EL PATITO FEO SOCIALISTA NO SABE DE LO QUE HABLA

El escándalo (diría Pino) de la impresión de las boletas de las elecciones del 24 de julio saltó a la tapa de Tiempo Argentino, y fue tratada anoche en "6 7 8", y eso provocó la histeria de los socialistas, porque claro: ahora que Hermes es candidato a presidente, no es conveniente que se sepa allá en Buenos Aires que el hombre -tan pulcro y modosito él- carga esqueletos en el placard.

Y una de las más histéricas es Alicia Cicliani (a) el patito feo del socialismo; como lo marca acá Barricada.

Esta chica Ciciliani es una amiga de este blog, onda Morandini: es increíble la capacidad de Binner para rodearse de mujeres calcadas de Coti Nosiglia, la famosa "Boluda total" de Fabio Alberti.

Tan boluda total, que se pone a defender lo indefendible en ésta nota de La Capital, demostrando que no entiende un pomo, o por lo menos no sabe lo que Binner firma.

No vamos a volver a decir "nosotros lo dijimos primero" en este asunto de las boletas y el negocio del gobierno de la provincia con Clarín, El Litoral y Techint; pero sí vamos a volver a colgar aquí el decreto de adjudicación del contrato firmado por el mismísimo Hermes. 

Y lo hacemos para desmentir a Ciciliani.

Que dice en la nota: “La boletas para el nuevo sistema electoral no pueden ser impresas en cualquier imprenta. Abrimos la licitación, todas las imprentas cotizaron y a las dos más bajas se les pidió que mejoraran las ofertas”.

Falso: lean íntegro el decreto, y verán que jamás el gobierno provincial convocó a una licitación pública para contratar la impresión de las boletas. Por el contrario, el decreto se explaya en exhaustivos considerandos para justificar por qué no se hizo licitación, y se realizó una contratación directa.

No hubo llamado en los diarios y medios masivos de comunicación, con un plazo mínimo para la apertura de ofertas (como lo exigen la Ley de Contabilidad y la Ley 12.510), y no los hubo porque se adujeron razones de urgencia; como lo dice el decreto.

Dice Ciciliani: "funcionaron todos los organismos de control del Estado para realizar esta adjudicación".

Parcialmente verdadero, o sea falso: intervinieron todos los organismos que el gobierno de Binner puede digitar políticamente, sea porque están integrados por funcionarios políticos, o por funcionarios administrativos que deben favores al gobierno, como ascensos meteóricos e inexplicables en sus carreras en estos años de gobierno del Frente Progresista.

El peso argumental del decreto para adjudicar el contrato en forma directa está dado por el informe de la Síndica General de la provincia (funcionaria política designada a dedo por Binner) y el Fiscal de Estado, es decir el asesor jurídico del propio gobernador.

Pero siguen los despistes de Ciciliani: en los tweets que reproduce Barricada dice: "parece que está mal que el Estado imprima la boleta única" y "el Estado santafesino...imprimió la boleta única".

No niña, despiértese: el Estado no hizo nada de todo eso, justamente porque contrató a empresas privadas.

Y lo dice el decreto del propio Binner:

"Que, ante la inminencia de la realización del proceso eleccionario, las opciones ante las cuales se encuentra la Administración consisten en: a) asumir directamente la provisión de las boletas o; b) proceder a seleccionar un co–contratante, a través de un procedimiento transparente, eficaz y expeditivo;

Que, como se expuso, la Imprenta Oficial informó que no contaba con los recursos humanos y técnicos ni siquiera para asumir la impresión de las boletas para la elección primaria, por lo que la primera opción queda descartada, debiendo necesariamente recurrirse a la segunda;"

Imaginemos por un momento la misma situación con otros portagonistas: Cristina contratando en forma directa y sin licitación cualquier cosa, con empresas amigas, se producen cuestionamientos a la decisión, y sale a defenderla Aníbal Fernández, con argumentos falaces.

¿Qué dirían en ese caso Clarín y El Litoral?

Actualización para Ciciliani: acá el mismísimo Pepitito Marrone dice en el diario del gran impresor Víttori lo siguiente:

a) El Estado (a través de la Imprenta Oficial) no podía hacer las boletas, por eso contrató imprenta privadas;

b) No tenían tiempo para hacer una licitación, por eso no la hicieron: fue una contratación directa;

c) Todos los organismos de control que intervinieron, están formados o conducidos por funcionarios políticos, y no nos hagan hacer un rastreo de los antecedentes inmediatos (en los últimos tres años y medios digamos) de los tres funcionarios de carrera que intervinieron.

Que es lo que queríamos demostrar, como nos decían en la escuela con los teoremas.

Así que Ciciliani, seguí en Patito Feo y con Adrián Suar, que de boletas no sabés un pomo.