Lo que ven en la imagen son los números globales de la provincia al 30 de junio pasado, es decir con medio ejercicio transcurrido: un déficit de algo más de 408 millones de pesos (el proyectado en el Presupuesto era de 171 millones a esa fecha) antes de "Contribuciones" (el traspaso de recursos entre los organismos del Estado para solventar sus gastos), y de algo más de 600 millones después (el proyectado era de casi 165 millones); es decir (según se lo tome) un proyectado anual que oscilaría entre los 800 y los 1200 millones en rojo, y con mayor necesidad de financiamiento intra Estado; echando mano de todas las "cajas" mediante el uso del 100 % del FUCO (Fondo Unificado de Cuentas Oficiales).
Menos de déficit que los 1669 millones que dejó Binner en el 2011 (en azul ven sus números a la misma altura del año pasado), pero todavía alto, contexto bajo el cual la Legislatura discute la reforma tributaria; y más interesante de ver aun es la composición de los gastos del gobierno de Bonfatti, en ésta otra imagen:
Como se puede ver, siguen las tendencias constantes de los años del socialismo en el gobierno: preponderancia de los gastos corrientes (que superan el 95 % del total del gasto), incidencia creciente del gasto en "Personal" (un 44,81 % en la primera mitad del año), lo mismo que de los subsidios a la enseñanza privada (un 8,39 % del total).
Baja incidencia de los gastos de capital, y dentro de éstos, irrisoria presencia de la obra pública: acorde con el paráte que evidencian los diferentes trabajos en toda la provincia, "Construcciones" representó en el primer semestre apenas el 2,22 % del gasto total del Estado santafesino, y en plata, poco más de 367 millones de pesos: casi lo mismo que Santa Fe recibió en la primera mitad del año del Fondo Federal Solidario, o fondo soja.
Si los números observados hasta el 30 de junio se proyectan anualmente, vemos que la partida de los subsidios a la enseñanza privada terminaría teniendo una ejecución del 98,65 % respecto a lo planteado en el Presupuesto, y la de "Personal" un 109,16 %; o sea que tendrá que haber nuevas reasignaciones de recursos (mediante el uso de los tan denostados "superpoderes") para poder utilizarlos para pagar sueldos, aun cuando no haya nuevos acuerdos salariales.
Los gastos en "Servicios No Personales" (que involucran por ejemplo publicidad, gastos de impresión, viáticos, servicios de vigilancia o procesamiento informático de datos, telefonía celular y fija, luz, agua, gas, etc de las dependencias estatales) proyectarían hacia fin de año una ejecución del 83,44 % de lo previsto en el Presupuesto, pese a las anunciadas (y nunca concretadas) medidas de racionalización de gastos del gobierno provincial.
Y en el caso de la obra pública, si la tendencia no se revierte en la segunda mitad del año, el gobierno de Bonfatti terminaría ejecutando apenas el 39,16 % de la obra total prevista en el Presupuesto 2012.
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