LA FRASE

"QUE DESDE LA VICEPRESIDENCIA SE SOSTENGA UNA AGENDA QUE NO SEA LA DEL GOBIERNO ES ALGO QUE NUNCA SE HA VISTO." (JULIO COBOS)

martes, 5 de julio de 2016

MERCADO AGRESIVO Y CUPONES PBI


Por A.C.

Un gobierno que solo cree en las fuerzas del mercado Y que por eso tomó medidas como una enorme devaluación del peso, la liberación del tipo de cambio, la apertura de las importaciones y eliminó los controles de salida de divisas del país. De ese modo, suponía que eliminaba cualquier posibilidad de corrida cambiaria, porque al precio de la divisa estadounidense “lo fija libremente el mercado” , y la cotización responde a los “valores sincerados” de una “economía abierta”.

Sin embargo, éste gobierno en junio tiene que salir a vender en un solo día más de 500 millones de dólares de las reservas del país para frenar la escalada de la cotización del dólar. La excusa que dicta el oficialismo y que los medios replican, es que la venta se hace con el objetivo de bajar los costos por los contratos de "dólar futuro" que vencían en el mes de Junio ¿pero entonces, si los jugadores presionan sobre el precio del dólar cerca del vencimiento de los contratos para que el precio de la divisa suba y obtener más ganancias, hay que salir a controlarlos desde el Banco Central? 

¿Pero cual es la razón de tener que intervenir en el mercado si el libre juego genera un automático equilibrio entre la demanda de divisas y la oferta?  ¿Porqué intentar desde el gobierno alterar los valores de los contratos que libremente se celebraron? ¿No hay reglas claras y seguridad en los negocios?

¿La baja de ingreso de divisas vía liquidación de exportaciones y el nulo ingreso de inversiones desde que asumió éste gobierno, tendrá que suplirse con la intervención permanente del Banco Central?  Sería muy contradictorio, porque perderían sentido todas las medidas económicas que se tomaron hasta ahora.

Pareciera que el mercado empezó a oler sangre en un gobierno sin ideas ni recursos suficientes para neutralizar presiones cambiarias, y aunque en la mayoría de los medios ahora ya no aparezcan títulos catástrofes sobre la escalada del dólar y no se hable más de corrida cambiaria, se lo mire por donde se lo mire, lo que ocurrió en éstos días tiene un solo nombre.

Y en éste marco de debilidad, el gobierno solo sigue apelando a la solución mágica -pero no eterna- del endeudamiento. Y aparecen entonces decisiones llamativas, como la de salir a tomar más deuda con la excusa de rescatar los bonos atados al rendimiento del PBI.
Para eso, la Secretaría de Finanzas colocó bonos (es decir se tomó nueva deuda) por 2.750 millones de dólares, que –supuestamente- se destinarán a la futura recompra -a fin de éste año- de los cupones atados a la evolución del PBI.

Es sugestivo primero la urgencia con que se plantea la necesidad de recompra de estos cupones que vencen recién en el año 2035, y que además solo pagan cuando el PBI del país crece por encima del 3,3% anual.

Con la política económica del actual gobierno que produjo una caída abrupta de la actividad, el PBI argentino presenta un descenso pronunciado, y según previsiones nacionales e internacionales, al final del año 2016, el país no solo no tendrá crecimiento alguno en relación al año 2015, sino que el PBI en el mejor de los casos será igual a cero. De modo que estos cupones atados al PBI están muy lejos de tener que pagar renta alguna. Por eso llama la atención ésta urgencia de la conducción económica.

Y también es llamativo que desde el mes de mayo de éste año, estos cupones PBI vienen mostrando un alza sostenida  en su cotización, como se puede corroborar en cualquier página bursátil. Y como comenzaron a subir fuerte antes de que se supiera públicamente el anuncio del Gobierno, esto hace suponer que algunos actores tenían conocimiento de la medida antes que se anunciara.

