En el Boletín
Oficial de hoy está publicada (verla completa acá) la Resolución 242 de la
Secretaría de Comercio que encabeza Miguel Braun, por la que se modifican los
plazos que tiene los exportadores para ingresar las divisas al país y
liquidarlas a través del sistema financiero.
Es la segunda vez
que el gobierno de Macri modifica las normas al respecto: en mayo pasado el
propio Braun había dictado la Resolución 91 por el cual llevaba a 365 días (es
decir, un año) el plazo, que desde el 2001 oscilaba entre los 15 y 180 días
corridos, según las posiciones arancelarias, o sea el tipo de productos que se
exportaban.
Lo llamativo en
éste caso es la magnitud de los cambios que introduce en el sistema la nueva
resolución, en su artículo 1º: “Los exportadores cuyas operaciones están comprendidas en las
posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común del MERCOSUR (N.C.M.) que se
consignan en las planillas, que como Anexo I forman parte integrante de la
presente resolución, deberán ingresar las divisas al sistema financiero local
dentro del plazo de MIL OCHOCIENTOS VEINTICINCO (1.825) días corridos” ” (las negritas son nuestras)
Para que se
entienda: los que exportan podrán retener los dólares obtenidos por las
operaciones del comercio exterior hasta cinco (5) años, antes de ingresarlos al
país y liquidarlos en el mercado de cambios a través de las entidades
financieras.
Las posiciones
arancelarias que se mencionan son todas las del Nomenclador, por ende la medida
comprende a la totalidad de las exportaciones, desde las agropecuarias o del complejo
aceitero, hasta las industriales.
Los argumentos son
-como mínimo- gaseosos: “...a los fines de mejorar la oferta comercial de la economía
local, la competitividad de las exportaciones argentinas, flexibilizar las
condiciones de financiamiento, potenciar la inserción internacional y brindar
condiciones de previsibilidad financiera, corresponde adecuar los plazos
otorgados en el Anexo de la resolución mencionada en último término en el
considerando precedente.”.
En apenas tres
meses el mismo gobierno que había llevado el plazo para vender los dólares
(alimentando así la oferta en el mercado de cambios) a un año, lo quintuplica,
para todas las exportaciones.
Los dólares que
provienen del comercio exterior son los únicos que alimentan la oferta de divisas
en el mercado de cambios en forma”genuina”, es decir como consecuencia de la
actividad económica del país y no del endeudamiento externo, o la entrada de
capitales financieros especulativos.
También lo hacen
los que provienen de la inversión extranjera directa, pero en éste caso se
compensan en parte con los dólares que se van por la remisión de utilidades y
dividendos de las compañías multinacionales que operan en el país; un grifo que
por cierto el gobierno ha abierto con generosidad.
Es evidente que los
grandes grupos exportadores han ejercido presión sobre el gobierno para obtener
un virtual seguro de cambio: con esta medida, los que tendrán la llave del
mercado de cambios para determinar el valor del dólar serán ellos, porque el
poder del Banco Central para contener eventuales corridas contra el peso
vendiendo dólares en el mercado si el precio se disparara disminuye
considerablemente si los que exportan los pueden “encanutar” hasta cinco años,
esperando el momento óptimo para liquidarlos.
De más está decir
que no todos los que exportan se pueden dar ese lujo porque hacen falta
espaldas financieras para hacerlo, pero todos podemos hacer una lista mental de
los grupos económicos que sí están en condiciones de hacerlo: por ejemplo, las
cinco o seis firmas que concentran la mayor parte de las exportaciones del
complejo oleaginoso.
Podrá aducirse que
el gobierno teme una apreciación del tipo de cambio por la llegada de dólares
por el blanqueo, el endeudamiento y el canal financiero, pero en todo caso eso
no justifica por sí solo la enormidad del plazo (cinco años) otorgado a los
exportadores para “soltar” los dólares; y si el canal financiero de entrada de
dólares se cierra, el Estado se está cerrando solo el canal comercial como vía
de ingreso genuino de divisas.
En momentos en los que el dólar tocó su máximo en un mes y medio, bajaron las tasas (y los ahorristas se vuelcan al dólar), las reservas perdieron 365 millones de dólares en dos días (viernes y lunes) y los exportadores redujeron su ritmo de liquidación a 100 millones diarios, la
medida de Braun significa dejarles la puerta abierta para
forzar otra devaluación; con los efectos que todos conocemos.
Y si no lo hacen ahora -quizás contribuyendo a cerrar el año sin conflictos- lo pueden hacer perfectamente cuando quieran; sin contar que además cinco años son una eternidad para fugar las divisas, bicicletearlas en el mercado financieras (por ejemplo depositando los dólares en los bancos y quedándose con los intereses) o prestárselos al propio gobierno.
Con ese plazo, todas las variantes del pedal imaginables son posibles.
Y si no lo hacen ahora -quizás contribuyendo a cerrar el año sin conflictos- lo pueden hacer perfectamente cuando quieran; sin contar que además cinco años son una eternidad para fugar las divisas, bicicletearlas en el mercado financieras (por ejemplo depositando los dólares en los bancos y quedándose con los intereses) o prestárselos al propio gobierno.
Con ese plazo, todas las variantes del pedal imaginables son posibles.
4 comentarios:
Con esta medida delirante, el Banco Central se muda definitivamente a las oficinas de Cargill y Monsanto. Si Sturzenegger ya estaba pintado, y solo dedicado a asegurar el negocio de las Lebacs,de ahora en más para tomar cualquier decisión sobre emisión o cambiaria, va a tener que pedirle autorización primero a las cerealeras. Un suicidio colectivo y un enorme negocio para no más de 100 empresas.
El Colo.
No se puede creer. Pensar las cosas que tenemos que aguantar que nos digan.. y esto ...esto no tiene perdon. No revise diarios lo dicen? Guarde como archivo la pagina del Boletin Oficial lo voy hacer popular entre mi gente.
Da perfecta cuenta de quienes son y a donde quieren llegar. Salvemonos.
Solamente acá:http://www.pagina12.com.ar/diario/ultimas/20-308132-2016-08-30.html y acá: http://www.eldestapeweb.com/vuelven-extender-el-plazo-las-cerealeras-liquidar-divisas-n20383
Para robarse el país, antes recurrían a las botas. Ahora, son ladrones legales legitimados por los votos, mientras la gilada se escandaliza por la valija de Lopez. Cada cerealera, es Lopez a la centésima potencia.
Publicar un comentario