verdad, como esta semana no estuvimos con Cristina (la anterior tampoco, aclaramos), no sabemos a ciencia cierta si piensa o no intervenir el Grupo Clarín, o ponerlo a Guillote Moreno como CEO en lugar de Magnetto; pero mucho tampoco interesa. 

Desde ya que no parece oportuno, porque les permitiría ponerse en el papel de víctimas; aunque el argumento de "la libertad de expresión" es una coartada a la que apelan cuando tienen el culo sucio, o pretenden una especie de fuero periodístico; como Lapegüe con la AFIP, su empresita y la causa de las facturas truchas. 

Lo cierto es que daría la impresión que hay cierta gente que está un poco pasada de vueltas, o de merca, aunque en el caso de la Pato Bullrich podríamos atribuirlo al tinto, y en el de Carrió a alguna dieta que la tiene trastornada, o simplemente está atravesando otra fase de su enfermedad mental, que no recordamos bien cual era; pero que la tiene, la tiene. Porque insiste con las cartas y denuncias en la justicia, aunque muy bien que digamos no le va.

Todo este asunto de la intervención al Grupo tiene su origen en la Ley 26.831 que regula los mercados de capitales (ver acá) que en su artículo 20 dice la Comisión Nacional de valores puede "Designar veedores con facultad de veto de las resoluciones adoptadas por los órganos de administración de la entidad, cuyas disposiciones serán recurribles en única instancia ante el presidente de la comisión; (y) Separar a los órganos de administración de la entidad por un plazo máximo de ciento ochenta (180) días hasta regularizar las deficiencias encontradas. Esta última medida será recurrible en única instancia ante el Ministro de Economía y Finanzas Públicas;..."

A esta altura del relato cabe recordar que el Estado (es decir todos nosotros) es accionista minoritario tanto de Papel Prensa (donde tiene alrededor del 28% del paquete accionario), como del propio hólding Clarín, donde tiene el 9 % de las acciones a través del Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la ANSES, heredado de las AFJP's. Porque hay que recordar que en los 90' Clarín se financió con "la plata de los jubilados", a los que estafó claramente como sabemos.

Y que como accionista minoritario tiene derechos, que no han sido muy respetados que digamos por Clarín (en las asambleas y decisiones del directorio del Grupo), o por Papel Prensa, donde Clarín y La Nación manejan la compañía a partir del pacto de sindicación de acciones que firmaran en la dictadura cuando Videla se las entregó a cambio de su complicidad: el Estado no pudo designar representantes en la comisión fiscalizadora (el órgano de control interno) y tuvo innumerables dificultades para tener acceso a información clave de la compañía. 

Ambas empresas (el Grupo Clarín y Papel PrensA) cotizan sus acciones en bolsa haciendo oferta pública y por ende están sometidas (de acuerdo a la ley 19550) a fiscalización y control estatal permanente; o sea sobre todos los actos de su gestión, incluyendo obviamente los más relevantes: balances, remuneraciones de los miembros del directorio, planes de inversión, políticas de gastos y compras, mecanismos de control interno y auditoría externa, etc. 

Y como tales están sujetas a la regulación y control de la CNV, que fueron incrementadas en el marco justamente de la reforma aprobada hace poco por la Ley 26.831.

Ahora bien, cualquier decisión que pudiera tomar la Comisión Nacional de Valores (supongamos que, como dicen los socios de Papel Prensa y Expoagro, el gobierno decide intervenir el Grupo, o Papel Prensa) es revisable en la justicia; donde no pueden decir que les falten apoyos: ver si no lo que ha pasado con las resoluciones sobre Papel Prensa, con la causa de la ley de medios, con las denuncias sobre lavado de dinero (sobre lo cual tienen que ver mucho los requerimientos de información de la CNV esta semana a Clarín), y más recientemente, como le ha ido al gobierno en con otros casos, como el del predio de la Rural, o las multas de Moreno a las consultoras que miden la inflación (ver a Ventura acá).

Lo que se ve en la cobertura que le dan a éste tema los hermanitos Clarín y La Nación son encendidos llamados a la resistencia civil para avivar los alicaídos cacerolazos, basados en "fuentes periodísticas" que son -en todos los casos- sus propios empleados, en sus diarios, radios y programas de televisión.

Y Lanata victimizándose para obtener más ráting el domingo siguiente, cuando los tarados que le creen todo se amontonarán frente a los televisores para ver si hace el programa, o transmite desde Guantánamo o desde la clandestinidad.   

Queda por verse que eficacia concreta tendrá (más allá de la audiencia cautiva, en términos de ráting y de formateo político) esta estrategia de los medios hegemónicos en presentarse como víctimas, y quedar reducidos en la práctica a house organs de los grupos empresarios que son sus dueños, pretendiendo que la gente común se identifique con esos intereses y los asuma como propios.

Hasta acá esa estrategia vino fracasando (como lo comprueban los resultados electorales), y la apuesta es a que eso cambie, con el cambio de humor social (que se trata además de provocar), o los vaivenes de la economía.

Aunque en realidad parece una estrategia de apriete hacia los tribunales, donde el Grupo Clarín -sobre todo- tiene varios asuntos pendientes: las denuncias de lavado, la ley de medios a fallo de la Corte (reducida la discusión a sí tiene o no que desguazar Cablevisión, que es el 90 % de su facturación, como explicó Moreno en "6 7 8"), la causa de lesa humanidad por la apropiación de Papel Prensa (con la posibilidad de que Mitre y Magnetto sigan el camino de Massot), o el hecho concreto de que -pese a la ley que regula la producción de papel para diarios- Papel Prensa sigue produciendo por debajo de su capacidad, para favorecer la provisión de papel para sus accionistas mayoritarios (Clarín y La Nación), en desmedro del resto de los diarios del país; que por eso no ven con malos ojos una eventual expropiación (tal el proyecto presentado por algunos diputados del FPV) de parte del paquete accionario de la empresa, para que el Estado pase a tener el control.

Por no mencionar otros detalles menores, como que el paso de Moreno por la asamblea de accionistas del Grupo dejó en evidencia la oscuridad de sus manejos, como por ejemplo para que se le paga un sueldo abultadísimo a Jorge Rendo, el "Gerente de Operaciones Externas" del Grupo (cuyas funciones no supieron contestarle a Moreno en que consistían); algo así como el valijero de Magnetto; y que justamente en esa asamblea llamó a los otros socios de la AEA (Techint, Arcor, Alpargatas) a salir en su defensa.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente como siempre, un abrazo. Florencia.