Y cabe preguntarse entonces quienes son los que cuentan con información privilegiada que les brinda el gobierno. ¿Estas maniobras favorecen la transparencia del mercado? ¿Estas son las reglas claras que declaman los integrantes del equipo económico de Macri?

Y otra pregunta que inevitablemente surge es quienes serán los beneficiados por ésta inexplicable decisión.

Para la recompra de los cupones PBI, los nuevos bonos que se emitieron (bajo ley Nueva York, porsupuesto) tienen una denominación mínima de 150 mil dólares, y no pueden ser fraccionados, de manera que es evidente que no están primordialmente destinados a operadores del mercado argentino. Y como no es ningún secreto que los mayores tenedores de estos cupones atados al PBI, son fondos de inversión estrechamente vinculados a los recientemente muy beneficiados fondos buitres, la operación tiene una sola explicación: garantizar anticipadamente una rentabilidad que la perspectiva de la economía argentina no ofrece. Una nueva “buena señal” del gobierno a los mercados, generando nueva deuda.

Mientras no ingresan inversiones a causa de una economía en recesión y con una inflación inmanejable, mientras se destruye la producción nacional abriendo importaciones, mientras las exportadoras retienen operaciones presionando para otra suba del dólar, mientras las reservas bajan, el gobierno tiene como único plan la toma de deuda externa.

En solo seis meses, se tomó deuda por 15.000 millones de dólares para abonar a los fondos buitres, otros 5.000 millones del préstamo otorgado por un conjunto de bancos, y ahora 2.750 millones para esta inexplicable recompra de bonos que se haría a fin de año. 

En seis meses un total de 22.750 millones de dólares de nueva deuda, de los cuales no queda aquí ni un solo dólar, mientras la producción nacional se desploma, la recaudación por eso baja y las reservas siguen cayendo. El milagro económico del libre mercado.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Y que pasó con el mercado transparente? ¿Y los socios sojeros? ¿Y la lluvia de inversiones? ¿Y el segundo semestre? ¿Y Candela?
Es más probable que se inunde el Sahara antes que lluevan inversiones con Mauri

Anónimo dijo...

Luis dice:
Si estos bonos nuevos vienen como mínimo de 150 mil dólares cada uno, me anoto para comprar por lo menos 20. Ahora que cobro el aguinaldo aprovecho para invertir.

Anónimo dijo...

Muchachos, no olviden que este año está dedicado a tratar de enderezar el desastre heredado de kráneos como Kicillof en general, y Moreno en particular (ambos con la Estación Venezuela como destino final). Esta emisión de bonos es para RECOMPRAR Cupones PBI inflados, es decir, es un Recambio de Pasivos beneficioso porque la nueva tasa hoy es más baja y no hay aumento neto de Deuda.
Si la ideología nos nubla el razonamiento entonces deberíamos dedicarnos a las artes contemplativas, de lo contrario estaremos predestinados al fracaso (tal como lo verificó al anterior gobierno).

La Corriente Kirchnerista de Santa Fe dijo...

Escuchá genio, as del mundo mundial: 1) Los 2750 palos de nueva deuda los tomamos, los cupones del PBI no los recompramos, y cayeron estrepitosamente en su valor (un 38 %) por el anuncio 2) En 7 meses hicieron crecer la relación deuda/producto más baja de la historia en moneda dura (que recibieron como "pesada herencia" y con acreedores privados extranjeros un 5,7 % del PBI, un ANSES entero, o 55.000 palos verdes, un Megacanje, si querés. 3) Este año el PBI biene cayendo un 3,6 % interanual, así que el año que viene no pagamos cupón PBI y a este paso, no lo pagaremos en todo el gobierno de Macri, o sea que la "recompra" fue: a) una excusa b) un negociado más de Prat Gay & Cía. Si a nosotros la ideología nos nubla, vos vivís en una nube de pedos.